Alfredo Gómez Morales
Alfredo Gómez Morales (Buenos Aires, 29 de marzo de 1908 – íd., 12 de octubre de 1990) fue un economista argentino, que ejerció como Ministro de Asuntos Económicos durante el gobierno de Juan Domingo Perón y Ministro de Economía de su país durante la presidencia de María Estela Martínez de Perón.
Alfredo Gómez Morales | ||
---|---|---|
| ||
Ministro de Economía de la Nación Argentina | ||
21 de octubre de 1974-2 de junio de 1975 | ||
Presidente | María Estela Martínez de Perón | |
Predecesor | José Ber Gelbard | |
Sucesor | Celestino Rodrigo | |
| ||
Ministro de Asuntos Económicos de la Nación Argentina | ||
4 de junio de 1952-26 de abril de 1955 | ||
Presidente | Juan Domingo Perón | |
Predecesor | Cargo creado | |
Sucesor | Cargo disuelto | |
| ||
Presidente del Banco Central de la República Argentina | ||
19 de enero de 1949-3 de junio de 1952 | ||
Presidente | Juan Domingo Perón | |
Predecesor | Domingo Maroglio | |
Sucesor | Miguel Revestido | |
| ||
29 de mayo de 1973-2 de septiembre de 1974 | ||
Presidente |
Héctor Cámpora Raúl Lastiri Juan Domingo Perón María Estela Martínez de Perón | |
Predecesor | Jorge Bermúdez Emparanza | |
Sucesor | Hernán Aldabe | |
| ||
Información personal | ||
Nacimiento |
29 de marzo de 1908 Buenos Aires (Argentina) | |
Fallecimiento |
12 de octubre de 1990 (82 años) Buenos Aires (Argentina) | |
Nacionalidad | Argentina | |
Educación | ||
Educado en | Universidad de Buenos Aires | |
Información profesional | ||
Ocupación | Economista | |
Partido político | Partido Peronista | |
Distinciones |
| |
Firma | ||
Biografía
Alfredo Gómez Morales nació en Buenos Aires el 29 de marzo de 1908, viviendo su infancia y adolescencia en el barrio porteño de Villa Crespo. Sus padres eran Manuel Gómez y Josefa Morales, ambos inmigrantes españoles, que eran dueños de varias panaderías por la Capital Federal. Se recibió de Contador Público nacional y Doctor en Ciencias Económicas en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires.[1]
En 1933, a los 27 años, Gómez Morales ingresa a la administración pública como Inspector de Grandes Empresas en la Dirección General de Impuesto a los Réditos (DGI). Son sus estudios universitarios los que le abren las puertas de la administración pública. Enmarcada en un proyecto tecnocrático que conducía la DGI, que seleccionaba personal capacitado en las universidades del país. Gómez Morales pasa a integrar en estos momentos el equipo económico que Federico Pinedo comenzó a armar cuando fue nombrado como Ministro de Hacienda del gobierno de Agustín P. Justo, junto a otros jóvenes economistas como Ernesto Malaccorto, Guillermo W. Klein, Felipe Espil, Máximo Alemann, Miguel Culaciati, entre otros, que hasta entonces habían formado un grupo alrededor de Alejandro Bunge, y posteriormente de Raúl Prebisch. [2][3]
Gómez Morales se desempeña en esta Institución durante varios años, en los cuales le asignan distintos destinos. Estos son, sucesivamente, Añatuya, tres años en Chacabuco, y, Capital Federal. En 1938 se desempeña como Jefe de la delegación de la DGI en Rosario.
En 1944 el gobierno de facto del general Edelmiro J. Farrell nombra a Gómez Morales como Director de Abastecimiento, ámbito en el cual se desempeñaba desde 1943 como organizador. Esta institución era dependencia del ministerio de Hacienda. Su convocatoria es motivada por la valoración de su saber técnico y por las relaciones que ha gestado durante su desenvolvimiento profesional en la DGI. Cuando Juan Domingo Perón asume la presidencia en junio de 1946, Gómez Morales es Director de la DGI.
Fue presidente del Banco Central de la República Argentina entre 1949 y 1952, y simultáneamente ejerció como Ministro de Finanzas. En esos tiempos, Gómez Morales estaba bajo la influencia política del canciller Juan Atilio Bramuglia, junto a Roberto Ares y otros funcionarios de la rama económica del Ministerio de Relaciones Exteriores. Estos hombres urgían cambios fundamentales en la economía del país: la abolición del IAPI, el desmantelamiento de los controles de la exportación y una mayor cooperación con los Estados Unidos. También abogaba por el ingreso argentino en las organizaciones económicas y financieras internacionales, como lo eran el FMI y otras similares, y estudiaban la posibilidad de asegurar un crédito en dólares para aliviar la crisis en la balanza de pagos.
A principios de 1952, Gómez Morales elaboró el Plan de Emergencia Económica de 1952, que Perón presentó en febrero de ese año. El Plan se diseñó para ser realizado en nueve meses y tenía como objetivo principal reducir la brecha existente entre el consumo y la disponibilidad de bienes. La solución a la que aspiraba el documento estatal era aumentar la producción y lograr una mayor austeridad en el consumo, fomentando el ahorro. Eso significaba, en palabras de Perón, eliminar el derroche, reducir los gastos innecesarios y renunciar a lo superfluo, como medio para lograr aumentar las exportaciones y reducir las importaciones. El 4 de junio, Gómez Morales es anunciado como encargado de una nueva cartera, el Ministerio de Asuntos Económicos, cuyas funciones eran: formular y proponer al Poder Ejecutivo la política económico financiera de la Nación, coordinar y controlar la ejecución de las leyes y medidas de carácter general que tengan directa o indirecta atinencia con la materia económico-financiera, establecer la necesaria vinculación entre todos los organismos de Estado que tengan a su cargo funciones de la índole señalada y asesorar el Poder Ejecutivo en todos los asuntos internos y externos que tengan relación directa o indirecta con la economía o las finanzas del país, y realizar todos los estudios y cumplir todas las funciones que aquél le asigne, especialmente en materia de su competencia.
En su nueva tarea como ministro, Gómez Morales potenció el Plan de Emergencia Económica, que incluyo un ajuste del 45% del gasto público con el objetivo de bajar la inflación que había. Se estableció un congelamiento de salarios por dos años y aplicó políticas monetarias y crediticias constrictivas, medidas con las que logró reducir la inflación del 39% anual en 1952 a sólo un 4% en 1954. En el ámbito de la relación precios-salarios, propuso que se mantuviera el control de los precios, además del congelamiento de los salarios.
El Plan Económico para 1952 sirvió de transición hacia la declaración de objetivos políticos a largo plazo que el presidente anunció al Congreso y al país en su Segundo Plan Quinquenal, publicado en diciembre de 1952, para el periodo 1953-1957. Este Plan difería del Primer Plan Quinquenal por su definición de prioridades. La principal de ellas era esta vez el desarrollo del sector agrario, los recursos energéticos y las industrias pesada y minera, seguida de un mejoramiento en infraestructura. El texto también incorporaba el concepto que podía atraerse al capital privado, tanto interno como externo, para cooperar en la puesta en mecha del Plan. Al estipular que el Estado crearía “las condiciones adecuadas y las oportunidades favorables” para atraer esos capitales.
En 1953, el presidente Perón, a petición de Gómez Morales, pidió al Congreso que se aprobará una nueva ley de inversiones extranjeras, y en 1955 encabezó las reuniones con la Standard Oil para la explotación del petróleo en 50.000 kilómetros cuadrados al sur de la Patagonia, en el área de la provincia de Santa Cruz. [4]
En 1955 fue detenido por la dictadura de la Revolución Libertadora y confinado en la cárcel de Ushuaia, prisión que había sido cerrada por el peronismo, luego fue trasladado a Río Gallegos donde estaban detenidos varios dirigentes peronistas, entre ellos: John William Cooke, Alejandro H. Leloir, Héctor José Cámpora, Guillermo Patricio Kelly, Oscar Albrieu, Jorge Antonio, Ramón Cereijo. El alcance de la represión se pudo apreciar en toda su dimensión cuando Aramburu firmó un decreto por el cual se rehabilitaba a 92 000 trabajadores, pero quedaban excluidos de esta medida quienes hubiesen ocupado algún cargo en la CGT o sindicatos entre 1952 y 1955.[5]
Tras el regreso de Perón del exilio a la Argentina, fue nombrado nuevamente presidente del Banco Central por el presidente Héctor José Cámpora, en 1973.
El 21 de octubre de 1974 fue nombrado Ministro de Economía de la Nación. Su antecesor, José Ber Gelbard, había llevado adelante un plan de aumento de los salarios en términos reales, para fortalecer el mercado interno. Diversas razones, entre ellas la desconfianza de los empresarios para invertir a largo plazo, había debilitado la estabilidad de su política económica, y la creciente influencia de José López Rega en el gobierno de María Estela Martínez de Perón determinó el desplazamiento de Ber Gelbard.[6]
En su lugar fue elegido un economista más ortodoxo, Gómez Morales, que aplicó un plan económico liberal. También llevó adelante una devaluación cambiaria, llevando el valor del dólar estadounidense de $10 a $15.[7][6]
No obtuvo los resultados esperados, ya que la actividad económica no dio muestras de vigorizarse, mientras la presión de la CGT para obtener aumentos de sueldos se hacía cada vez más evidente. También se amplió la "brecha cambiaria", esto es, la diferencia entre el valor nominal de las monedas extranjeras para las operaciones que se hacían con el Estado y el valor de las mismas en el mercado de divisas.[7][6]
En los últimos días de mayo de 1975, Gómez Morales presentó su renuncia, que le habría sido pedida por López Rega. Fue reemplazado por Celestino Rodrigo, que aplicó de inmediato un severo "plan de ajuste", conocido popularmente como el "Rodrigazo", y que generó un pico de inflación y un aumento de los conflictos sociales de niveles nunca antes vistos durante gobiernos del Partido Justicialista.[7]
Sector privado, últimos años y fallecimiento
Pasó el resto de su vida dedicado al ejercicio privado de su profesión de contador. En 1986 recibió el Premio Konex por su trayectoria en política económica de la Argentina. Falleció en Buenos Aires en 1990.[1]
Referencias
- Alfredo Gómez Morales, en la página de la Fundación Konex. Archivado el 5 de marzo de 2016 en Wayback Machine. Consultado el 20 de octubre de 2011.
- Academia Nacional de Ciencias de la Empresa, discurso de incorporación del Dr. Julio A. Macchi, 26 de octubre de 2007. Archivado el 4 de marzo de 2016 en Wayback Machine. Consultado el 20 de octubre de 2011.
- https://www.academia.edu/69092305/Tesis_PSI_martin_casarino?source=swp_share&fbclid=IwAR1LpKcP4KA_fsj6g1QfD59HvaFd6IpGfbw4sDy5Giq9wwNE7h_k7cZBFO8
- Potash, Robert A. (1981). El ejército y la política en la Argentina; 1945–1962. Buenos Aires:Sudamericana.
- Godio, Julio (2000). Historia del movimiento obrero argentino (1870-2000). Tomo II. Corregidor. pp. 951.
- «Hubo luego otras crisis gravísimas, pero en la memoria perdura el recuerdo de la devaluación, alza de precios y tarifas a treinta años del "rodrigazo", por Jorge Oviedo, en La Nación del 5 de junio de 2005.». Archivado desde el original el 5 de abril de 2015. Consultado el 21 de octubre de 2011.