Casa de Julia Felix
La Casa de Julia Felix es una gran villa romana en la ciudad de Pompeya. Fue la residencia de Julia Felix, que convirtió varias secciones en apartamentos en alquiler después del terremoto de 62 d. C. precursor de la catastrófica erupción del Monte Vesubio en 79 d. C. que destruyó la ciudad. Las excavaciones arqueológicas empezaron en 1755 y aún continúan. Como residencia de varias unidades familiares, es un testimonio inestimable.
De fondo
Julia Felix era una mujer romana que vivía en la ciudad de Pompeya. Era una rica propietaria que había heredado la fortuna familiar. Poseía una villa magnífica que ocupaba un bloque entero en la ciudad y que los investigadores han documentado como muy bien amueblada y decorada hasta que sufrió serios desperfectos durante el terremoto del año 62. Después del seísmo Julia alquiló parte de su propiedad a otros residentes de Pompeya que habían perdido sus casas y transformó así partes de su villa en baños públicos, tiendas, tabernas, y apartamentos. Alquilar parte de su villa le permitió ganar unos ingresos extra y establecerse como una respetable mujer de negocios, y figura pública en Pompeya.[2] El anuncio se encontró escrito en el exterior:
"IN PRAEDIS I[VLI]AE SP(VRI) F(ILIAE) FELICIS / LOCANTVR / BALNEVM VENERIVM ET NONGENTVM TABERNAE PERGOLAE / CENACVLA EX IDIBVS AVG. PRIMIS IN IDVS AVG. SEXTAS ANNO[SCO]NTINVO[S QV]INQVE / S. Q. D. L. E. N. C."
(En la finca de Julia Félix, hija de Espurio, se alquilan hermosos baños para gente selecta, tiendas, pérgolas y habitaciones, del primero de los idus de agosto hasta el sexto año, el alquiler se renovará por acuerdo simple.)
"Felix", es un cognomen romano que significa "Afortunado", era un epíteto del dictador Lucio Cornelio Sila y sus descendientes en la época republicana.[3] En el periodo imperial era un nombre que implicaba buena suerte así como uno de los más comunes cognomina y nombres de esclavo.
Arquitectura
Las casas de los ricos en Pompeya estaban construidas alrededor de patios rectangulares de forma que las habitaciones principales se abrían a ellos. Estas casas tenían jardines cerrados y suministro de agua privado.[4] A lo largo del tiempo, los pompeyanos acomodados utilizaron en sus interiores el estuco para decorar la arquitectura, placas de mármol para aportar luminosidad, así como pinturas de vivos colores.[5]
Dentro de la villa
Dentro de sus villas, los pompeyanos expresaban sus gustos personales. Algunos se decantaban por las pinturas copias de los clásicas griegas y otros escogerían temas de amor o fertilidad, pero la mayoría eligió paisajes. Los encontrados en Pompeya muestran escenas de la vida local, villas a lo largo de la costa, o bosques y cerros. Cuando un dueño en Pompeya perdía parte de su jardín al levantar una habitación nueva, ordenaba recrear el jardín perdido en las paredes de la habitación.
El arte dentro de la villa de Julia Felix es también muy interesante. Su villa contiene una serie única de pinturas que describen la vida diaria en el Foro, incluyendo los puestos en el mercado, una escuela al aire libre, gente conversando en los soportales, y un mendigo que recibe limosna de una dama con su sirvienta. Julia Felix era descendiente de los Julios, libertos imperiales, lo cual podría haber influido en su elección de mostrar la vida cotidiana de la clase media.[6]
Excavación
Desde las primeras excavaciones en Pompeya, se reveló la villa de Julia Felix. Tan pronto como 1755 muchas secciones de la villa fueron descubiertas al empezar a excavar la ciudad de Pompeya. Una compleja taberna, lujosas termas, y un rico cenáculo que daba al jardín aparecieron en la primera excavación. Entre 1912–1935 se descubrió un santuario desconocido y la fachada a lo largo de la Vía dell'Abbondanza pero cuando todo el edificio fue excavado, también fueron encontradas dos estatuas.[7][8]
Entre los años 1998–1999 surgieron nuevos descubrimientos importantes. Una trinchera abierta por excavadoras detrás del caldarium permitió datarlo tan pronto como en la época de Augusto. El caldarium reveló un desagüe del agua empleada en el sistema del hipocausto, el cual conducía el calor a los baños o habitaciones en las casas acomodadas romanas. También se descubrió el ninfeo o gruta de las ninfas decorativa con una fuente a peldaños y el triclinio añadido después del terremoto de 62 d. C.[9]
Referencias
- Museo Archeologico Nazionale (Napoli). "so-called Venus in a bikini." Cir.campania.beniculturali.it. Accessed 3 October 2016.
"La estatuilla retrata a Afrodita a punto de desatar los cordones de la sandalia de su pie izquierdo, debajo de la cual un pequeño Eros se agacha, tocando la suela del calzado con su mano derecha. La diosa está apoyada con su brazo izquierdo (la mano se ha perdido) contra una figura de Príapo de pie, desnuda y barbada, colocada sobre un pequeño altar cilíndrico mientras, junto a su muslo izquierdo, hay un tronco de árbol sobre el cual se encuentra su túnica. La diosa se dobla. Afrodita, casi completamente desnuda, viste solo una especie de disfraz, que consiste en un corselete sostenido por un par de tirantes y dos mangas cortas en la parte superior de los brazos, desde el cual una larga cadena conduce a sus caderas y forma una estrella al nivel del ombligo. El 'bikini', por el cual la estatua es famosa, se obtiene mediante el uso magistral de la técnica del dorado, también empleada en la ingle, en la cadena colgante, y en la pulsera en la muñeca derecha de Afrodita así como en el falo de Príapo. Huellas de pintura roja son evidentes en el tronco del árbol, en el cabello rizado y recogido en un moño y en los labios de la diosa, así como en las cabezas de Eros y Príapo. Los ojos de Afrodita son de pasta de vidrio, mientras la presencia de agujeros en los lóbulos de las orejas sugiere la existencia de aretes de metal precioso que se han perdido desde entonces. Una interesante visión de los ornamentos femeninos en la época romana, la estatuilla, probablemente importada desde el área de Alejandría, reproduce con algunas modificaciones el tipo de estatuilla de Afrodita que desata su sandalia, conocida por sus copias en bronce y terracota."
For extensive research and a bibliography on the subject, see: de Franciscis 1963, p. 78, tav. XCI; Kraus 1973, nn. 270-271, pp. 194-195; Pompei 1973, n. 132; Pompeji 1973, n. 199, pp. 142 e 144; Pompeji 1974, n. 281, pp. 148-149; Pompeii A.D. 79 1976, p. 83 e n. 218; Pompeii A.D. 79 1978, I, n. 208, pp. 64-65, II, n. 208, p. 189; Döhl, Zanker 1979, p. 202, tav. Va; Pompeii A.D. 79 1980, p. 79 e n. 198; Pompeya 1981, n. 198, p. 107; Pompeii lives 1984, fig. 10, p. 46; Collezioni Museo 1989, I, 2, n. 254, pp. 146-147; PPM II, 1990, n. 7, p. 532; Armitt 1993, p. 240; Vésuve 1995, n. 53, pp. 162-163; Vulkan 1995, n. 53, pp. 162-163; LIMC VIII, 1, 1997, p. 210, s.v. Venus, n. 182; LIMC VIII, 2, 1997, p. 144; LIMC VIII, 1, 1997, p. 1031, s.v. Priapos, n. 15; LIMC VIII, 2, 1997, p. 680; Romana Pictura 1998, n. 153, p. 317 e tav. a p. 245; Cantarella 1999, p. 128; De Caro 1999, pp. 100-101; De Caro 2000, p. 46 e tav. a p. 62; Pompeii 2000, n. 1, p. 62. - Fowler, Robin (1 de mayo de 2006). «Independent Women of Pompeii». authorsden.com. Consultado el 8 de mayo de 2007.
- Brill’s New Pauly: Encyclopedia of the Ancient World, Volume 5, Brill Academic Publishers, 2004.
- The World of the Romans. New York: Oxford University Press. 1993. p. 132.
- Pompeii. Princeton University Press.
- «The Muse Restored: Images of Women in Roman Painting». Woman's Art Journal 14 (2): 28–36 [p. 29]. 1993. doi:10.2307/1358447.
- «The 89th General Meeting of the Archaeological Institute of America». American Journal of Archaeology 92 (2): 229–284 [p. 281]. 1988. doi:10.2307/505632.
- «The 90th General Meeting of the Archaeological Institute of America». American Journal of Archaeology 93 (2): 243–284 [p. 278]. 1989. doi:10.2307/505093.
- «The 102nd Annual Meeting of the Archaeological Institute of America». American Journal of Archaeology 105 (2): 245–311 [p. 261]. 2001. doi:10.2307/507273.