Ejército Argentino

El Ejército Argentino del siglo XXI se caracteriza por su participación en misiones de paz de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Para febrero del 2019, tenía un contingente integrante en la Fuerza de Tareas Argentina, que integra la Fuerza de las Naciones Unidas para el Mantenimiento de la Paz en Chipre (también conocida por sus siglas UNFICYP).[4]

• Infantería. Constituye los elementos básicos de combate del Ejército. Su misión es la de ejecutar combates en contacto directo con el enemigo, por medio del fuego, la maniobra y el choque. Desarrolla sus operaciones de a pie, con vehículos de combate a rueda u oruga, vehículos aéreos o anfibios. Se subdivide en: Infantería Ligera, Mediana y Pesada. La Infantería es necesaria para la decisión de la guerra, ya que define la situación y proporciona mayor permanencia y firmeza a los éxitos transitorios.[11][12] Su patrona es la Inmaculada Concepción.[13]
• Caballería. Conforma los elementos básicos de combate del Ejército. Su misión es la de establecer contacto, combatir y eliminar al enemigo. Se tipifica en: Caballería Ligera, de Exploración y Blindada. Su patrono es San Jorge.[14][15]
• Artillería. Brinda el apoyo de fuego a los elementos básicos de combate. Su misión es la de desarrollar el fuego requerido para el desarrollo de la operación táctica, disparando sobre blancos terrestres y aéreos. La Artillería se subdivide en dos tipos: la artillería de campaña y la artillería antiaérea. La primera se encarga del fuego contra blancos terrestres, y la segunda del fuego contra blancos aéreos.[16] Su patrona es Santa Bárbara.[17]
• Ingenieros. Su misión es la de ejecutar funciones, actividades y tareas específicas, a fin de contribuir a concretar la misión de la fuerza apoyada. Ejerce su presencia tanto en la vanguardia como en la retaguardia. Soluciona problemas tácticos. Su importancia es vital.[18] Su patrono es San Ignacio de Loyola.[19]
• Comunicaciones. Su misión es la de proporcionar apoyo de comunicaciones, informática y guerra electrónica, facilitando la conducción propia y dificultando la enemiga.[20] Fue creada el 26 de octubre de 1944. Su patrono es el Arcángel San Gabriel y su Comisión fue creada el 22 de enero de 1960.[21]

• Arsenales (logística). Ejerce el abastecimiento y mantenimiento de los materiales de la Fuerza.[22]
• Intendencia.
• Veterinaria. Servicio de apoyo de combate cuya misión es mantener la salud de los animales y su aptitud para el servicio a la Fuerza.[23]
• Construcciones.
• Transporte.
• Religioso. Proporciona la asistencia religiosa, principalmente católica.
• Jurídico. Proporciona apoyo asesorando y asistiendo en materia de derecho.[24]
• Postal. Encargado de la correspondencia.[22]
• Banda. Contribuye al mantenimiento y elevación de la moral de los militares por medio de la música militar, en tiempos de paz como en tiempos de guerra. También representa al Ejército Argentino en la cultura argentina e internacional.[25]
• Bienestar. Su función es la de contribuir al bienestar de los miembros de la Fuerza.[22]
• Educación Física. Se encargada de la educación física de los integrantes de la Fuerza.[22]
• Sanidad. Servicio vital cuya función es la de preservar la salud de los militares.[26]
• Finanzas. Su función es la de asegurar el sostén económico y financiero de la Fuerza.[22]
• Oficinistas, Dibujantes y Traductores. Se desempeñan en las áreas administrativas de los Comandos, Direcciones, Organismos, Institutos, Juzgados de Instrucción Militar y Unidades, elaborando la documentación mediante las herramientas que brinda la informática y tramitando la correspondencia de la fuerza.

• Aviación de Ejército. Incrementa la capacidad de las fuerzas terrestres, proyectando fuerzas y brindando apoyo a las mismas. La Aviación ejecuta operaciones de apoyo, comunicaciones, reconocimiento, etcétera.[27]
• Inteligencia. Su misión es la de producir inteligencia en los niveles táctico, estratégico operacional y estratégico militar. Es una necesidad de la conducción del Ejército.[28]
• Policía Militar.
• Asuntos Civiles.
• Informática.

• Comandos. Son tropas organizadas, equipadas y adiestradas para ejecutar operaciones comando en el teatro de operaciones, en territorio enemigo o propio controlado por el enemigo.[29]
• Fuerzas Especiales. Tropa de alta capacitación en operaciones especiales. Sus misiones son las de recolección de información dentro del dispositivo enemigo, contrainsurgencia, contraterrorismo, guerra asimétrica, rescate de rehenes y operaciones de sabotaje.[30]
• Cazadores.
• Buzos de Ejército. Son tropas especiales organizadas, equipadas y adiestradas para planificar y ejecutar una operación táctica en el medio acuático.[31]

El Sistema de Reservas del Ejército Argentino (SIREA) fue creado el 31 de octubre de 2008 bajo dependencia orgánica de la Dirección General de Organización y Doctrina y funcional de las distintas brigadas del ejército. El sistema cuenta a febrero de 2020 con 19 compañías de infantería distribuidas por el país (Salta, San Miguel de Tucumán, Resistencia -con sección en Corrientes-, Córdoba, Santa Fe, San Nicolás de los Arroyos, Paraná, Mendoza, La Plata, Mar del Plata, Bahía Blanca, Puerto Deseado, Comodoro Rivadavia, San Juan, Rospentek, Holmberg, Buenos Aires -en el Liceo Militar General San Martín y en el Regimiento de Patricios-, Campo de Mayo) y un sección de aviación de ejército en Campo de Mayo. El sistema permite el ingreso a la reserva de voluntarios ad honorem que hayan sido oficiales, cadetes, suboficiales o soldados y de personas sin antecedentes militares que realicen el Curso de Formación de Oficiales de la Reserva (CUFOR) en los liceos de Córdoba, Santa Fe o Tucumán. Su finalidad es completar los cuadros de las unidades del ejército en caso de necesidad.[42][43]

Pese a que el Ejército Argentino contó en su historia con la presencia de mujeres en sus filas, que incluso resultaron combatientes heroicas, como la general —post mortem— Juana Azurduy, la organización del país adoptó una estructura que marginó a las mujeres de gran parte de las actividades de la vida pública, incluyendo la prohibición de votar y ser votadas —derogada en 1947— y la incapacidad civil —derogada en 1968—. Las Fuerzas Armadas excluyeron por completo a las mujeres hasta la penúltima década del siglo XX.[44]

La general post mortem Juana Azurduy, heroína histórica del Ejército argentino en las guerras de independencia.

El ingreso de mujeres a las Fuerzas Armadas argentinas se inició en 1980, en la Armada y la Fuerza Aérea. El Ejército habilitó el ingreso de mujeres en 1981 como suboficiales del Cuerpo Profesional y al año siguiente, como oficiales del mismo cuerpo, excluyéndolas hasta 1996 y 1997 respectivamente, del Cuerpo Comando, es decir de las unidades de combate.[44]

La general María Isabel Pansa, en 2015 se convirtió en la primera mujer en alcanzar ese grado en vida.

En 2010 el Ejército ya registraba un total de 4974 mujeres, equivalentes al 11,15 % del total, contando los institutos de formación, pero ese porcentaje se reducía a un 2 % de los oficiales y suboficiales del Cuerpo Comando, debido a la prohibición existente en ese momento de que las mujeres ingresaran a las armas de Infantería y Caballería.[44] Asimismo, una gran parte de las funciones de las mujeres en el Ejército se encontraban en el área de enfermería, con un 92 %.[45]

En 2006 la ministra de Defensa Nilda Garré creó el Observatorio sobre la Integración de la Mujer en las Fuerzas Armadas y en 2007 creó el Consejo de Políticas de Género, institución única en el mundo debido al hecho de la incorporación al mismo de las mujeres militares.[45][46] También se crearon Oficinas de Género en las unidades militares, se derogaron las normas que prohibían el ingreso y permanencia en el Colegio Militar de las alumnas que quedaran embarazadas, así como militares varones que reconocieran su paternidad y la obligación de solicitar autorización al superior para casarse.[47]

En 2011 la presidenta Cristina Fernández de Kirchner se quejó públicamente por el hecho de que el Ejército no permitiera el ingreso de mujeres a las armas de Infantería y Caballería, orientadas al combate cercano.[48] Finalmente dos años después, el Ejército eliminó por la Resolución N.º 1143/2013 la prohibición de que las mujeres ingresaran a las mencionadas armas, razón por la cual seis mujeres ingresaron al arma de Caballería y cinco al arma de Infantería.[48] En 2016 cuatro mujeres se constituyeron en las primeras en egresar del Colegio Militar como oficiales de dichas armas.[49]

En 2009 la fallecida militar y heroína de la lucha por la Independencia Juana Azurduy fue ascendida post mortem a general, convirtiéndose así en la primera mujer en alcanzar ese grado en el Ejército Argentino.[50] En 2015 la coronel María Isabel Pansa fue ascendida a general, convirtiéndose en la primera mujer en alcanzar ese grado en vida.[51]

En 2017 el Ejército tenía 3352 mujeres, sin contar los institutos de formación, equivalentes al 11,8 % del personal total, un porcentaje considerablemente menor al de las fuerzas armadas en conjunto, que para ese año fue del 16,8 %.[52]