Lorenzo Fernández de Viana

Nació en el seno de una familia campesina de la Rioja Alavesa, aunque parte de su infancia la vivió en Logroño.[1] Allí comenzó a interesarse por la ebanistería y, en 1883, se mudó a Vitoria para formarse en la Escuela de Artes y Oficios.[1] Regentó un taller en la avenida de Santiago.[3] Marchó a Madrid gracias al dinero que le brindó el Ayuntamiento de la ciudad y en la capital pudo aprender del maestro segoviano Aniceto Marinas, con el que se especializó en la escultura.[1]

Aunque siguió residiendo en Vitoria, viajó en varias ocasiones a París, una de ellas para asistir a la Exposición Universal que allí se celebraba.[1] Participó también en varias ediciones de la Exposición Nacional de Bellas Artes, en la que llegó a conseguir menciones honoríficas y medallas.[1]

Fue uno de los seleccionados para trabajar en las obras de la catedral nueva vitoriana, pero sus desencuentros con figuras importantes del proyecto le obligaron a marcharse a Argentina.[1][4] Regresó a España en 1916 para acomodarse en Bilbao, donde fallecería el 16 de diciembre de 1929, a los 63 años de edad.[1] Antes, llegó a tomar parte en el Primer Congreso de Estudios Vascos que se celebró en la localidad guipuzcoana de Oñate en 1918.[1]

• Val de Sosa, Venancio Ramón del (1979). «Santiago». Calles vitorianas. Obra Cultural de la Caja de Ahorros Municipal. pp. 357-360. Wikidata Q113989085.