Víctor de la Serna

Nació el 15 de enero de 1896,[3] dos años después de su hermano Ramón, durante la estancia de sus padres —Ramón de la Serna y la escritora Concha Espina— en la ciudad chilena de Valparaíso. Su infancia transcurrió en España, en la localidad cántabra de Cabezón de la Sal.

Inspector de enseñanza primaria desde 1920,[4] estuvo destinado en las provincias de Madrid, Toledo, Oviedo y Santander.[5] Fundó y dirigió en Santander el diario vespertino La Región,[6] cuyo primer número salió a la calle el 3 de abril de 1924. Llamado por el diario El Sol, se trasladó a Madrid en 1930. También fue redactor de Informaciones, a las órdenes de Juan Pujol.[7]

En la capital formó parte de la tertulia literaria falangista La Ballena Alegre durante los años de la Segunda República, formando parte del grupo de poetas fascistas que rodeó a José Antonio Primo de Rivera.[8] De la Serna fue un miembro importante de Falange en Santander y «militante de inconmovible fidelidad al nazismo».[9] Tras el estallido de la Guerra Civil logró pasar a la zona sublevada,[4] donde se puso al servicio de los golpistas. Llegó a colaborar con la revistas falangistas Jerarquía y Fotos,[10] y también con la Oficina de Prensa y Propaganda de Salamanca.[7] Durante esta etapa fue un partidario incondicional del líder falangista Manuel Hedilla, del cual en 1937 publicó un artículo que lo definía como «uno de los hombres más importantes del mundo».[11]

Fue encarcelado a raíz de los incidentes que precedieron a la promulgación del Decreto de Unificación.[11] Tiempo después sería puesto en libertad y se trasladó a San Sebastián, desde donde habría mandado un telegrama de adhesión al «generalísimo».[12]

En 1939, con el final de la contienda, se trasladó a Madrid. En la capital dirigió el diario Informaciones, y allí trabajó también para la embajada de la Alemania nazi.[13] Informaciones fue, bajo su dirección, el periódico «más pro-Eje de todos los periódicos de Madrid».[2] El propio de la Serna efectuó viajes a Berlín en 1941 y en enero de 1943,[n. 1] además de una visita el Frente Oriental de la Segunda Guerra Mundial junto al conde de Mayalde.[14] Ha sido colocado como uno de los informadores de la red GRILLE en torno a Walter Mosig, miembro del Partido Nazi enviado a España en 1936 como asesor policial.[15] Tras el final de la Segunda Guerra Mundial abandonó la dirección de Informaciones, debido a su identificación excesivamente comprometedora con las posiciones del Eje.[16] Pasaría a asumir la dirección del periódico madrileño La Tarde.

Amigo personal del nazi argentino Carlos Fuldner, De la Serna lo protegió durante su estancia en España.[17] Usando sus estrechos contactos con la Cruz Roja Española, posteriormente colaboraría con Fuldner y otros en la fuga de refugiados nazis hacia Sudamérica.[18] También fue un gran amigo del líder nazi Otto Skorzeny,[19] antiguo líder de comandos durante la guerra mundial. De la Serna llegaría a actuar como testigo de Skorzeny durante su boda en El Escorial, en 1954.[20]

Muchos de sus artículos los escribió con seudónimo, por lo cual Alfredo Marquerie lo llamó «inventor de seudónimos».

Fue presidente de honor de la Asociación de la Prensa de Cantabria (1950-1951) y en 1960, en homenaje a él, se añadió un frontón al monumento a su madre Concha Espina en los jardines de Pereda (Santander) reconociéndole como uno de los más renombrados periodistas del siglo XX.[21] Víctor de la Serna falleció en su domicilio de Madrid situado en el número 65 de la calle de Goya en la noche del 25 de noviembre de 1958 a causa de un infarto de miocardio; llevaba días enfermo.[5][22]

La Asociación de la Prensa de Madrid —de la que llegó a ser presidente—[5] creó en 1970 el Premio Víctor de la Serna de Periodismo al mejor periodista del año.

Contrajo matrimonio con María Gutiérrez-Répide y Crebs. Fue padre de los periodistas Víctor de la Serna Gutiérrez-Répide (1921-1983) y Jesús de la Serna Gutiérrez-Répide (1926-2013), así como abuelo de Víctor de la Serna Arenillas —también periodista—.

Memorial de Víctor de la Serna en los jardines de Pereda de Santander

Publicó un libro sobre arte:

• Los frescos de Vázquez Díaz en Santa María de la Rábida (1933).

También fue el autor de libros, algunos de ellos editados de manera póstuma, que recogían artículos suyos sobre viajes por España

• Doce viñetas. Santander (1929).
• Nuevo Viaje de España. La Ruta de los Foramontanos (1956). Premio Nacional de Literatura.
• Nuevo Viaje de España. La Vía del Calatraveño (1959).
• España, compañero (1964).

• Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil (1958)[23]

• Batanaz, Luis (2011). La inspección de primera enseñanza durante la Guerra Civil y el primer franquismo (1936-1943). Represalia y desgarramiento. Universidad de Córdoba.
• Bravo Morata, Francisco (1986). Historia de Madrid. Años 1954-1955-1956. Fenicia.
• Goñi, Uki (2002). The Real Odessa. Granta Books.
• Juárez Camacho, Francisco Javier (2016). «El espionaje Alemán en España a través del consorcio empresarial SOFINDUS». Diacronie (28). ISSN 2038-0925. doi:10.4000/diacronie.4795.
• Mader, Julius (1963). Jagd nach dem Narbengesicht. Ein Dokumentarbericht über Hitlers SS-Geheimdienstchef Otto Skorzeny. Deutscher Militärverlag.
• Martín de Pozuelo, Eduardo; Ellakuría, Iñaki (2008). «Capítulo 9: El franquismo, los falangistas y la Kriegsorganisation Spanien». La guerra ignorada. Los espías españoles que combatieron a los nazis (1ª edición). Barcelona: Editorial Debate. ISBN 978-84-8306-768-0. |fechaacceso= requiere |url= (ayuda)
• Morán, Gregorio (2014). «Capítulo 5: Retrato de grupo en el Santander de posguerra». El cura y los mandarines (2ª edición). Madrid: Ediciones Akal. ISBN 978-84-460-4128-3.
• Pike, David Wingeate (2008). Franco and the Axis Stigma. Palgrave Macmillan. ISBN 978-1-349-30089-1.
• Rodríguez Alcalde, Leopoldo (1978). Retablo biográfico de montañeses ilustres I. Los escritores. Ediciones de Librería Estudio.
• Rodríguez Puértolas, Julio (2008a). Historia de la literatura fascista española I. Akal.
• —— (2008b). Historia de la literatura fascista española II. Akal.
• Simón Cabarga, José (1982). Historia de la prensa santanderina. Centro de Estudios Montañeses. ISBN 84-500-8281-1.
• Torre, Javier (2015). «Víctor de la Serna: viajero aquiescente del franquismo». Anuari de Filologia. Llengües i Literatures Modernes (Barcelona: Universitat de Barcelona) (5): 99-114. ISSN 2014-1394. doi:10.1344/AFLM2015.5.8.

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