La tensión sexual es la química potente entre tú y otra persona, la cual te hace sentir mariposas en el estómago y te pone nervioso y emocionado al mismo tiempo. Sin importar si coqueteas con alguien que acabas de conocer o si tratas de convertir una amistad en algo más, generar esta química será un paso vital. Con el contacto físico coqueto, las frases ocurrentes y mucha seguridad, podrás incrementar la tensión sexual y hacer que ambos se emocionen por lo que siga a continuación.

Método 1
Método 1 de 2:
Crear química y tensión en persona

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    Tócala de una forma casual, casi accidental. Cuando empieces a hablar con alguien que te interesa, empieza a establecer el contacto físico en una etapa temprana al rozarte con ella o tocar la parte posterior de su mano u hombro. Al principio puedes hacer que luzca como un accidente, y luego puedes hacer que sea más adrede cuando empiecen a sentirse más cómodos juntos.[1]
    • Si la persona corresponde tu interés, ya sea continuando la conversación o incluso devolviéndote el contacto físico, sé más deliberado. Trata de tocarle la parte baja de la espalda o tomar su brazo o mano con cuidado para aumentar la tensión.[2]
    • Si estás seguro de que le interesas, trata de rozar suavemente el lado de su rostro. Para volverlo más sutil, di algo como “Tengo que sacar el cabello de tu rostro, espera… Listo”.
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    Mírala a los ojos como si te intrigara y te emocionara. Mantener el contacto visual es una manera simple de aumentar la tensión entre ustedes. No solo la mires; mírala directo a los ojos y dale una media sonrisa, como si tratarás de comprenderla. Mira lejos y luego vuelve a mirarla.[3]
    • Mirarla profundamente a los ojos le mostrará que te interesa y te intriga, lo que la hará sentir misteriosa, atractiva y lo suficientemente segura como para seguir coqueteando.
    • ¡Recuerda no mirarla muy fijamente! Mantén las cosas naturales, mirando lejos de vez en cuando, pero entabla contacto visual por un poco más de tiempo del normal antes de mirar lejos.
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    Inicia una conversación casual para romper el hielo. Quizás estés conociendo a esta persona por primera vez o quieras llevar una amistad establecida al siguiente nivel. En cualquier caso, tu interacción debe empezar en torno a algo que sea cómodo para este punto de la relación. Menciona un tema sobre el cual ambos tengan algo que decir y anímala a seguir hablando de ello de una manera coqueta y sutil.

    Hablen sobre algo a su alrededor.
    “Tienes que decirme qué pasa con esta bebida. ¿Tienes un nombre para ello?”.

    Moléstala o dale un reto de forma juguetona.
    “Háblame de este juego. ¿Cuáles son las reglas y cómo te venzo?”.
    “Hagamos una apuesta. Si puedo empujarte hacia la piscina primero esta noche, tendrás que darme tu sombrero. Si lo logras primero… puedes elegir lo que gustes”.

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    Cuenta una historia más personal o coqueta. Luego de romper el hielo, empieza a presentar de forma sutil la idea de algo más. Cuenta una historia sobre una ocasión en la que alguien te coqueteaba y algo divertido ocurrió, o señala a otras personas que estén coqueteando o molestándose. No seas obvio en torno a ello; mantener el tono sexual en el significado más profundo lo volverá más atrayente.[4]
    • Di algo como “Mira a Amanda y Robbie. Han estado coqueteando toda la noche. ¿Cuánto quieres apostar a que la invitará a bailar más tarde?”.
    • Cuenta una historia personal al decir algo como “La última vez que estuve en este bar, pasó lo más alocado. Estaba hablando con esta chica y… Bueno, no sé si deba contártelo”.
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    Acércala y luego aléjala, de forma verbal y física, para agregar tensión. Crear una dinámica de acercarla y alejarla es una de las mejores maneras de generar tensión sexual. Le mostrarás que estás interesado (pero no demasiado) y luego te alejarás para hacer que quiera tener más de ti. Puedes hacerlo de forma verbal y física para crear una interacción emocionante y coqueta.[5]

    Cómo usar este método

    Verbalmente:
    “Sigo pensando en lo adorable que luces… Pero no sé si pueda confiar en ti”.
    “Luces genial, pero no sé si estás lista para conocer a mis amigos”.
    “Lo estás haciendo tan bien… Quizás lo consigas en una de estas ocasiones…”.

    Físicamente:
    inclínate hacia ella o háblale directo en el oído, y luego aléjate.
    Dale un empujoncito o un puño suave en el brazo, luego rózalo con delicadeza, como si trataras de hacerlo mejor.

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    Aumenta su curiosidad al solo contarle tanto como necesites. Un aire de misterio es clave para desarrollar la tensión sexual. Jugar con su curiosidad la intrigará y hará que quiera saber más de ti. Cuando te haga una pregunta, responde de forma simple (diciéndole solo lo suficiente como para captar su interés) y luego hazle la pregunta. Si le estás contando una historia, no hables mucho sobre ella. En lugar de ello, menciónasela en partes breves, asegurándote de captar su interés antes de la siguiente parte.[6]

    Crear un aire de misterio

    Si te pregunta qué haces en tu trabajo, podrías responderle “Trabajo en una compañía de investigación de marketing. Actualmente, estoy haciendo mucho trabajo de redes sociales. Puede ser muy divertido. ¿Y qué hay de ti?”. Esto sentará las bases para que pregunte más sobre tu trabajo y le mostrará que estás interesado en el suyo.

    Si vas a contar una historia, di algo como “Esto me recuerda a lo que ocurrió el otro día. Vi a este chico paseando a su perro por la calle y… Bueno, no sé si deba contártelo. Esta es mi mejor historia y aún no nos conocemos mucho”.

    Siéntete cómodo con los silencios. Si vas a coquetear, quedarte en silencio por un segundo puede ser una gran herramienta, y te dará la oportunidad de usar tu lenguaje corporal y aumentar la tensión sin siquiera decir una palabra.

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    Ten seguridad y confía en que le interesas, incluso si no estás seguro. La seguridad es uno de los rasgos más atractivos que puedes tener, y emitirla puede ayudar a aumentar la tensión sexual con rapidez. Si no te sientes seguro de forma natural, puedes fingirlo y obtener los beneficios.[7]

    Toma una postura relajada. Inclínate en una mesa, mantén los hombros abiertos y cruza los brazos de una manera segura y casi presumida. Sonríe y entabla contacto visual, incluso si te parece demasiado atrevido.

    Finge que eres una persona más segura. Elige a una celebridad, un amigo o incluso un desconocido cuya seguridad puedas sentir. Actúa como creas que lo haría hasta que se sienta natural.

    Repítete “Siente atracción por mí. Me desea”. Incluso si no lo crees por completo, incluir esta idea en tu mente te dará un aumento instantáneo y perceptible de seguridad.

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    Tómate las cosas con calma a nivel físico, garantizando que se sienta cómoda y segura. Apresurarte hacia los aspectos físicos siempre es una mala idea. Si la otra persona no está lista para ello, la pondrás en una situación incómoda o incluso aterradora. Incluso si está de humor para algo más, ir rápido puede hacerte lucir desesperado y arruinar la tensión sexual. En lugar de ello, asegúrate de que ambos quieran las mismas cosas y de que se sientan seguros y cómodos.[8]
    • Di algo como “¿Te parece bien?” o “Quiero lo mismo que tú. ¿Cómo te sientes?”.
    • Ir con lentitud también puede ser sensual por sí solo. Hablar de sus experiencias hará que ambos ansíen más, y lo más sensual es saber que alguien te desea tanto como tú a ella.

Método 2
Método 2 de 2:
Desarrollar tensión sexual por mensajes

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    Moléstala o desafíala para hacer que quiera impresionarte. Mostrarle que eres ingenioso, divertido e interesante por mensaje es una manera fantástica de generar tensión sexual. Envíale mensajes que la molesten o que incluso la desafíen de forma casual, así crearás una dinámica de acercarte y alejarte. Le mostrarás que todavía no estás totalmente impresionado con ella, lo que hará que quiera acercarse incluso más para mostrar lo valiosa que es. Envíale algo como lo siguiente:
    • “Vaya, esa foto de perfil es maravillosa”
    • “Juguemos un juego. Dime una cosa que sea cierto sobre ti y una que sea mentira, y trataré de adivinar… Y tengamos premios”
    • “Tus gustos son los peores. No tienes permiso para ver películas que no apruebe antes”
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    Usa emoticones para agregarle tensión sexual a un mensaje común. Puedes mantener el contenido de tus mensajes en un nivel seguro, pero insinúa una vibra más juguetona y coqueta con los emoticones. Sin embargo, ¡no exageres! Si usas más de dos emoticones en un mensaje o si exageras con los signos de exclamación o interrogación, esto puede lucir desesperado y hacer que la tensión sexual desaparezca.

    La manera correcta de usar los emoticones

    Combina los emoticones claramente coquetos con un mensaje más sutil...
    “Es mejor que tengas cuidado conmigo. Siempre juego para ganar” + un emoticón sonriente
    “Supongo que te veré esta noche” + un emoticón sonriente

    ... Y viceversa.
    “¿Quién está coqueteándote? ¿Yo?” + un emoticón de ángel
    “Oh Dios, eres tan mala” + un emoticón de demonio

    Consejo: solo usa uno o dos emoticones por mensaje, de modo que no abrumes a la persona.

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    Interrumpe los mensajes coquetos con algo más serio o complementario. Enviar mensajes coquetos y casuales es una forma maravillosa de desarrollar la tensión sexual con lentitud, pero una vez que la establezcas, mezclar el tono puede jugar a tu favor. Cuando se sientan lo suficientemente cómodos con el otro, envíale algo más serio o centrado, como un cumplido o una confesión. Prueba algo como lo siguiente:
    • “Hablando en serio, no podía quitarte los ojos la noche anterior”.
    • “Te molesté por ello, pero siendo sincero, cuando abriste la puerta del auto la noche anterior, esto me pareció muy sensual”.
    • “En verdad no puedo dejar de pensar en ti”.
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    Hablen de las cosas que han hecho juntos bajo una nueva perspectiva. Si han hablado por un buen tiempo o si han sido amigos en el pasado, podrás crear tensión sexual y una conexión más profunda al recordar las cosas que hayan hecho juntos y añadir un elemento de coqueteo. Recuérdale algo y luego admite algo que hayas sentido en dicha ocasión y que no podrías expresar. Si le das una pista de sentimientos más profundos sin expresarlos de inmediato, esto profundizará los tonos sexuales de la conversación.
    • “Estoy pensando en el primer mensaje que me enviaste, la frase que usaste… ¿En serio? Pero supongo que no debo reírme, porque míranos ahora…”.
    • “¿Recuerdas cómo nos conocimos? Te sentaste junto a mí y me preguntaste si el asiento estaba libre. Esa fue una buena entrada”.
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    Usa insinuaciones sutiles cuando empiecen a sentirse más cómodos con el otro. Enviar insinuaciones o pistas ingeniosas puede ser eficaz, siempre y cuando lo hagas con cuidado. Debes emitir una vibra de sexualidad juguetona y deseo sin lucir desesperado o aterrador, lo que significa que debes depender del humor y las burlas juguetonas para que funcione. Si se usa de forma correcta, ¡harás que la otra persona adopte la misma mentalidad coqueta que tú! Prueba algo como lo siguiente:
    • “Acabo de comer la hamburguesa más fantástica. Fue algo casi sexual ja, ja”.
    • “Tuve un sueño sobre ti la noche anterior… Pero no te contaré de qué trató”.

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Categorías: Citas y noviazgo