Pugio
El pugio era el puñal usado por los soldados de las legiones de la República romana desde los alrededores del año 100 a. C. al 100 d. C..
Origen y características
Los romanos lo adoptaron de los pueblos hispanos, del mismo modo que el gladius hispaniensis. La hoja medía unos 24 cm de largo por 6 de ancho. Resultaba un arma ideal para apuñalar, y podía, con una buena acometida, perforar una cota de malla. Esto se debía a que poseía un nervio central que dotaba a la hoja de resistencia y firmeza.
El pugio era un arma auxiliar o de último recurso, y estaba expresamente hecha para clavar.
Fue usado por otros guerreros contemporáneos, como el guerrero ibero.
Etimología
Respecto a la etimología de la palabra, probablemente «pugio» procede de la raíz proto-indoeuropea «peug-», que significa «apuñalar, pinchar» o «dar un puñetazo»; es la misma raíz que se encuentra en otras palabras latinas como «púgil» (boxeador), «pugnus» (puño) o «pugna» (pelea a estocadas o pelea a puñetazos), y en el término griego «pygmé» (puño). Hay lingüistas que proponen la etimología de «pugio» como «arma que se agarra con el puño».
Bibliografía
- Quesada Sanz, Fernando (2010). Armas de la antigua Iberia: de Tartesos a Numancia. La esfera de los libros. ISBN 9788497349505.
Enlaces externos
- Wikimedia Commons alberga una galería multimedia sobre Pugio.