Las pizarras blancas grandes, o pizarras de borrado en seco, son unas de las mejores herramientas para mostrar y organizar información. En vez de comprarlas en una tienda, ahorra un poco de dinero haciendo tus propias pizarras. El plástico y el poliestireno son opciones baratas para hacer una pizarra grande que puedes enmarcar y colgar en la pared. Si necesitas algo magnético, prueba pintar una lámina de acero. También puedes usar papel y plástico para hacer pizarras pequeñas que sean fáciles de transportar. Haz una pizarra para hacer notas, escribir cosas que necesites recordar, y para que de alguna forma te facilite un poco la vida.

Método 1
Método 1 de 3:
Hacer una pizarra de plástico o poliestireno

  1. 1
    Mide la pizarra según la cantidad de espacio disponible que tengas. El tamaño de esta pizarra improvisada depende completamente de ti. Sin embargo, mide el espacio disponible de la pared con anticipación para saber el tamaño del material que debes comprar. Usa una cinta métrica para medirla zona donde quieras colgar la nueva pizarra. Anota las dimensiones y llévalas a la tienda.[1]
    • La mayoría de los materiales para pizarra vienen en láminas de 1,2 m por 2,4 m (4 pies por 8 pies), aunque también hay otros tamaños disponibles. Si no encuentras el tamaño que necesitas, puedes conseguirlo generalmente en una tienda de mejoramiento del hogar.
  2. 2
    Compra una lámina de melamina para hacer una pizarra clásica de color blanco. La melamina es una lámina de conglomerado que tiene una cubierta dura en uno de los lados. La mayoría de las pizarras de las tiendas están hechas de melamina, así que ya sabes cómo quedarán cuando la uses en tu proyecto. Algunas láminas son texturadas para verse como azulejos, lo que puede ser útil si necesitas organizar información en cuadros, pero por lo general una lámina lisa es la mejor opción. Las láminas lisas son más sencillas de limpiarse y se ven mejores cuando se escribe en ellas.[2]
    • La porcelana es una opción similar que puedes usar. Es más duradera que la melamina, pero eso también significa que es más cara.
  3. 3
    Consigue una lámina de plástico si planeas hacer una pizarra transparente. Prueba usar el polimetilmetacrilato o una placa de policarbonato para hacer algo único. Las láminas de acrílico y policarbonato son transparentes, lo que te permitirá ver la pared detrás de ellas. Cuando escribas en la pizarra, será como escribir en la pared. De estos materiales, es preferible la placa de policarbonato ya que tiene la mitad del grosor del polimetilmetacrilato, pesa menos, y no se quiebra si necesitas colgarla en la pared.[3]
    • Las pizarras de plástico no resaltan mucho en la mayoría de las habitaciones y solo quedan bien en las paredes blancas. También puedes conseguir una lámina grande de plástico para hacer una pizarra gigante. La pizarra es muy fácil de limpiar y dura más que la melamina.
  4. 4
    Compra molduras de madera para hacer un marco para la pizarra. Elige longitudes de molduras que sean más largas que la pizarra, para que puedas cortarlas y así formar el marco. Un par de piezas de 2,4 m (8 pies) son perfectas para una pizarra de 0,61 m por 1,22 m (2 pies por 4 pies), por ejemplo. El marco oculta los bordes sin terminar de la pizarra, le deja un borde agradable, y por lo general facilita colgarla. Usa molduras de madera o tiras enrasadas para hacer un marco de manera más fácil.[4]
    • Las molduras compradas en tiendas son un poco costosas comparadas con el resto del material que uses. Si quieres ahorrar dinero, prueba con volver a usar algunas piezas de madera que ya tengas.
  5. 5
    Mide y corta las molduras de madera con una caja de ingletes. Usa una cinta métrica para determinar la longitud y la altura de la pizarra. Mide y marca estas longitudes con lápiz sobre la madera que planees usar para el marco. Luego, coloca la madera en la caja de ingletes, y alinea las marcas con las ranuras de la sierra. Desliza una sierra de mano básica en las ranuras para cortar la madera a un ángulo de 45 grados.[5]
    • Para revisar que concuerden, empuja ambas piezas de madera juntas. Cuando estén cortadas correctamente, deben encajar como cualquier marco. Vuelve a hacer los cortes si notas algún espacio o una superposición en el marco.
    • Si tienes una sierra circular, puedes usarla para cortar la madera más rápidamente.
  6. 6
    Lija la madera con papel de lija de grano 120 a 220 si vas a teñirla. Lijar la madera ayuda a que el tinte se adhiera a las piezas del marco. Comienza con un papel de lija de grano 120 y pásalo por el grano de la madera con una presión suave pero firme. Luego, cambia a papel de lija de grano 220 y pásalo por el marco de nuevo para suavizarlo.[6]
    • El grano son las fibras visibles en la madera. Sigue las líneas para evitar dejar raspones en la madera.
  7. 7
    Pasa un tinte sobre la madera para darle más color. Elige el tinte, y luego usa un pincel de gomaespuma para esparcirlo por todo el grano de la madera. Pásalo por toda la madera con pinceladas únicas y continuas. Cuando termines, deja que el tinte se asiente por hasta 15 minutos antes de añadir otra capa. Las capas adicionales oscurecerán la madera y la harán lucir más atractiva luego de que la cuelgues en la pared.[7]
    • Usa guantes cuando apliques un tinte. Si añades mucho tinte, absorbe el exceso con un paño antes de que se asiente en la madera.
  8. 8
    Pega la madera a la pizarra con pegamento epoxi transparente. Asegúrate de que el marco encaje bien sobre los bordes de la pizarra antes de pegarlos. Cuando todo esté listo, esparce el pegamento epoxi por el reverso de los marcos de la pizarra. Coloca los marcos sobre la parte superior de los bordes de la pizarra, y sujétalos si es necesario para mantenerlos en su lugar. También, añade pegamento en los bordes de las piezas de madera del marco, donde se unen, para ayudar a pegarlas.[8]
    • El pegamento epoxi por lo general viene en 2 partes. Debes mezclar cantidades iguales de resina y endurecedor para formar el pegamento.
    • Algunos otros pegamentos que puedes probar incluyen polímero acrílico y pegamento instantáneo. Un adhesivo de construcción de poliuretano es bueno para pegar pizarras de poliestireno a la madera, ya que el poliestireno resiste más otros tipos de pegamento.
  9. 9
    Cuelga la pizarra atornillándola en la pared. Mide el marco cada 30 cm (12 pulgadas). Con un atornillador inalámbrico, instala tornillos para placas de yeso de 5 cm (2 pulgadas) directamente por la madera y en la pared. Pídele ayuda a alguien para que sostenga el marco todo el tiempo. Los tornillos deben posicionarse en los soportes de madera, o en las tachuelas que estén en la pared para que la pizarra no se caiga al suelo.[9]
    • Para ubicar las vigas de soporte en la pared, usa un detector de vigas de pared. Cuando lo pases por la pared, se iluminará como si detectara las vigas. Marca estas zonas para que sepas dónde posicionar la pizarra para que quede segura.

Método 2
Método 2 de 3:
Hacer una pizarra de metal magnética

  1. 1
    Compra una lámina de metal del tamaño que quieras que sea la pizarra. Si vas a hacer una pizarra, elige un material fino y duradero. El metal es perfecto para este proyecto. Consigue una lámina de acero galvanizado si quieres hacer algo magnético. Con el acero, puedes pegar imanes y dibujar en él.[10]
    • Ten en cuenta de que, a pesar de que el aluminio puede ser una buena opción porque es más liviano que el acero, no es magnético.
  2. 2
    Usa una lámina de madera para enmarcar y reforzar la pizarra. Muchas pizarras no son solo una pieza de material uniforme. Añádele un refuerzo a la pizarra de metal para que sea más fácil moverla y colgarla. El corcho es una buena opción, ya que es suave y liviano, pero podrías usar madera contrachapada o algo similar. [11]
    • Trata de hacer el refuerzo del mismo tamaño de la pizarra que desees hacer. Si puedes hacerlo coincidir con el tamaño del metal, no debes hacer ningún corte adicional.
    • Si el refuerzo es muy grande, puedes cortarlo con una sierra de mano básica. Sin embargo, en la mayoría de las tiendas de mejoramiento para el hogar pueden cortar la pizarra del tamaño que desees si lo pides cuando la compres.
  3. 3
    Usa tijeras de estaño para cortar el metal si es necesario. Todo depende del tamaño del que quieres que sea la pizarra y el espacio que tienes para colocarla. Si no puedes dejar la lámina de metal como está, consigue un par de tijeras de estaño de corte recto. Corta el metal con cuidado para reducir su tamaño y quepa en el refuerzo que elijas.[12]
    • El metal cortado es filoso. Ten cuidado de no tocarlo, y considera usar guantes de cuero para protegerte.
    • Hay diferentes tipos de tijeras de estaño, así que elige las que tienen mango amarillo. Este es el mejor tipo para cortar líneas rectas, que es lo que realmente necesitas para hacer la pizarra.
  4. 4
    Rocía una imprimación en el metal que planeas pintar. A pesar de que no hay reglas que digan que debes hacer la pizarra blanca, estas son pintadas tradicionalmente de esta manera para que todos los colores de tinta sean visibles. Para comenzar a pintar la pizarra, consigue una imprimación de látex resistente al óxido. Rocía la lámina de metal por ambos lados con un movimiento único y controlado. Mantén la lata de aerosol siempre a una distancia de aproximadamente 15 cm (6 pulgadas) del metal.[13]
    • Antes de imprimar, quita toda la suciedad que notes en el metal. Usa un paño suave humedecido con agua. Usar vinagre blanco o alcoholes minerales ayuda a asegurar que la pizarra quede limpia y lista para pintarse.
    • Para lograr una capa prolija y pareja, haz una segunda pasada después de dejar secar la primera capa por aproximadamente 15 minutos.
    • Los marcadores de borrado en seco funcionan bien en el metal, así que no es necesario pintar la pizarra si no quieres. Si te gusta el aspecto del metal brillante más que el blanco tradicional, deja la pizarra como está. Ten en cuenta que los marcadores más oscuros serán más difíciles de verse.
  5. 5
    Pinta el metal de color blanco con pintura para pizarra. Asegúrate de revisar las instrucciones de mezclado en la lata de pintura. Mezcla la pintura con un activador líquido que venga incluido, y luego déjala asentarse por aproximadamente 1 hora. Luego, pasa la pintura por el metal con un rodillo de gomaespuma. Trata de dejar la superficie lo más lisa y pareja posible para que no queden marcas en las que sea difícil escribir.[14]
    • Una pizarra debe tener suavidad y consistencia. Los marcadores de borrado en seco no se ven bien en superficies ásperas, así que tómate todo el tiempo que necesites para pintar bien.
  6. 6
    Espera de 10 a 15 minutos antes de colocar capas adicionales de pintura. La superficie de la pizarra probablemente no se vea de la forma que quieras luego de la primera capa de pintura. Pasa una capa adicional de pintura sobre la primera para asegurarte de que la pizarra quede lo suficientemente gruesa para escribir sobre ella. Ya que el metal es oscuro, considera aplicar un total de 3 o 4 capas. Espera un poco entre cada capa para dejar que la pintura se seque.[15]
    • Dale al metal una capa pareja de pintura. Sigue pasando capas adicionales de pintura en la pizarra hasta que quedes conforme con el resultado.
  7. 7
    Pega el metal pintado al refuerzo con pegamento epoxi. El epoxi es muy fuerte, así que ponte un par de guantes antes de usarlo. Mezcla el epoxi con algo descartable, como un revolvedor de pintura de madera. Cuando estés listo para usar el pegamento, espárcelo inmediatamente sobre el refuerzo con una capa consistente como si estuvieras recubriendo un pastel. Luego, coloca el metal encima, con la parte pintada boca arriba.[16]
    • También puedes usar un pegamento fuerte a base de poliuretano o un adhesivo de construcción de silicona para pegar la pizarra.
  8. 8
    Espera 72 horas para que la pintura y el pegamento se sequen. La pizarra aún no se podrá usar, así que debes darle mucho tiempo para que se seque. Una vez que el pegamento se asiente, puedes colgar la pizarra sin preocuparte de que la lámina de metal se caiga al suelo.
    • No escribas en la pizarra hasta que se haya secado bien.
  9. 9
    Cuelga la pizarra con tiras adhesivas para colgar cuadros. Saca el papel del reverso de las tiras, y luego coloca una en cada esquina del reverso de la pizarra. El otro lado de las tiras también es adhesivo, así que empuja la pizarra firmemente contra la pared. Presiona firmemente la pizarra por 30 segundos para fijar las tiras en su lugar. Prueba la nueva pizarra cuando termines.[17]
    • Las tiras para colgar cuadros son la única forma de colgar la pizarra sin hacer agujeros en la pared.
    • Si planeas colgar la pizarra en el refrigerador, usa pegamento para pegarle imanes en las esquinas. Usa epoxi, pegamento fuerte u otro adhesivo duradero.
    • Otra opción es atornillar la pizarra a la pared. También puedes colgar la pizarra con un colgador para cuadros de metal que se fije en placas de yeso.

Método 3
Método 3 de 3:
Hacer pizarras pequeñas de papel

  1. 1
    Compra cubiertas o envolturas plásticas para usarlas como pizarra. Si buscas algo en donde puedas escribir muchas veces, el plástico es la mejor opción. Las carpetas de informes (láminas de plástico que protegen papeles importantes) son una opción barata. Una carpeta promedio tiene un tamaño de 22 cm por 28 cm (8 1⁄2 pulgadas por 11 pulgadas), el cual es perfecto para hacer pizarras pequeñas e individuales. Puedes encontrar diferentes tamaños, según lo que busques.[18]
    • Las carpetas de informes se ven parecidas a las carpetas plásticas. Puedes conseguir láminas de plástico individuales, pero la mayoría de las carpetas vienen en pares unidos por barras de plástico que se deslizan.
    • Puedes conseguir carpetas de informes en la mayoría de las tiendas generales y de artículos de oficina, junto con otros productos que necesites, si es que no los tienes.
  2. 2
    Corta una pieza de cartón blanco del mismo tamaño que la carpeta. El cartón es bueno para formar una base sólida en la cual escribir, pero también puedes usar papel. Ya que las carpetas de informes son hechas para contener papel, por lo general no necesitas cortarlo. El cartón es un poco diferente, así que córtalo para que quepa y que la pizarra sea más resistente.[19]
    • Las pizarras de papel no son tan resistentes como las de cartón, pero siempre puedes ir cambiando el papel. Es muy útil para los estudiantes. Puedes colocarle una hoja de cálculo, y luego cambiarla por otra distinta.
  3. 3
    Mide y marca los bordes que planees agregarles a las hojas. Añade un borde de cinta para sostener las láminas de plástico y para que luzcan mejor. Elige una cinta adhesiva colorida, luego mide su anchura y divide el número en 2. Traza esa medida por los bordes del plástico con un marcador lavable.[20]
    • La cinta debe pegarse alrededor de los bordes del plástico. La mitad de la cinta debe estar en la parte frontal de la carpeta y la otra mitad en la parte trasera. Delinea bien el borde.
  4. 4
    Coloca la cinta en la carpeta para sostener el plástico. Pega la cinta sobre los bordes del plástico para sostener las tapas de la carpeta juntas. Alisa todo para terminar la pizarra. Planea dejar al menos un lado del plástico abierto si pretendes cambiar el papel entre los plásticos.[21]
    • Para hacer una pizarra permanente en la que no quitarás el cartón, pega los cuatro lados. Recuerda colocar el cartón adentro antes de cerrar el último lado.
    • Otra forma de hacerlo es envolver plástico en el cartón. También puedes conseguir un film plástico o pegar plástico con un pegamento transparente para découpage.
    • También puedes usar una pieza de cartón plastificado para hacer una pizarra resistente con una cubierta transparente. Si no tienes disponible una máquina de plastificado, averigua en la biblioteca más cercana.

Consejos

  • Si quieres dividir la pizarra en diferentes secciones, puedes usar una decoración de carrocería con rayas de una tienda de repuestos para autos. Lo único que debes hacer es pegarlo en la pizarra.
  • Usa pintura magnética para convertir una pizarra normal en una magnética. Simplemente cubre la capa de pintura magnética con pintura para pizarra cuando termines.
  • Puedes convertir las paredes en pizarras con pintura para pizarra. Si quieres hacerlo, asegúrate de tener permiso de pintar y escribir en las paredes.
  • Las pizarras de melamina suelen mancharse después de mucho uso, así que límpiala con un poco de alcohol isopropílico diluido con una cantidad igual de agua. Añadirle una capa de cera para autos a la pizarra también hará que las marcas sean más fáciles de borrarse.[22]

Advertencias

  • Cortar material por ti mismo es peligroso si no tienes cuidado. Usa las sierras de mano de manera responsable y usa un equipo de protección, como una máscara antipolvo y gafas protectoras.

Cosas que necesitarás

Hacer una pizarra de plástico o poliestireno

  • melamina, polimetilmetacrilato, o placa de policarbonato
  • molduras de madera
  • sierra de mano o sierra ingletadora
  • caja de ingletes
  • pegamento epoxi
  • tinte para madera
  • rodillo de gomaespuma
  • mezclador de madera
  • destornillador inalámbrico
  • tornillos para paneles de yeso de 5 cm (2 pulgadas)
  • detector de vigas

Hacer una pizarra de metal magnética

  • lámina de acero galvanizado
  • refuerzo de madera o corcho
  • imprimación de látex resistente al óxido
  • pintura para pizarra
  • mezclador de madera
  • pegamento epoxi
  • tiras adhesivas para colgar cuadros
  • imanes (opcional)
  • tijeras de estaño

Hacer pizarras pequeñas de papel

  • carpeta para informes o envoltorio plástico
  • cartón
  • tijera
  • regla
  • cinta adhesiva

Acerca de este wikiHow

Personal de wikiHow
Coescrito por:
wikiHow Staff Writer
Nuestro equipo de editores e investigadores capacitados han sido autores de este artículo y lo han validado por su precisión y amplitud.

wikiHow's Content Management Team revisa cuidadosamente el trabajo de nuestro personal editorial para asegurar que cada artículo cumpla con nuestros altos estándares de calidad. Este artículo ha sido visto 111 146 veces.