Sin nombre
Sin nombre (del latín: Nomen nescio ‘desconozco el nombre’) o N.N. por sus iniciales en latín, es una de las maneras para referirse a alguien indeterminado o sin una identidad específica, ya sea porque se desconoce el nombre real de la persona o para ser usado en un caso hipotético. Para los mismos fines, son utilizados también los nombres: fulano, mengano, zutano, perengano.[1]
Uso
Las iniciales "N.N." son usadas comúnmente con el mismo propósito y provienen de la expresión latina nomen nescio (literalmente “desconozco el nombre”). En español suele interpretarse como Ningún Nombre y en inglés como No Name.
En la Antigua Roma solía utilizarse el supuesto nombre: Numerio Negidio, siendo Numerio un auténtico praenomen pero similar a la forma verbal latina; "yo pago", mientras que Negidio, era la forma verbal "me niego" usada como nombre de una presunta gens. Así, Numerio Negidio, equivalía a "me niego a pagar" y por esta razón se utilizaba como el nombre de un acusado en un hipotético proceso judicial. Otras variantes en español son: "Fulano", "Mengano", "Zutano"; Las dos primeras: fulano y mengano proceden del árabe fulān فلان (con sentido similar al castellano) y من كان man kān (literalmente, "quien fuese"). Sus diminutivos son; Fulanito, Menganito, Zutanito y sus formas femeninas; Fulana, Mengana, Zutana. Suelen ser usados juntos en el habla popular: Fulano, Mengano y Zutano. Perengano y Perencejo son formas derivadas por analogía con Pérez. Así también "Juan Pérez", "Pedro Pérez" o "Juan González", nombres y apellidos comunes en español, se usan como nombres convencionales para alguien sin nombre o para designar a cualquier persona. En todas las lenguas y diferentes países se emplean, además de la sigla N. N., nombres supuestos: Ver la lista extendida más abajo.
El Decreto Nacht und Nebel de la Alemania nazi aludía en sus siglas al NN. Asimismo, en los regímenes dictatoriales de América Latina y el Caribe durante la década de 1970, se llamaba N N a los desaparecidos por el terrorismo de estado.
En términos jurídicos y legales, se utiliza la letra "N" para mantener anónima la identidad de quien pudo haber sido víctima o cometedor de un delito de cualquier tipo. Se acompaña del nombre principal o primer nombre del involucrado en la acción de legalidad, quedando como ejemplo el -nombre de la persona- + "N". La letra "N" es utilizada jurídica y policialmente para no revelar y proteger la identidad de una víctima o comisionado de un delito.
Nombres indeterminados en el Derecho
En los Estados Unidos, comúnmente se emplea el nombre John Doe en las acciones legales o discusiones legales, en el caso de los hombres, para reemplazar un nombre (para mantener el real anónimo) o porque se desconoce también el nombre real. Los cadáveres o los pacientes de las salas de urgencias, cuya identidad se desconoce, son conocidos como John Doe. En el caso de las mujeres se utiliza el nombre de Jane Doe. El nombre que se emplea para un niño o bebé que se encuentra en el mismo caso es Baby Doe. Si hay parientes que se hallan en la misma situación, se utiliza el nombre de James Doe, Judy Doe, etc.
El apellido Doe suele usarse por demandantes o demandados que prefieren mantener su nombre real anónimo o porque su nombre es desconocido. Otros nombres usualmente utilizados por partes que quieren permanecer anónimas, particularmente por demandantes, son Richard Roe en el caso de los hombres, y Jane Roe para las mujeres (la más conocida Jane Roe es Norma McCorvey, por el caso Roe contra Wade).
Véase también
Referencias
- Manuel Casado Velarde. «Las formas fulano, mengano, zutano, perengano y su funcionamiento - como ordenadores del discurso» (PDF). Archivado desde el original el 1 de febrero de 2012. Consultado el 16 de junio de 2010.