Petesucos
Petesucos (en griego Πετεσοῦχος) era el nombre dado por los griegos al cocodrilo que vivía en Cocodrilópolis, en el Antiguo Egipto, cuyo nombre era Pady-Sebek, y que era venerado como una manifestación del dios Sobek. Era un animal mimado que llevaba aretes de oro en las orejas y brazaletes en las patas delanteras. Al morir, su cuerpo era momificado y sustituido por otro cocodrilo.
Pa-dy-Sebek en jeroglífico |
Pȝ-ḏ sbik |
Etimología
Según Hans Bonnet el nombre significa nacido de Sebek. La opinión más generalizada es que era el nombre de un cocodrilo sagrado, venerado en El Fayum.[1] Ulrich Wilcken informa que en el año 21 de Ptolomeo Auletes se veneraba a un cocodrilo Petesucos. Adolf Erman, sin embargo, supone que era una persona deificada; basándose en Plinio el Viejo, afirma que fue el constructor del laberinto de Hawara, descrito por Heródoto.
Culto
Esta divinidad ha sido venerada en Per-Sobek (Cocodrilópolis), Kerkeosiris y Theadelfia, donde están situados sus santuarios. En Karanis se ha encontrado un templo levantado en su honor y en el de Pneferos.[2]
En la cultura popular
En el renombrado juego de estrategia Age of Mythology, los petesucos forman parte del juego como unidades míticas de los egipcios.
En el videojuego Assassin's Creed: Origins, el jugador puede visitar la ciudad de Krocodilopolis, donde entre otras cosas, podrá hacer una misión secundaria en la que Petesucos se enfurece y casi ataca a un hombre que le hacía ofrendas, la misión consiste en investigar la causa de ese enfado.
Referencias
Citas
- Bonnet: op. cit., pág 589.
- Felde: op. cit., pág 46.