Tragicomedia de Polidoro y Casandrina
La Tragicomedia de Polidoro y Casandrina es una obra celestinesca que ha llegado a nosotros solo a través de un manuscrito de la Biblioteca Real de Madrid.
Manuscrito y cronología
Fue descubierta por Stefano Arata en dicha biblioteca en 1988.[1] Arata, ya que el códice, autógrafo,[2] no presenta título ni autor, la bautizó con el que todavía mantiene y situó su redacción en los años siguientes a 1564, ya que se menciona la conquista del peñón de Vélez de la Gomera por don García Álvarez de Toledo Osorio, IV marqués de Villafranca del Bierzo.[3]
Género
Se trata de una continuación de La Celestina, la quinta y última, en orden cronológico. Se aleja de sus predecesoras en cuestiones importantes. Posee muchos más personajes (dieciséis), algunas acciones simultáneas y personajes alegóricos (Fortuna y las tres Parcas); muchas situaciones parecen algo exageradas y paródicas, aunque posee una clara condición trágica asegurada por un hiperbólico desenlace lleno de muertes encadenadas; no hay cartas, una de las novedades de las continuaciones, y se abusa de una pedregosa erudición de acarreo, en lo que se vuelve al prototipo, y de los discursos y discusiones metafísicas, filosóficas, teológicas y doctrinales, en boca sobre todo de Galbaldo, la Fortuna y las Parcas.
Estructura y contenido
Su estructura está formada por textos preliminares (unos tercetos encadenados del «autor a los lectores escusándose de haber publicado la obra» y un prólogo recitado por el personaje alegórico de la Fortuna) y luego divide el diálogo en tres actos, cada uno subdividido en cinco "cenas" o escenas separadas por listas de personajes, como hace Sancho de Muñón, cuya obra demuestra conocer.[4] El protagonista, Polidoro, es un rico soberbio y fatuo, posee una mina en las Indias y es tan engreído que cree incluso enamorada de él a la Fortuna y que tiene bajo su poder a las tres Parcas; eso lo vuelve una víctima ideal para criados y alcahuetas, pese a las advertencias de su buen ayo, el sermoneador Gabaldo, que desobedece. En la ribera del río se enamora de Casandrina y ella de él, pero esta no es mujer de alta condición social, sino una «cantonera» o prostituta clandestina, hija de una afamada hechicera y alcahueta salmantina, la Corneja, enemiga de que limite su amor solo a un hombre.
Según Ana Vian Herrero,
- Hay una ideología antimercantil, parodia del sentimiento del honor, del pensamiento mágico, de la reclusión femenina, restauración del orden social aproblemático, refuerzo del clasismo en el amor —como en Lisandro y Roselia, como en la comedia del XVII—, defensa de los valores morales dominantes de la alta aristocracia, etc. Son indicio de gustos nuevos o de temas de nueva fortuna literaria[5]
Referencias
- Arata, Stefano (1988). «Una nueva tragicomedia celestinesca del siglo XVI». Celestinesca. núm. 12.
- Críez Garcés, Pedro Luis (2012). «El códice de la Tragicomedia de Polidoro y Casandrina (Madrid, Real Biblioteca, MS. II-1591)». Literatura medieval y renacentista en España: líneas y pautas.
- Tragicomedia de Polidoro y Casandrina, V, f. 32r.
- Vian Herrero, Ana (núm. 87-88-89, 2003). «La Tragicomedia de Polidoro y Casandrina: relación cíclica y caminos de la parodia». Criticón.
- Ana Vian Herrero, op. cit., p. 912