Ophiocordyceps sinensis
Ophiocordyceps sinensis (anteriormente conocido como Cordyceps sinensis) es un hongo entomopatógeno (un hongo que crece como parásito en los insectos) que se encuentra en las regiones montañosas del Tíbet y Nepal. Parasita larvas de la familia Hepialidae, del género Thitarodes, y produce un cuerpo fructífero valorado por la medicina tradicional como un remedio herbal. Contiene arsénico y otros metales pesados, por lo que es potencialmente tóxico y su fabricación y ventas fueron estrictamente reguladas por Administración de Alimentos y Medicamentos de China, en 2016.[2]
Ophiocordyceps sinensis | ||
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Oruga parasitada por Ophiocordyceps sinensis (arriba), comparada con otra común (abajo). | ||
Taxonomía | ||
Reino: | Fungi | |
División: | Ascomycota | |
Clase: | Sordariomycetes | |
Orden: | Hypocreales | |
Familia: | Ophiocordycipitaceae | |
Género: | Ophiocordyceps | |
Especie: |
Ophiocordyceps sinensis (Berk.) G.H.Sung, J.M.Sung, Hywel-Jones & Spatafora (2007) | |
Sinonimia | ||
El hongo germina en la larva viviente, la mata y la momifica, y luego emerge del cadáver un cuerpo fructífero parecido a un tallo marrón oscuro que tiene unos pocos centímetros de largo y se para en posición vertical.
Es conocido en inglés como caterpillar fungus (hongos oruga) o como yartsa gunbu (tibetano: དབྱར་ རྩྭ་ དགུན་ W, Wylie: dbyar rtswa dgun 'bu, literalmente "gusano de invierno, hierba de verano") o como dōng chóng xià cǎo (chino: 冬蟲夏草).[2]
Se clasifica como un hongo medicinal, y su uso tiene una larga historia en la medicina tradicional china, así como en la medicina tradicional tibetana.[3] El cuerpo de hongo-oruga intacto, recolectado a mano, es valorado por los herbolarios como medicina y como afrodisíaco, y debido a su costo, su uso también es un símbolo de estatus.[4] Varias cepas fermentables de Ophiocordyceps sinensis han sido aisladas por científicos chinos,[5] para producir cultivos comerciales, que se desarrollan también en Vietnam.
Las reservas naturales de Ophiocordyceps sinensis han disminuido considerablemente los últimos años, ello sumado a su alto precio ha provocado que se cultive en laboratorio el micelio de este hongo, la cual es la versión habitualmente usada en los suplementos alimenticios basados en Cordyceps sinensis.[6]
Posibles beneficios para la salud
Mejora del desempeño físico
En un estudio del 2010,[7] se estudió el efecto del Cs-4 (Cordyceps sinensis) en el desempeño del ejercicio físico en personas mayores. Veinte sujetos de entre 50 a 75 años participaron en un estudio doble ciego controlado con placebo. Los participantes consumieron el suplemento 3 veces al día durante 12 semanas, después de lo cual los umbrales metabólicos y respiratorios se incrementaron significativamente.
Protección hepática y cardíaca
Un ensayo del 2014, realizado en animales,[8] estudió los efectos protectores del Ophiocordyceps sinensis de lesiones en el hígado y el corazón comúnmente vistos en individuos con enfermedad renal crónica. Luego de un tratamiento de 8 semanas con Cordyceps sinensis, el estudio concluyó que se había atenuado significativamente el daño hepático y cardíaco.
Mejoramiento de la función sexual
Un estudio[9] mostró que, cuando se suministró un suplemento de Ophiocordyceps sinensis a 22 hombres durante 8 semanas, se mostró un aumento del 33% en el recuento de espermatozoides, una disminución del 29% en las malformaciones de los mismos y un aumento del 79% en la tasa de supervivencia espermática.Se parece al rebozuelo (Cantharellus cibarius), comestible, con el que no debe confundirse.[10]
Referencias
- "Ophiocordyceps sinensis (Berk.) G.H. Sung, J.M. Sung, Hywel-Jones & Spatafora 2007". MycoBank. International Mycological Association. Consultado el 31 de diciembre de 2017.
- 《总局关于停止冬虫夏草用于保健食品试点工作的通知-食药监食监三〔2016〕21号》
- Halpern, Miller (2002). Medicinal Mushrooms. New York, New York: M. Evans and Company, Inc. pp. 64-65. ISBN 0-87131-981-0.
- Silverman, Lauren (2011) Caterpillar Fungus: The Viagra Of The Himalayas.NPR. Consultado el 31 de diciembre de 2017.
- Zhu JS, Halpem GM, Jones K (1998). «The scientific rediscovery of an ancient Chinese herbal medicince: Cordyceps sinensis. I.». J Alt Complem Med 4: 289-303.
- Chandra S Negi, Prithvi Raj Koranga & Hira Singh Ghinga. «Yar tsa Gumba (Cordyceps sinensis): A call for its sustainable exploitation» (en inglés). Consultado el 6 de noviembre de 2019.
- Chen, Steve; Li, Zhaoping; Krochmal, Robert; Abrazado, Marlon; Kim, Woosong; Cooper, Christopher B. (2010-5). «Effect of Cs-4® (Cordyceps sinensis) on Exercise Performance in Healthy Older Subjects: A Double-Blind, Placebo-Controlled Trial». Journal of Alternative and Complementary Medicine 16 (5): 585-590. ISSN 1075-5535. PMC 3110835. PMID 20804368. doi:10.1089/acm.2009.0226.
- Liu, Xia; Zhong, Fang; Tang, Xu-long; Lian, Fu-lin; Zhou, Qiao; Guo, Shan-mai; Liu, Jia-fu; Sun, Peng et al. (2014-05). «Cordyceps sinensis protects against liver and heart injuries in a rat model of chronic kidney disease: a metabolomic analysis». Acta Pharmacologica Sinica 35 (5): 697-706. ISSN 1671-4083. PMC 4814030. PMID 24632844. doi:10.1038/aps.2013.186.
- Guo, Y. Z. (1986). «Medicinal chemistry, pharmacology and clinical applications of fermented mycelia of Cordyceps sinensis and JinShuBao capsule.». Journal of Modern Diagnostics and Therapeutics 1: 60-65.
- Lim, Michael; Shu, Yun (2022). El futuro es fúngico. Barcelona: Blume. p. 97.