Teodosio II de Braganza

Aún niño, Teodosio fue traído para la corte y hecho paje de Sebastián I, que lo hace Duque de Barcelos, por carta del 5 de agosto de 1562. El monarca estimaba el pequeño Braganza y en 1578 insistió en su compañía durante la expedición al Norte de África contra el jerife-sultán Abd al-Malik de Marruecos.

Teodosio permaneció junto al rey en la batalla de Alcázarquivir hasta que la situación se tornó grave y el monarca ordenó la retirada del niño para la seguridad de la retaguardia.[1] Teodosio no quedó satisfecho y se fugó en la primera oportunidad, tomando un caballo y lanzándose a galope en dirección a la línea de combate. Como muchos otros hombres, acabó por ser herido y hecho prisionero por los marroquíes.[1]

El duque Juan, su padre, estremecido con los eventos, ofreció una fortuna por el rescate de su hijo, llegando a pedir a Felipe II de España que interviniera en su favor. No sería necesaria tanta alarma. El nuevo sultán de Marruecos, Ahmad al-Mansur (su hermano Abd al-Malik había caído en combate), había quedado impresionado por la bravura del pequeño Teodosio y lo dejó regresar a casa en agosto de 1579, vía España.

En 1580, por muerte del cardenal-rey Enrique I, el joven Teodosio parecía ser el aspirante con más posibilidades de heredar el trono portugués. Tal vez por eso mismo, Felipe II solo permitió el regreso de Teodosio al país, después de ver asegurada su posición como rey de Portugal. Estuvo retenido amigablemente en casa del duque de Medina Sidonia. Pudo regresar a Vila Viçosa en 1580, cuando Felipe II subió al trono de Portugal con el nombre de Felipe I.[1]

En 1582, debido al fallecimiento del Gran Duque de Alba, Fernando Álvarez de Toledo y Pimentel, quien hasta su muerte ostentó los cargos de I virrey de Portugal y XII condestable de Portugal, Teodosio fue nombrado como XIII condestable, en su reemplazo. Este importante cargo lo ejerció durante casi medio siglo y hasta su deceso.

Teodosio se convirtió en Duque de Braganza en 1583, por muerte de su padre, y creció para convertirse en un fiel servidor de los reyes españoles de Portugal. Al principio su madre, Catalina, asumió la jefatura de la Casa de Braganza, debido a la minoría de edad de su hijo. Felipe I tenía entretanto propuesto matrimonio a Catalina, quien no aceptó.

El motivo principal para esta negativa fue tal vez el de preservar el derecho de Teodosio a la corona portuguesa, pues si esta boda se realizaba era señal de que la Casa de Braganza aceptaba el que Felipe II de España hubiera sido aclamado rey de Portugal.

Teodosio, como defensor del reino, protegió a Lisboa de los ataques de otros pretendientes incluyendo a Antonio, Prior de Crato, que tenía la ayuda del corsario inglés Francis Drake.[1]

De su mujer Ana de Velasco y Girón,[1] hija del condestable de Castilla Juan Fernández de Velasco y Tovar, tuvo cuatro hijos:

• Juan el Restaurador (1604-1656), VIII duque de Braganza con el nombre de Juan II y coronado rey de Portugal en 1640 con el nombre Juan IV de Portugal;
• Eduardo (1605-1649), Señor de Vila do Conde;
• Catalina (1606-1610);
• Alejandro (1607-1637).