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¿Qué hacer con algo tan importante y decisivo como la entrevista de trabajo? Jugársela el todo por el todo.
Mira algunas recomendaciones que sin duda te servirán:
Aún sabiendo de la importancia que tienen este tipo de citas las personas llegan tarde. ¡Por favor, no lo hagas! Esto te muestra como una persona irresponsable y desinteresada.
También se han dado casos de personas que llegan una o media hora antes, es bueno que seas cumplido, pero la cita es a una hora específica, mejor anúnciate 5 minutos antes de la hora de tu cita, así cuando llegue la hora te harán seguir sin inconvenientes.
¡Todos creeríamos que esto sobra decirlo, pero no! Ir bien presentado no significa tengas que llevar saco y corbata o vestido necesariamente, con llevar ropa limpia y bien puesta es suficiente.
En una entrevista queremos mostrar lo mejor de nosotros mismos, y cómo nos vemos habla mucho de nosotros. El punto anterior, llegar a tiempo, te puede ayudar con esto, si no corres no llegarás con sudor o con el olor del cigarrillo, en el caso de que fumes. Tendrás tiempo para no correr y lavarte las manos o arreglarte un poco antes de la cita. Todo esto va mas allá de los tatuajes, aretes y demás.
Es difícil admitirlo, pero a veces los nervios ganan.La fórmula para combatirlos es intentar relajarse y preguntarse a uno mismo: ¿qué es lo peor que puede pasar? La respuesta es sencilla: "no conseguir el trabajo y ya".
En el momento en que racionalices tus nervios todo va a empezar a fluir y los nervios, temores e inseguridades desaparecerán. Vas a ver como las ideas empiezan a desbordar y vas a retomar el control de la situación.
Saber a qué se dedica el sitio en el que vas a trabajar y todo lo que puedas acerca de tu cargo va a estar a tu favor. Esto muestra interés y motivación de tu parte, muestra que eres una persona preparada y que sabe dónde está parada. Con la información que consigas vas a poder mostrar cómo tus aptitudes laborales son compatibles con la misión y los valores de la compañía, podrás resaltar tus conocimientos y áreas de experiencia que coinciden o sobrepasan los requerimientos listados en la descripción de la oferta de trabajo. Con la información podrás mostrar por qué tú eres el indicado para ese trabajo.
Tu actitud muestra cómo sería trabajar contigo, si te muestras como una persona demasiado extrovertida o muy tímida e introvertida, tu actitud puede jugar en tu contra. Las personas que tienden a ser equilibradas y amables obtienen mejores resultados, nadie quiere contratar a una persona que lo haga sentir intranquilo.
Este es un equilibrio delicado, no queremos aburrir a la persona que nos esté entrevistando, ni debemos responder con monosílabos, las dos cosas son igual de perjudiciales. Escuchar atentamente a las preguntas y responder las preguntas que nos hace es de suma importancia, pero debido a los nervios muchas personas no prestan atención a las preguntas y sus respuestas salen sin coherencia o fuera de contexto. Yo te recomiendo ser concreto y claro. ¡Es importante pensar antes de hablar!
No es una buena táctica hacerse el santo en una entrevista de trabajo o simular ser perfectos, es mucho más valioso mostrar que somos conscientes de nuestras cualidades y defectos. ¡La honestidad es una cualidad valiosísima a la hora de contratar a alguien!
Si no está claro el valor de la remuneración económica, es decir el pago por la labor que estarías destinado a hacer, y te hacen esta pregunta, debes estar preparado. Esta es una de preguntas más difíciles, ya que si fijamos un precio muy alto, podría salirse del presupuesto de nuestro empleador. Si por el contrario vamos demasiado bajo, daremos la impresión de que subvaloramos nuestras capacidades y nuestra labor.
Sé cauteloso y haz una pequeña búsqueda de este valor en otras empresas o para cargos similares para hacerte una idea. Lo más importante es que siempre sepas lo que es justo para ti y para tu nuevo empleador.
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