¿Tu perra se revolcó en el lodo otra vez? Si está preñada, quizá estés preocupado por si puedes asearla o no sin causarle estrés. No te preocupes, si tu perra está acostumbrada a bañarse, ella estará igual de calmada cuando esté preñada.

Parte 1
Parte 1 de 2:
Prepararla para el baño

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    Tranquilízala. Cuando se tiene a una perra preñada, lo más importante es que te asegures de que esté calmada. Su peso extra puede dificultar sostenerla si empieza a forcejear. Acaríciala mucho haciéndole cariño con movimientos largos y háblale con una voz suave. Haz todo lo que puedas para relajarla.
    • Si crees que ella puede escaparse, busca a otra persona para que te ayude. ¡Más manos significan más cariño!
    • Si tu perra tiene miedo de bañarse, no la obligues. Mejor cepíllale su pelo tratando de sacar el mayor polvo que puedas de su pelaje. Será más fácil para ambos.
    • Deja que el lodo húmedo se seque hasta volverse tierra antes de cepillarla.
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    Sigue tu rutina normal. Incluso cuando te sientas preocupado por bañarla por estar preñada, no le contagies tu ansiedad. Actúa como si fuera un baño normal, y no cambies la rutina de ninguna forma.
    • Por ejemplo, si por lo general cargas a tu perra a la bañera, báñala en su lugar de siempre. No vayas a rociarla con una manguera fuera de la bañera porque tienes miedo a cargarla.
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    Junta tus implementos. Ten a la mano bocadillos para premiarla por estar calmada o para animarla a entrar a la bañera. También necesitarás champú para el baño y varias toallas para secarla antes de soltarla en casa.[1] Puedes colocar una de las toallas al filo de la bañera para que el agua no salpique al suelo o a tus pies.
    • Utiliza un champú de avena agradable para perros que no irrite su piel.
    • Vas a mojarte también, así que vístete con ropas que no te importe ensuciar.[2]
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    Coloca una superficie antideslizante en la bañera. Por experiencia sabes que las bañeras pueden ponerse resbalosas cuando le echas agua y jabón al mismo tiempo. Una alfombrita antideslizante ayudará a que tu perra se mantenga firme cuando estés bañándola. Puedes encontrar estas alfombritas antideslizantes en cualquier tienda por departamentos o en línea.

Parte 2
Parte 2 de 2:
Bañar a tu perra preñada

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    Levanta a la perra y ponla en la bañera. ¡Sé cuidadoso! Dependiendo de su tamaño, quizá necesites a dos personas para cargarla. No la cargues por debajo de la barriga, ya que podría ser incómodo o doloroso para ella. En lugar de eso, pasa un brazo por debajo de sus patas traseras (detrás de la barriga), y el otro por debajo de su cuello. Cárgala de la grupa y del pecho.
    • Si tu perra es lo suficientemente pequeña, puedes utilizar el lavadero de la cocina (o de los servicios).
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    Abre la llave del agua. Dale vuela a las boquillas de agua caliente y fría para asegurarte de que el agua salga tibia. Si tienes una boquilla de ducha, rocía el pelaje de tu perra para mojarla por completo. Si no tienes una boquilla, solo vierte vasos de agua sobre ella.
    • Acaríciala y háblale suavemente todo el tiempo para calmarla.
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    Llena la bañera primero si el chorro de agua asusta a tu perra. ¡El sonido de un grifo bullicioso puede atemorizarla! Para algunas perras, puede ser menos estresante comenzar con la bañera ya llena con toda el agua que necesites. Cuando hayas llenado la bañera, puedes levantar suavemente a la perra y ponerla dentro. Utiliza un vaso para echarle agua, en lugar de usar la boquilla de la ducha con el agua saliendo.
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    Enjabónala con champú para perros. Comienza de adelante para atrás de su cuerpo. Primero, jabónala detrás de la cabeza, luego baja hacia su cuello y cuerpo. Al final enjabona las patas y la cola. Toca su estómago muy suavemente y solo lo suficiente para que te asegures de que esté limpio. No sobes con fuerza ni presiones su estómago de ninguna manera.
    • No le pongas jabón en su cara, ya que puede metérsele a los ojos, nariz o boca. En lugar de eso, usa un trapo húmedo para lavarle la cara con agua.[3]
    • También evita que entre el champú a sus orejas.
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    Enjuaga el champú de su pelaje. Si el sonido del chorro de agua no la asusta, vuelve a abrir la llave del agua y utiliza la boquilla de la ducha para quitarle el champú. Si se asusta, utiliza un vaso para echarle agua en su pelaje.
    • Enjuaga hasta que ya no veas espuma en su pelaje.
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    Sácala cargándola de la bañera. Utiliza el mismo método que usaste cuando la pusiste dentro: levántala de la grupa y el pecho. Recuerda tener cuidado de no presionar su barriga. Cerciórate de que sus patas estén afirmadas en el suelo antes de soltarla para que no se caiga.
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    Seca a tu perra. Si tu perra no teme a los ruidos fuertes, puedes apresurar el secado con una secadora. Aunque la mayoría de los perros prefiere que los sequen con una toalla suave. Ella tiene mucho más pelo que los humanos, así que quizás necesites usar varias toallas.
    • No es necesario dejarla totalmente seca. Solo sécala lo suficiente para que no gotee agua en toda la casa.
    • Deja que su pelaje se seque con el aire durante el resto del día.

Consejos

  • Báñala con calma y eficiencia. ¡No hay apuro!
  • Utiliza un champú de avena que sea suave para la piel y el pelaje de tu perra.
  • Dale un premio a tu perra después del baño.
  • Piensa en llamar a un bañador de perros a domicilio si no crees poder bañarla con seguridad.

Advertencias

  • No bañes a tu perra en su día de parto, ni cuando falten dos días para esa fecha. Si hay algún riesgo de que pueda parir cuando estés bañándola, mejor espera hasta después del parto para su aseo.

Acerca de este wikiHow

Lancy Woo
Coescrito por:
Peluquera de mascotas certificada
Este artículo fue coescrito por Lancy Woo. Lancy Woo es una cuidadora de mascotas certificada y la propietaria de VIP Grooming, un salón de belleza para mascotas con sede en San Francisco, California. VIP Grooming ha servido a San Francisco por más de 35 años. Lancy recibió su certificación de peluquería de mascotas en la asociación Western Word Pet Supply. VIP Grooming fue votado como el "Mejor en la bahía" en 2007, 2010, 2011, 2014, 2017, 2018 y 2019 y ganó el premio "Bestia de la bahía" de Bay Woof en 2014. En 2018, el trabajo de Lancy contribuyó a la aceptación de VIP Grooming en el Registro de Empresas Legadas de la Oficina de Desarrollo Económico y de la Fuerza Laboral de San Francisco. Este artículo ha sido visto 9055 veces.
Categorías: Higiene de perros