Cómo lavar tu auto en invierno

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Mantén la sal que los trabajadores de tránsito pusieron en la calle, lejos de tu auto. Puedes hacer cola en el centro de lavado de autos cuando la temperatura te lo permita, o puedes hacer lo siguiente:

Pasos

1
Usa champú o champú para bebés (mientras más suave mejor). Llena un balde mediano hasta la mitad con agua tibia y vierte aproximadamente la medida de una tapa de la botella de champú. Remueve el agua para crear espuma.
2
Llena otro balde con agua tibia para enjuagar. Recuerda, no le agregues ningún tipo de jabón a este balde.
3
Asegúrate que tu auto o camión esté libre de nieve y hielo. Usa tus manos o una brocha para quitar el exceso de nieve y hielo de tu vehículo. Quizá sea difícil quitar el hielo así que mejor deja lo que esté realmente pegado. Quizá debas usar un poco más de agua tibia para derretirlo.
4
Empieza a lavar. Abrígate ya que estarás en un clima frío. No es hora de ponerse bikini. No deberías usar guante en la mano que vas a usar para lavar el auto. Simplemente empieza en la parte superior de un lado del auto y avanza sistemáticamente por todo ese lado hasta que esté limpio. Al igual que como lo que dice en la botella de champú: enjuaga y repite.
5
No olvides lavar las ruedas. Ellas sufren lo peor de lo que las pistas tienen para ofrecer.

Consejos

Una última cosa que debas tener en cuenta. A pesar que lavar tu auto por tu cuenta en invierno te ahorrará dinero, gastar un poco más para ir al centro de lavado de autos es una inversión que vale la pena de vez en cuando. Que le apliquen una capa de cera opcional es una gran forma de proteger tu auto contra la sal y la mugre que las carreteras salpican sobre tu auto.
Todo esto es más simple si tienes acceso a un suministro exterior de agua con control de temperatura.
Si puedes, usa una toalla grande para secar tu auto inmediatamente después de enjuagarlo. También, trata de lavarlo en un día soleado. Esto ayudará a que tu auto seque rápidamente y evitará que tus puertas se congelen cerradas.

Advertencias

No elijas un día con temperaturas bajo cero. Esto causará que el agua se congele en las puertas y las deje cerradas o que ingrese en los orificios para las llaves y no te deje usarlas.