Ondjiva

La estación de la misión de Ondjiva se estableció por primera vez en 1891 por Friedrich Meisenholl y August Wulfhorst de la sociedad de la misión del Rin, y con la ayuda de Friedrich Bernsmann y con el permiso del rey Weyulu Hedimbi. Se pensaron que Ondjiva habría estado en el territorio de laÁfrica del Sudoeste Alemana, que luego resultó no ser el caso. Al año siguiente se estableció la estación de la misión de Omupanda en el año siguiente.

Meisenholl quedó en Ondjiva para unos cuatro años, antes de que tuviera que salir debido a una enfermedad grave. Wilhelm Stahlhut vino a reemplazarlo a mediados de la década de 1890. Los tres hijos de Stahlhut murieron en África, y finalmente él mismo cayó enfermo con fiebre de aguas negras y murieron en Outjo el 1 de mayo de 1900. Su viuda se mantuvo durante muchos años, por primera vez en Oukwanyama y luego en Hererolandia.

En agosto de 1915, el rey Mandume ha tenido la estación de la misión quemado, y los alemanes tuvieron que huir a Ondonga en África del Sudoeste y falleciendo en el año de 1917.

Ondjiva se convirtió en más adelante una misión católica y la sede del obispo de la Diócesis de Ondjiva. Fernando Guimaraes Kevanu era el obispo hasta 2011, y fue sucedido por el Rev. Pio Hipunyati.

Ondjiva fue destruida en gran parte durante la Guerra Civil de Angola, y fue escenario de los ataques aéreos y la invasión de las tierras por parte de Sudáfrica. La administración de la ciudad fue operado de la provincia de Huila, y en teoría gobernaba en la provincia de Cunene en el exilio. La mayor parte de la población dejó la ciudad en 1989, y en 1999 fue el hogar de menos de 5.000 habitantes. Los esfuerzos de la reconstrucción comenzaron después de la llegada de la paz en 2002. Ondjiva inicialmente fue experimentado un crecimiento lento de la población, pero se produjo un retorno significativo de sus residentes y la nueva migración desde otras regiones de Angola, en particular de la provincia de Huila entre 1998 y 2000.