Miguel Ángel Pesce

Pesce es licenciado en Economía por la Universidad de Buenos Aires (UBA) y miembro de diversas asociaciones profesionales.[5]

En el ámbito académico se desempeñó como profesor universitario en la cátedra de Análisis de Datos Económicos y en el Seminario sobre Economía de Gobierno, dictados en la Universidad de Buenos Aires.[5] Es miembro de diversas asociaciones profesionales y conferencista internacional.[6]

Publicó trabajos sobre temas económicos y presupuestarios y también fue redactor de diversos proyectos que se plasmaron como cláusulas constitucionales y leyes en el orden nacional, provincial y en de la Ciudad de Buenos Aires.[5]

Entre 1984 y 1989 fue asesor en la Cámara de Diputados de la Nación, colaborando en las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Finanzas. Además fue asesor en Presupuesto y Gestión Pública de la cámara entre 1984 y 1998. Fue el redactor de diversos proyectos que se plasmaron como cláusulas constitucionales y leyes en el orden nacional, provincial y de la ciudad de Buenos Aires.[6] También fue coordinador de proyectos en el Ministerio de Salud y Acción Social entre 1989 y 1990.[7]

Entre 1998 y 2001 fue Subsecretario de Gestión y Administración Financiera de la ciudad de Buenos Aires, durante las gestiones de Fernando de la Rúa, Enrique Olivera y Aníbal Ibarra. Durante el último tramo de la gestión de Ibarra (2001-2003) fue Secretario de Hacienda y Finanzas.[7][8]

Entre 2003 y 2004 fue representante del Ministerio de Economía en el Banco Central de la República Argentina y presidente del Fondo Fiduciario para la Reconstrucción de Empresas.[5]

En 2004 el gobierno nacional decidió la intervención de la provincia de Santiago del Estero, nombrando al exfiscal Pablo Lanusse como interventor. Lanusse designó a Pesce como Ministro de Economía.[5] Ese año asumió como Síndico General de la Nación.[6]

Fue vicepresidente del Banco Central de la República Argentina desde el 24 de septiembre de 2004 hasta el 12 de diciembre de 2015.

Asumió la presidencia de la entidad de manera interina tras la destitución de Martín Redrado, a raíz del conflicto suscitado por la implementación del Fondo del Bicentenario, el 7 de enero de 2010 y nuevamente a partir del 22 de enero de 2010.[9] Tras la renuncia al cargo de Redrado, ocurrida el 29 de enero de 2010, se convierte en presidente interino del BCRA de manera efectiva hasta el 3 de febrero de 2010, día en que es confirmada la destitución de Redrado, tras el dictamen de la Comisión Bicameral del Congreso Nacional.[3] El Ejecutivo designa entonces a Mercedes Marcó del Pont como titular del BCRA, regresando Pesce a su cargo de vicepresidente.

En diciembre de 2015 renuncia al cargo, tras la victoria de Mauricio Macri en las elecciones presidenciales.

Luego de abandonar el BCRA asume como director del Banco de Tierra del Fuego. En dicho puesto lanzó el plan “Sacate un 10” y “Hogar 15” para los 36.000 usuarios (cerca del 20 % de la población provincial) que utilizan tarjetas de crédito Visa Fueguina y Mastercard Fueguina, expedidas por el Banco de Tierra del Fuego (BTF).[10]

Durante la conducción de Pesce, el Banco de Tierra del Fuego fue distinguido como el Banco de mayor derivación de usuarios a Homebanking y Dispositivos Móviles, gracias a su gestión incrementó en un 55% la cantidad de usuarios de la aplicación Link Celular, y esto significó un crecimiento del 73% en la cantidad de operaciones a través de este canal.[11]

En diciembre de 2019 fue designado presidente del Banco Central de la República Argentina por el presidente Alberto Fernández.[2] La primera medida de su gestión fue reducir la tasa de referencia del 63 al 58% y, una semana después, del 58 al 55%.[12] A partir de su designación llevó adelante una baja en las tasas de interés un viraje respecto a la política monetaria del gobierno anterior que había elevado las tasas a un máximo de 74,23[13] llegando a ser la más alta del mundo y que casi triplicaba la de Venezuela.[14] Para el 31 de enero las tasas de interés habían bajado a 48 puntos[15] e impulsado por lo datos de la baja en la inflación fue recortada hasta un 40 por ciento.[16] En mayo de 2020 dispuso que la tasa mínima que los bancos deben pagar por plazos fijos se estableció en 70% al interés del 38% que el BCRA les paga a los bancos por invertir en letras de liquidez (Leliq) aplicable a colocaciones de personas, a los plazos fijos mayoristas y los realizados por personas jurídicas (empresas).[17]

El 15 de septiembre de 2020, Pesce informó una serie de medidas destinadas como el 30% de recargo del impuesto PAIS, que fue establecido durante el mes de diciembre de 2019, Pesce y su equipo decidieron que las operaciones en divisas extranjeras deben ser alcanzadas por una alícuota adicional del 35% a cuenta de los impuestos a las Ganancias y a los Bienes Personales.[18] Por otro lado, y según lo que dio a entender, habría control de la apertura de cuentas en dólares, no se podría abrir una cuenta si se cobra plan social, las compras en el exterior irían a cuenta de dólar ahorro y las empresas deberían reestructurar sus deudas.[19] Pesce explicó que las medidas tenían como objetivo "normalizar el mercado cambiario".[20][21]