El vellón es suave, abrigador, fácil de cuidar y de trabajar. Se puede poner en la lavadora con agua fría y no se deshará cuando lo cortes. Puedes hacer una manta de vellón simplemente cortando un pedazo de la forma o el tamaño deseados. Sin embargo, si tienes la disposición de esforzarte un poco más en la manta, puedes crear cualquier cosa, desde un regalo útil hasta una obra de arte elegante.

Método 1
Método 1 de 4:
La tela

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    Escoge la tela de vellón y mídela al tamaño adecuado. Si vas a hacer una manta de vellón de una sola capa, que tendrá un lado de adelante y uno de atrás, solo necesitas suficiente tela para una capa. Si quisieras hacer una manta de vellón reversible, que se pueda usar por cualquiera de los lados, requerirás suficiente vellón para hacer dos capas completas.[1]
    • Los siguientes tamaños de manta cubrirán la parte superior de la cama. Agrégales una costura de 1 cm (1/2 pulgada) a 3 cm (1 pulgada) a cada lado si tienes la intención de coser los bordes y no cuentes el orillo (el borde de la tela acabado a máquina) como parte del patrón:
    • Cuna: 70 cm (27 pulgadas) por 130 cm (52 pulgadas).
    • Una plaza: 100 cm (39 pulgadas) por 190 cm (74 pulgadas).
    • Dos plazas: 140 cm (54 pulgadas) por 190 cm (74 pulgadas).
    • Queen: 150 cm (60 pulgadas) por 200 cm (80 pulgadas).
    • King: 200 cm (78 pulgadas) por 200 cm (80 pulgadas).
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    Marca la línea de corte con un marcador lavable para tela. Corta a lo largo de la línea con las tijeras o extiende el vellón en una tabla de picar y coloca una guía de corte recta y sólida a lo largo del borde que tienes planeado cortar. Guía una cuchilla rotatoria a lo largo de la guía de corte y ve cortando la tela. También puedes cortar el vellón con tijeras de zigzag, lo que automáticamente creará un borde que se vea algo acabado.
    • Asegúrate de que la superficie debajo de la manta esté segura de los daños. No querrás dejar cortes en una mesa o encimera agradable.

Método 2
Método 2 de 4:
Para una manta de una sola capa

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    Termina el borde de la manta de vellón con una remalladora, tendrás otras opciones. Estas incluyen:[2]
    • Terminar los bordes a mano con un punto festón o sobrehilado.
    • Terminar los bordes con un punto de máquina de coser decorativo.
    • Tejer a crochet alrededor de la manta como sugiere el Linus Project. Usa una cuchilla perforadora giratoria para crear agujeros que estén a una misma distancia el uno del otro a lo largo del borde del vellón. Coloca un gancho de crochet a través de cada agujero, de uno en uno.

Método 3
Método 3 de 4:
Para una manta reversible (de dos capas)

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    Junta los lados delanteros de los pedazos de vellón. Los bordes no tienen que alinearse perfectamente, pero deben estar bastante cerca. Inserta alfileres rectos cada cierta cantidad de centímetros para asegurar los pedazos.
    • Si no puedes identificar el lado delantero de la tela, pregúntale al personal antes de salir de la tienda de telas. También puedes lavar el vellón varias veces y luego escoge el lado más atractivo (menos peludo) de la tela como el lado "delantero".
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    Cose los dos pedazos de vellón uniéndolos en tres lados. Deja un espacio uniforme de entre 1 y 3 cm (1/2 y 1 pulgada) para la costura. Tienes dos opciones para terminar el cuarto borde:[3]
    • Dale la vuelta a la manta por el borde abierto. Cose a mano o máquina a lo largo de todo el borde final y asegura los dos pedazos.
    • Cose a lo largo del cuarto borde y deja una apertura de 10 cm (4 pulgadas). Dale la vuelta a la manta a través de esta abertura, de modo que los dos lados delanteros estén hacia afuera. Termina la abertura de 10 cm (4 pulgadas) a mano con un punto sobrehilado o festón.
      • De lo contrario, omite la costura por completo. Corta un fleco de entre 1 y 2 cm (1/2 y ¾ de pulgada) a cado lado de la manta. Amarra los dos pedazos del vellón, amarrando un par de flecos a la vez. Lee abajo si quieres instrucciones.

Método 4
Método 4 de 4:
Para un borde trenzado o amarrado

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    Corta un cuadrado en cada esquina. Es decir, después de que tengas los pedazos de tela con los que quieras trabajar. Córtalos del tamaño adecuado y corta las esquinas, alrededor de 5 cm (2 pulgadas) será un buen tamaño.[4]
    • Las esquinas son casi imposibles de anudar o trenzar. Esto hará que el resto sea mucho más fácil y evitará que te preguntes qué hacer con esos bordes incómodos.
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    Marca y corta el fleco. Una forma fácil de hacerlo es con la cinta de pintor. Marca una línea a los cuatro lados de tu manta (en la parte delantera). Tenla alineada con la profundidad de los cortes de las esquinas.[5]
    • Haz los cortes. Deja aproximadamente 2 cm (1 ½ pulgada) a 3 cm (2 pulgadas) para la profundidad del fleco. El ancho de cada pedazo tendrá unos 3 cm (1 pulgada). Toma la cuchilla rotatoria y empieza a hacer cortes en los cuatro largos de la manta.
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    Decide si estás trenzando o amarrando los bordes. Si estás amarrando, ¡felicitaciones! Lo único que tienes que hacer es amarrar la capa de arriba y abajo del fleco con nudos para unirlas. Empieza en un borde y toma los dos pedazos del fleco que están uno sobre otro. Amárralos con un nudo doble y avanza por todo el contorno. Si vas a trenzar, sigue leyendo:
    • Haz cortes en cada pedazo de fleco. Es correcto, tendrás agujeros pequeñitos en todos los flecos, así permanecerán trenzados y unidos.
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    Empieza un pedazo de fleco para comenzar. Cualquiera estará bien. Usa un clip doblado (un gancho de crochet también será excelente) y mételo a través del corte del primer fleco.
    • A continuación, mete el clip por el corte del fleco de abajo. Este "enganchará" el segundo fleco y podrás tirarlo a través del primero.
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    Sigue atravesando y "trenzando". Una vez que lo hayas atravesado en el primer movimiento, el clip (o gancho de crochet) habrá atravesado el corte del segundo fleco y podrás pasar al siguiente de arriba. Mete el clip a través del siguiente corte para enganchar el siguiente fleco. Si eres diestro, lo más fácil será ir de derecha a izquierda y viceversa.[6]
    • Lo más importante es siempre alternar entre usar un fleco de arriba y uno de abajo. Cuando llegues a las esquinas, solo haz lo mismo. La esquina se curvará por naturaleza.
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    Corta el último pedazo del fleco por la mitad. Úsalo para amarrarlo en el primer fleco. Asegúrate de hacer al menos un doble y triple nudo si el fleco tiene el largo necesario. Este será el único nudo de toda la manta.[7]
    • ¡Listo! No, el borde no se deshará. Siempre que hayas amarrado cada pieza, no habrá problema.

Consejos

  • Si no puedes encontrar una tela que tenga el ancho necesario para crear una manta de vellón con un solo pedazo, cose varios paneles.
  • Piensa en otras maneras de hacer una manta dependiendo del propósito que le darás.

Cosas que necesitarás

  • tela de vellón
  • una cinta métrica o una regla
  • un marcador no permanente
  • tijeras, tijeras zigzag o un tapete para cortar, una cuchilla rotatoria y una tabla para cortar (si vas a coser)
  • una cinta de pintor
  • una aguja y un hilo, una remalladora, una máquina de coser o un gancho para crochet y lana (si vas a coser)

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Categorías: Manualidades de tela