Cómo limpiar sillones de cuero

Coescrito por Susan Stocker

Los sillones de cuero le dan un toque de elegancia y lujo a una habitación. Debes mantenerlos en su mejor condición con un mantenimiento regular. Cuidar sillones de cuero es fácil, pero no puedes tratarlos al igual que otros materiales. Usa los productos de limpieza adecuados a la hora de quitarles las manchas o tratar el desgaste básico.

Método 1

Método 1 de 3:
Limpiar los sillones de cuero con regularidad

1
Averigua cuál es el tipo de cuero. Antes de intentar limpiar un sillón de cuero, averigua cuál es el tipo de cuero. En las etiquetas del fabricante que llevan los muebles de cuero generalmente se dan consejos y advertencias de limpieza.
- Busca si el mueble tiene alguna etiqueta. Si no la encuentras, busca el material escrito que haya venido con el mueble al momento de comprarlo. Si conoces el tipo específico de sillón, podrás encontrar el manual de instrucciones por internet.^{[1]
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- En la etiqueta o las instrucciones encontrarás consejos para limpiar el mueble. También sabrás qué productos pueden dañar el cuero.^{[2]
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- Si no puedes averiguar el tipo específico de cuero de tu mueble, recuerda que la mayoría de los muebles de cuero están hechos de cuero engrasado. Por lo general, es seguro limpiar este cuero con jabón corporal suave y agua.^{[3]
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2
Aspira el sillón. Antes de empezar a limpiar el mueble, dale una buena aspirada. El aspirado periódico puede evitar que los muebles de cuero se desgasten.
- Para obtener los mejores resultados, usa una aspiradora que tenga un accesorio de cepillo suave.^{[4]
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- Pasa la aspiradora por el sillón, asegurándote de llegar al polvo entre los cojines y a cualquier recoveco.^{[5]
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- Cuando termines, pásale un paño. Usa uno de algodón o de microfibra.^{[6]
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- Observa si hay áreas problemáticas a la hora de aspirar y quitar el polvo. Después podrás tratar cualquier mancha que encuentres con jabón u otros productos de limpieza.^{[7]
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Haz un limpiador con agua y jabón. Después de aspirarlo y quitarle el polvo, prepara el limpiador. El cuero se puede limpiar con materiales domésticos básicos.
- Usa un jabón líquido suave. Los jabones que se usan en la ducha son buenos siempre que sean suaves.^{[8]
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- Si puedes, usa agua destilada en vez de agua de grifo. El agua de grifo puede contener pequeñas cantidades de contaminantes, tales como el cloro, que pueden dañar el cuero.^{[9]
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- Mezcla el agua y el jabón hasta que se forme espuma en la superficie.^{[10]
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Pasa un paño por el sillón. Prueba primero en un área pequeña del sillón. Si no observas ningún tipo de daño, remoja un estropajo limpio en el líquido y escúrrelo bien. De allí, pasa el estropajo mojado por el sillón.
- Cuando termines de echar la mezcla de agua y jabón, toma otro estropajo. Remójalo solo con agua destilada y luego escúrrelo. Repite el proceso con este estropajo.^{[11]
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- Toma un tercer estropajo y úsalo para secar el sillón.^{[12]
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5
Acondiciona el cuero. Siempre debes acondicionar el cuero después de limpiarlo para restaurar sus aceites naturales. Puedes usar aceite de oliva para acondicionarlo. Echa un poco de aceite de oliva a un paño seco. Luego, frótalo por el cuero hasta que tenga un brillo bonito.^{[13]
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- Ten mucho cuidado y no uses demasiado aceite de oliva, sino puede verse grasoso. Si tu sillón se ve más oscuro después de acondicionarlo, habrás usado demasiado aceite. Procura usar menos la próxima vez.^{[14]
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Método 2

Método 2 de 3:
Quitar manchas

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Pasa un paño seco por las manchas de grasa. Si hay alguna mancha de grasa en el sillón de cuero, quítala de inmediato con un paño limpio y seco. No añadas agua, sino podrías fijar la grasa.^{[15]
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- Si la mancha no sale después de tratar de quitarla, espolvorea bicarbonato de sodio sobre la zona afectada. El bicarbonato ayudará a absorber la grasa. Déjalo actuar unas cuantas horas y luego quítalo suavemente con un estropajo.^{[16]
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2
Usa alcohol isopropílico para las manchas de tinta. Las manchas de tinta son comunes en los muebles de cuero. Si ves una mancha, el alcohol isopropílico quizá sea tu mejor solución.
- Toma un hisopo. Échale un poco de alcohol encima.^{[17]
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- Pasa el hisopo por la mancha hasta que desaparezca.^{[18]
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- Este método también puede ayudar a quitar moho de un sillón de cuero.^{[19]
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Prueba con el jugo de limón y cremor tártaro para arreglar los cambios de color. Los cambios de color son comunes en los muebles de cuero, en especial si el sillón es claro. Puedes usar una mezcla de cremor tártaro y jugo de limón para quitar este tipo de manchas.
- Haz una mezcla de partes iguales de jugo de limón y cremor tártaro. La cantidad que necesitarás dependerá del tamaño de las manchas que quieres quitar. Mézclalos hasta obtener una pasta.^{[20]
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- Aplica la pasta sobre las áreas manchadas. Déjala actuar durante 10 minutos. Luego, toma un paño húmedo y quita la mezcla con él.^{[21]
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Método 3

Método 3 de 3:
Probar limpiadores alternativos

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Prueba con vinagre y aceite de oliva. Si el cuero no responde a los métodos convencionales, puedes usar vinagre y aceite de oliva en su lugar. Mezcla 1 parte de vinagre con 1 parte de aceite de oliva extra virgen. Luego, aplícalo sobre el cuero con un paño suave realizando movimientos circulares. Déjalo actuar durante 10 minutos antes de sacarle brillo al sillón con un paño seco.^{[22]
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Usa pañitos para bebé. Los pañitos para bebé pueden usarse para quitar la acumulación de residuos pegados al sillón de cuero. Si no sabes si usar estos pañitos sobre tus muebles, también hay unos específicamente diseñados para quitar la suciedad del cuero. Puedes comprarlos por internet o en la tienda local de muebles.^{[23]
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Prueba con laca de pelo. Si tienes niños pequeños, quizá termines con manchas de marcador sobre el sillón de cuero. Podrás quitarlas con laca.
- Usa una laca en aerosol. Atomízala sobre las áreas manchadas. Luego, frótalas suavemente y mira si la mancha sale.^{[24]
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- También puedes usar aceite de eucalipto para quitar manchas de marcador si la laca no es efectiva.^{[25]
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Consejos

Si vas a limpiar o quitar manchas con cualquier producto, pruébalo en la parte trasera del sillón para asegurarte de que no cambie de color.
Limpia los líquidos derramados de inmediato para que no se conviertan en manchas.
Mantén los sillones alejados de fuentes de calor, como chimeneas o conductos de ventilación, para evitar que se agrieten.
Mantén los sillones de cuero alejados de la luz solar directa para evitar que pierdan su color.

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