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Todas las tareas que realizabas en versiones anteriores de Windows las puedes seguir haciendo en Windows 8, aunque los accesos ya no los vas a encontrar en un menú desplegable, sino en una pantalla completa.
Para algunas personas resulta muy complejo y molesto la desaparición del menú de Inicio porque no entienden cómo pueden realizar ciertas tareas sin su ayuda. Pero no te preocupes, sí es posible trabajar sin este menú.
Dirígete a la Barra de accesos y haz clic en la opción Configuración.
Allí te aparecerán distintas opciones y accesos para configurar tu equipo. En la parte inferior encontrarás: Volumen, Teclado, Conexión a Internet e Iniciar/Apagar. Haz clic en esta última y, después, selecciona si quieres apagar el equipo, reiniciarlo o suspenderlo.
En la Pantalla de inicio busca el acceso al Escritorio y pulsa o haz clic ahí.
Una vez te encuentres en el Escritorio, despliega la Barra de accesos y pulsa o haz clic sobre Configuración.
Aparecerá un menú en el que encontrarás varias accesos para cambiar diversas cualidades de tu equipo. Haz clic en Panel de Control y esto te dirigirá a la misma ventana de configuración que solías manejar en Windows 7.
Hay algunos programas, como Star Menu Reviver o Clasic Shell, que restablecen el menú de inicio de las anteriores versiones de Windows en caso de que el modelo actual no termine de gustarte.
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