Cómo instalar una puerta de ducha de vidrio

Si estás buscando un método para mejorar tu cuarto de baño, considera la posibilidad de reemplazar la cortina de la ducha con una lujosa puerta de vidrio. No solo las cabinas de vidrio son visualmente más atractivas, sino que además son más fáciles de instalar para el dueño de casa promedio, lo que elimina la necesidad de buscar contratistas costosos. El primer paso es medir la abertura de la ducha para determinar el tamaño adecuado de la puerta. Luego, debes cortar los carriles de montaje para adaptarlos a las dimensiones de la cabina de la ducha y asegurarlos en su sitio. Por último, debes colgar la puerta (asegurándote de que quede al ras con los carriles en cada lado) y aplicar sellador alrededor de los bordes para crear un sello hermético.

Parte 1

Parte 1 de 4:
Ensamblar el marco de la puerta corrediza o abatible

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Mide la abertura de la ducha. Para asegurarte de que la puerta de la ducha se ajuste correctamente, debes tomar 3 medidas separadas: la longitud total del umbral, el punto medio del umbral y la altura de las paredes hasta 150 cm (5 pies). Estas medidas te ayudarán a encontrar las dimensiones necesarias para cada uno de los carriles de la puerta.^{[1]
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- Ten en cuenta la distancia entre la abertura de la ducha y los accesorios de plomería cercanos (como el inodoro o el lavabo) para dejar un espacio libre adecuado.
- Anota las medidas de la cabina en una hoja de papel por separado en caso de que necesites consultarlas en cualquier momento durante el proceso de instalación.^{[2]
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Escoge entre una puerta corrediza y una abatible. El estilo que escojas dependerá principalmente de tus preferencias. Dicho esto, el tamaño de la ducha puede afectar el aspecto y la función de la puerta. Las puertas abatibles tienden a ser más adecuadas para las cabinas pequeñas, que miden 120 cm (48 pulgadas) o menos de pared a pared, en la que el espacio limitado hace que sea más fácil colocar una sola puerta grande. Para las cabinas que tienen más de 150 cm (60 pulgadas) de ancho, un par de puertas corredizas economizarán espacio al ofrecer un patrón de movimiento más práctico.^{[3]
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- Si decides colocar una puerta corrediza, la medida para la mitad del punto del umbral se volverá importante, ya que constituye el punto en el que los bordes de ambos paneles de la puerta se superponen al cerrarse.
- Compara tamaños y estilos de puertas diferentes para encontrar uno que coincida con la cabina de la ducha.^{[4]
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Corta la guía base a la longitud adecuada. Utiliza una segueta de dientes finos para recortar la pieza de metal de manera que coincida con la medida del umbral. La longitud de la guía debe corresponder exactamente con la del umbral para que se ajuste con firmeza a la abertura de la cabina.^{[5]
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- Una caja de ingletes puede servirte para llevar a cabo cortes más prolijos y precisos.
- Pasa una escofina metálica sobre los extremos cortados para alisarlos. Asegúrate de aspirar las virutas metálicas que hayan quedado para evitar que rayen el piso del baño.^{[6]
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Centra la guía base sobre el umbral. Coloca la pieza sobre el umbral elevado y utiliza una cinta métrica para medir la misma cantidad de espacio en cada lado. Verifica que la alineación se ajuste cuidadosamente, incluso si se desvía por 19 mm (0,75 pulgada), ya que es probable que la puerta no se cierre correctamente.^{[7]
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- Marca la ubicación de la guía base con un lápiz. De esta manera, podrás volver a centrarla fácilmente si se desliza mientras trabajas.
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Aplica un sellador de silicona para asegurar la guía base. Una vez que coloques la pieza inferior donde la necesites, debes aplicar una línea de sellador de silicona a cada lado para pegarla. Aplica presión constante sobre la guía base durante aproximadamente un minuto hasta que el sellador se haya secado lo suficiente como para que se mantenga en su sitio.^{[8]
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- La mayoría de los selladores de secado rápido se asientan entre 3 y 12 horas. Sin embargo, el sellador puede tardar un día entero en curarse por completo.^{[9]
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- Para prevenir las fugas, debes evitar utilizar la ducha hasta que el sellador haya tenido tiempo de secarse.
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Alinea la jamba del lado de la bisagra con la guía base. Desliza la jamba hacia abajo dentro de la guía base ranurada. Debes esperar un minuto para asegurarte de que se encuentre al ras (apoyada contra la pared) y a plomo (perfectamente recta). De lo contrario, podrías terminar con pequeños vacíos en el marco terminado.^{[10]
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- La jamba del lado de la bisagra se puede distinguir de la del lado de la cerradura por las ranuras de montaje en las que se fija la bisagra de la puerta en el borde interior.
- En la mayoría de las duchas, la bisagra se coloca en el lado opuesto de la cabina desde la regadera.
- Las puertas corredizas no tienen jambas específicas del lado de la bisagra o del lado de la cerradura, pero la instalación de los carriles laterales es básicamente el mismo proceso.
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Marca los agujeros de los tornillos sobre la pared. Inserta la punta de un lápiz en los agujeros que se extienden hacia arriba por la jamba del lado de las bisagras y marca un pequeño punto en cada uno. Estos puntos servirán para indicar hacia dónde ajustar los tornillos necesarios para asegurar la jamba.^{[11]
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- Las marcas de cera se notan mejor que el grafito sobre las paredes acrílicas o de baldosas.
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Taladra los agujeros para los tornillos. Retira la jamba de la pared y taladra los agujeros con una broca para mampostería de 4 mm (3/16 de pulgada). Cada agujero para tornillo debe tener aproximadamente 44 mm (1.75 pulgada) de profundidad para acomodar los tornillos de montaje. Una vez que hayas terminado de taladrar los agujeros, debes golpear suavemente los anclajes de plástico de la pared para proteger la superficie de la ducha.^{[12]
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- Puedes ayudar a marcar una muesca en los agujeros de los tornillos con una viruta o un terrón pequeño para comenzar. Este procedimiento proporcionará un asiento poco profundo para la broca para que sea menos probable que se desvíe.
- Debes taladrar con cuidado para asegurarte de que cada agujero se encuentre perpendicular a la pared.
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Coloca la jamba y ajusta los tornillos. Coloca la pieza del marco contra la pared, alinea los agujeros de los tornillos con los que acabas de taladrar. Haz que un ayudante sujete con firmeza la jamba mientras colocas un tornillo de cabeza cilíndrica redondeada de 38 mm (1,5 pulgadas) en cada agujero y lo ajustas bien hacia abajo.^{[13]
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- Debes taladrar lentamente para evitar ejercer demasiada presión. Este procedimiento puede generar fracturas por estrés en el marco circundante.
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Repite este procedimiento con la jamba del lado de la cerradura. Alinea, marca, taladra y coloca la jamba de la pared en el lado opuesto tal y como lo hiciste al principio. Una vez que termines, debes haber ensamblado 3 de las 4 piezas del marco.
- No olvides ajustar a plomo y al ras la pieza e insertar los anclajes para pared antes de ajustar los tornillos.
- La estructura de la jamba del lado de la cerradura es más simple que la del lado de la bisagra. Por lo general, se trata de una pieza en forma de “L” que actúa como un tope para la puerta.
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Mide y corta el carril del cabezal. Cierra la puerta de la ducha y extiende la cinta métrica de un lado a otro. Marca las dimensiones sobre el cabezal del marco y utiliza la segueta para cortarlo a la medida. Alisa el borde sin procesar con una escofina metálica.^{[14]
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- Es importante que midas y cortes el carril superior por separado, en lugar de duplicar las dimensiones de la guía base. Es probable que no tenga exactamente el mismo ancho de la parte inferior del marco.^{[15]
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Fija el cabezal en la parte superior del marco. Eleva el carril superior en los bordes superiores de la puerta y ajústalo hasta que se deslice en su sitio. Si el cabezal con el que vas a trabajar tiene agujeros para los tornillos en el extremo, debes ajustarlos para mayor seguridad. Esta pieza completará el cuarto y último lado del marco.
- Muchos cabezales de puertas de ducha cuentan con ranuras para encajar en la parte superior de las jambas, sin la necesidad de unirlas al marco por separado.
- Si tienes una puerta abatible, debes asegurarte de que el brazo más corto del cabezal apunte hacia afuera de manera que la puerta se pueda abrir y cerrar con libertad.
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Parte 2

Parte 2 de 4:
Instalar una puerta abatible

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Inserta el carril de la bisagra en la jamba de ese lado. Orienta la esquina inferior de la puerta hacia la guía base ranurada. Luego, levántala y presiónala en la jamba lateral. Utiliza la cinta métrica para verificar si el borde opuesto de la puerta se encuentra a plomo, o si avanza de arriba abajo donde se encuentra con la jamba del lado de la cerradura.^{[16]
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- Debes tomarte el tiempo suficiente para conseguir la plomada perfecta. Los marcos de la mayoría de las puertas de vidrio permiten un margen de error de 38 mm (1,5 pulgadas) para que puedas ajustar la alineación sin desenganchar el carril de la bisagra de la jamba.
- Busca un par de manos adicionales para que te ayuden a maniobrar la puerta de la ducha pesada en su sitio. Es probable que te resulte demasiado difícil manipularla de manera segura por tu cuenta.^{[17]
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Taladra los agujeros de los tornillos en la jamba lateral. Pídele a tu asistente que sujete la puerta mientras taladras un agujero de guía de 5 mm (7/32 de pulgada) directamente en la jamba del lado de la bisagra a través de cada uno de los agujeros para tornillos en el carril de la bisagra. Por lo general, se necesitan entre 3 y 4 tornillos para montar con éxito la mayoría de las puertas de vidrio.^{[18]
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- Si vas a trabajar solo, puedes utilizar unas cuantas tiras de cinta para ductos para evitar que la puerta se mueva.
- Aspira y desecha todas las virutas metálicas sueltas después de realizar la perforación.
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Fija la puerta a la jamba. Coloca los tornillos en los agujeros de arriba abajo para terminar de ensamblar la puerta. Asegúrate de que cada tornillo se encuentre asegurado, pero no excesivamente ajustado. El marco debe ser capaz de soportar el peso de la puerta sin que tambalee ni se mueva demasiado.
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Prueba la puerta de la ducha. Abre la puerta y ciérrala varias veces para verificar si se desliza como debería. Si crees que se encuentra correctamente alineada, esta debe deslizarse con suavidad a través de su rango de movimiento completo sin hacer ruido. Cuando esté cerrada, el lado de la manija de la puerta también debe fijarse con firmeza contra el carril del cabezal y la jamba del lado de la cerradura.
- Si las bisagras ejercen resistencia en algún punto o detectas un chirrido excesivo, es probable que sea necesario verificar la rigidez de los tornillos o inspeccionar el ras, la plomada o el nivel de la guía base y la jamba del lado de la bisagra.
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Parte 3

Parte 3 de 4:
Instalar una puerta corrediza

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Instala amortiguadores en las jambas laterales. La mayoría de los kits de instalación de puertas corredizas para ducha vienen con topes amortiguadores (piezas de goma o plástico que evitan que la puerta choque contra la jamba del lado de la cerradura al cerrarse). Estos elementos se pueden fijar simplemente al deslizarlos sobre los tornillos de fijación antes de asegurar el carril del lado de la cerradura en su sitio.^{[19]
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- Algunas puertas solo cuentan con un tope amortiguador en el centro de la jamba del lado de la cerradura. Otras pueden emplear de 2 a 3 amortiguadores, ubicados en intervalos regulares en los que haya un agujero para los tornillos en el carril.
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Fija los soportes colgantes en la parte superior de los paneles de las puertas. Identifica los 2 agujeros de montaje a cada lado del borde superior de ambos paneles. Coloca un clip separador de plástico sobre cada agujero. Luego, desliza los soportes colgantes metálicos sobre los separadores. Inserta los bujes en los agujeros desde la cara externa de la puerta y luego asegúralos en la cara interior utilizando tuercas ciegas. Repite este procedimiento con el otro panel de la puerta.^{[20]
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- Verifica si los soportes se encuentran al ras contra los separadores de plástico para garantizar una conexión estable.
- Si los rodillos que permiten que la puerta se abra y se cierre no están incorporados en los soportes colgantes, debes colocarlos por separado utilizando tornillos de 38 mm (1,5 pulgadas).^{[21]
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Fija los rodillos a los soportes colgantes. Alinea los agujeros en los rodillos con las ranuras de montaje en la parte superior de los soportes. Inserta los pernos o tornillos a través de los rodillos y asegura los extremos con tuercas. Ajusta los pernos o tornillos con la mano hasta que ya no puedas girarlos.^{[22]
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- Los rodillos deben avanzar hacia el exterior (el lado sin recubrir) del panel de la puerta interior, y el interior (recubierto) del panel de la puerta exterior. Esto permitirá que las puertas se abran y se cierren en direcciones opuestas.^{[23]
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Ensambla las puertas desde el carril del cabezal. Eleva el panel interior en el interior del carril del cabezal y asegúrate de que los rodillos en los soportes colgantes estén colocados en las ranuras de la parte inferior del carril. Orienta el borde inferior de la puerta en la guía base y verifica también la alineación en ese lugar. Luego, cuelga el panel exterior en la guía exterior del carril del cabezal. Desliza ambas puertas de un extremo al otro de la guía base varias veces para verificar si se deslizan correctamente.^{[24]
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- Asegúrate de colgar ambas puertas con el lado recubierto (o con textura) hacia adentro. Esta capa está diseñada para proteger la superficie del vidrio de la exposición continua al agua dentro de la ducha. Además, oculta los rayones y las manchas de agua para que se noten menos.
- Si las puertas no se mueven como se supone que deben hacerlo, debes retirarlas del marco y volver a colocarlas hasta que consigas la alineación correcta.
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Parte 4

Parte 4 de 4:
Terminar la instalación de las puertas corredizas o abatibles

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Instala los accesorios de la puerta. Debes revisar los accesorios que vienen con el kit de instalación de la puerta de la ducha y retirar las manijas, las anillas, los ganchos y los toalleros. Debes fijar estas piezas con los tornillos y las herramientas que vienen con el kit. Estira suavemente cada pieza para probar su estabilidad.^{[25]
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- Por lo general, los accesorios de las puertas de vidrio están diseñados para colocarse desde el exterior de la ducha y ajustarse desde el interior.
- También cuentas con la opción de comprar accesorios diferentes o personalizarlos según tus especificaciones personales (aunque esto puede requerir perforaciones adicionales).
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Rellena los vacíos o las grietas restantes. Revisa los bordes del marco completo y aplica una línea delgada de sellador de silicona en cualquier lugar que sea necesario. Este procedimiento sellará cualquier abertura diminuta que pueda ser invisible y evitará que el agua se filtre al utilizar la ducha. Deja que el sellador se seque durante toda la noche antes de utilizar la ducha.^{[26]
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- Si has ensamblado correctamente el marco de la puerta, es poco probable que descubras imperfecciones estructurales evidentes. Aun así, es importante que tomes tus precauciones si deseas asegurarte de que la estructura de la nueva cabina sea totalmente hermética.
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Verifica si existen fugas. Una buena manera de verificar si la puerta cerrada genera un sello lo suficientemente ajustado es abrir la llave de la ducha y dirigir el agua directamente hacia la puerta. Si descubres algún defecto, notarás que el agua se filtra por los lados o por el fondo en unos instantes. Aplica sellador adicional sobre el marco en cualquier lugar en el que detectes un goteo o un desborde de agua.^{[27]
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- Utiliza una toalla para secar el marco mojado antes de agregar más sellador. Debes esperar a que el sellador se cure por completo antes de realizar la siguiente prueba.
- Si el agua se está escapando entre la puerta y la guía base, considera la posibilidad de colocar una charola de goteo separada para atrapar y redirigir toda el agua que de otro modo terminaría en el piso.
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Consejos

La instalación de una puerta de vidrio en una ducha es un proyecto que puedes completar con la ayuda de otra persona y con frecuencia en tan solo un par de horas.
Las adiciones sencillas como las puertas de vidrio pueden contribuir en gran medida a aumentar el valor de reventa de una casa.
Asegúrate de pulir la nueva puerta con regularidad. Puedes utilizar un limpiavidrios que no deje marcas para eliminar las manchas de agua dura.
Si el baño cuenta con una combinación de ducha y bañera, será necesario extraer la bañera para instalar un umbral elevado antes de poder colocar una puerta de vidrio abatible.

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Advertencias

Cualquier error que cometas aumentará rápidamente los gastos del proyecto. Si no estás seguro de tu capacidad para realizar la instalación por tu cuenta, es probable que te resulte más económico contratar a un profesional que realice el trabajo por ti.

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