Iris iberica
Iris iberica es una especie de planta del género Iris, también está en el subgénero Iris y en la sección Oncocyclus. Es una rizomatosa perenne, de las montañas del Cáucaso de Armenia, el este de Georgia y el oeste de Azerbaiyán.
Iris iberica | ||
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Ilustración de Iris iberica para Botanical Magazine Vol.96 en 1870 por Walter Hood Fitch | ||
Taxonomía | ||
Reino: | Plantae | |
Orden: | Asparagales | |
Familia: | Iridaceae | |
Género: | Iris | |
Subgénero: | Iris subg. Iris | |
Sección: | Iris sect. Oncocyclus | |
Especie: | I. iberica | |
Sinonimia | ||
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Tiene hojas estrechas, glaucas, de color verde grisáceo y en forma de hoz, tallo corto que sostiene una sola flor a fines de la primavera. Tiene un fondo pálido (blanco, crema o azul pálido) cubierto de vetas espesas en malva pálido, violeta, violeta oscuro, granate o marrón violeta. Tiene un parche de señalización negro o violeta oscuro y una barba marrón o marrón violeta.
Tiene muchas formas híbridas debido a su variabilidad y tiene dos subespecies conocidas: Iris iberica elegantissima y Iris iberica lycotis. Se cultiva como planta ornamental en regiones templadas, ya que es más resistente que otras especies de Oncocyclus.
Distribución y hábitat
Es nativa de las zonas templadas de Asia.
Hábitat
Crece en las praderas secas de las estepas, o en las laderas secas y pedregosas del cinturón montañoso inferior.
Crece en las estepas de Georgia con varias comunidades de pastos Stipa (incluidas Stipa pulcherrima, Stipa lessingiana, Stipa pontica y Stipa capillata), con arbustos dispersos de enebro rojo y berberis. Se pueden encontrar a una altitud de 400 a 700 m (1312,3 a 2296,6 pies), o 1000 a 3000 m (3280,8 a 9842,5 pies) sobre el nivel del mar.
Toxicidad
Como muchos otros iris, la mayoría de las partes de la planta son venenosas (rizomas y hojas) y si se ingieren por error pueden causar dolores de estómago y vómitos. Además, la manipulación de la planta puede provocar irritación de la piel o una reacción alérgica.[1]
Referencias
- David G Spoerke and Susan C. SmolinskeToxicity of Houseplants, p. 236, en Google Libros