/es/mundo-laboral/relaciones-entre-companeros/content/
Quizás una de las relaciones más difíciles de llevar con alguien en un lugar de trabajo es con el jefe. Muchos por temor, respeto o desinterés no son capaces de hablar o decir cosas para cuidar su puesto. Así mismo, los jefes también deben ser conscientes que el trato que le brindan a su equipo es la imagen que muestra sobre la compañía.
De la forma en que se realice esta comunicación con los superiores se puede llegar a tener un buen o un mal crecimiento laboral. Por ello, esta relación debe ser efectiva y proactiva.
Uno de las situaciones más importantes que hay en la comunicación jefe-colaborador es hacer respetar la opinión propia, ya que muchas personas por miedo a ser despedidos toman una actitud de complacencia con sus superiores. Decir lo que se piensa puede ser valorado y escuchado por los superiores y eso podría llevar a demostrar una gran autoestima.
Otro factor que ayudará a tener una buena relación con tu jefe es la adaptación. Él tendrá una personalidad quizás buena o mala y más fácil que querer cambiarlo a un gusto propio es adaptarse a ella. Analiza el tipo de comunicación que ejerce tu jefe y adecúa tus palabras a él.
Hazte visible. Algunas personas sufren de timidez excesiva y eso no es bueno en el ámbito laboral, puesto que su jefe puede que ni se dé cuenta de sus logros, fortalezas y avances en su trabajo. Ojo, tampoco hay que caer en los autoelogios excesivos que para algunas personas son molestos.
Todas las personas tienen sus cosas buenas y malas, incluso tú, por eso lo mejor es estar siempre abierto a los cambios, retos y nuevas circunstancias que se nos exigen día a día.
Ser jefe no es una tarea fácil como muchos piensan. Si eres uno o algún día esperas serlo, te invito a que leas un artículo sobre los tipos de liderazgo y sus principales características.
/es/mundo-laboral/el-coaching-empresarial/content/
