Corteza de quina
La corteza de quina, también llamada corteza jesuita o corteza peruana, es el nombre histórico del remedio específico para evitar todas las formas de la malaria.
Etimología
Se dio este nombre porque se obtuvo de la corteza de varias especies del género Cinchona, de la familia Rubiaceae, descubiertas en ocasiones diferentes y originaria de las regiones orientales de los Andes del Perú, descritas e introducidas por primera vez por sacerdotes Jesuitas haciendo trabajo misional en Perú. Otros términos que refieren a la preparación y su fuente son, "árbol Jesuita", "polvo Jesuita" y "Pulvis Patrum". Es patrimonio natural y símbolo patrio del Perú, presente en la Bandera Oficial del Estado Peruano y su escudo nacional.
Historia
Anteriormente, la corteza, preparada con diferentes fórmulas, se usaba como un psicotrópico, pero en el siglo XIX y comienzos del siglo XX, la cosecha natural de inmensas cantidades constituyó la base de la producción de alcaloides de quinina. Esta extracción tenía lugar principalmente en Alemania, y las plantaciones neerlandesas e inglesas de quina de Java, Ceylán y la India eran las principales fuentes que proporcionaban la materia prima. El principio activo básico, la quinina, se sintetiza ahora químicamente. El término quinina viene de ghina o quina-quina, es el nombre que los indígenas peruanos le daban a la corteza, que significa medicina de medicinas o corteza de cortezas.
La corteza de quina ha sido de gran importancia para la farmacopea, botánica, la medicina, el comercio y la agricultura tropical. Hacia 1650, el médico Sebastiano Bado declaró: "esta corteza ha resultado ser más preciosa para la humanidad que todo el oro y plata que los españoles hayan sacado del Perú.