Anexo:Prensa anarquista

Las publicaciones anarquistas fueron censuradas desde 1894 por leyes que permitían la persecución a toda forma de actividad anarquista, limitando la libertad de prensa; los periódicos anarquistas fueron objeto de una represión excepcionalmente dura. La ley del 28 de julio de 1894 concebida con el fin de reprimir a la actividad anarquista, recién fueron derogadas el 23 de diciembre de 1992 con la publicaciòn en el Boletín Oficial (Journal officiel).[2]

En 1879 se editó el primer periódico anarquista en territorio argentino, El Descamisado. Durante la década siguiente aparecieron algunos otros proyectos de corta duración, como la revista La Questione Sociale, auspiciada por Errico Malatesta y en idioma italiano. Es a partir de 1890 que hay un florecimiento del periodismo ácrata, destacándose El Perseguido, El Oprimido, La Voz de la Mujer y en 1897 La Protesta, el cual se convertirá en un periódico anarquista de fama internacional.[3] Las tres décadas siguientes fueron un periodo de auge de la prensa anarquista. Las publicaciones eran editadas en castellano, pero una buena proporción era impresa en italiano, y en menor medida en ruso, alemán, francés e yiddish. Otros periódicos de trascendencia fueron La Organización Obrera (órgano oficial de la FORA), La Antorcha y La Batalla.[3][4] El periódico La Protesta, que aún continúa publicándose, en 1904 se editaba diariamente, en dos ediciones, y llegó a tener una tirada de 100.000 ejemplares diarios. La represión gubernamental tenía como blanco las imprentas y editoriales anarquistas, que regularmente eran allanadas y clausuradas. Desde mediados del siglo XX hasta el presente han existido algunas editoriales anarquistas para destacar, como Reconstruir, Americalee, Tupac, Proyección y la editorial Libros de Anarres, con su colección "Utopía Libertaria". También continúan editándose algunas publicaciones mensuales o bimestrales.