¿Tu pelo cae recto como una flecha? ¿De vez en cuando se pone ondulado pero solo después de haber pasado un largo día en la playa? ¡No te preocupes! Para agregarle unas cuantas ondas al pelo, tienes bastantes opciones para elegir. Aunque uses calor o no, ¡obtendrás unas ondas hermosas que son fáciles de crear en la comodidad de tu casa!

Método 1
Método 1 de 5:
Usando un rizador de pelo y cardado

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    Peina cualquier nudo y luego separa tu cabello en secciones para trabajar más fácilmente. Dependiendo de cuánto cabello tengas, puedes usar cualquier número de particiones. Dos es probablemente suficiente. Divide tu cabello en dos secciones (superior e inferior es por lo general bastante útil) y separa del camino una sección.
    • También puedes dividir tu cabello entre derecha e izquierda si lo deseas, aunque por lo general es más fácil dividirlo en la parte superior e inferior.
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    Sosteniendo el rizador de pelo con tu mano opuesta, envuelve un mechón de pela alrededor del rizador. La sección debe ser casi 2,5 cm (1 pulgada) de ancho. A medida que lo envuelves alrededor del rizador, asegúrate de mantener el pelo plano, sin girarlo mientras lo envuelves.
    • Deja los últimos 2,5 a 5 cm (1 a 2 pulgadas) de cabello fuera del rizador, de tal manera que se mantenga recto mientras el resto del cabello se ondee. Esto dará un aspecto más espontáneo.
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    Cambia el ángulo de tu rizador de pelo para cambiar los rizos. Dependiendo de tu look final, es posible que quieras ajustar el grado de tensión de tus rizos. La manera en que sostengas el rizador determinará cuán ondeado o rizado estará tu cabello. Incluso puedes probar de 2 a 3 métodos diferentes para tener un look con más textura y hacer que se ve un poco más natural. Por ejemplo:
    • Inclinar el rizador hacia arriba mientras envuelves tu cabello dará como resultado rizos más relajados.
    • Inclinar el rizador hacia abajo dará como resultado risos más ajustados.
    • Inclina el rizador hacia abajo, casi de manera vertical, para tener rizos aún más ajustados
    • Retuerce el cabello ligeramente a medida que lo encrespas, tirando con fuerza, para obtener rizos muy ajustados.
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    Cepilla suavemente los rizos para obtener un look más ondulado. Agarra un cepillo y peina la mitad inferior de tu cabello, aflojando los rizos para obtener ondas ligeras. Esto no es estrictamente necesario, pero dará como resultado un cabello menos rizado y ondulado.
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    Rocía ligeramente un cepillo con un spray para el cabello y luego muévelo de arriba hacia abajo en tu cabello. Esto añade cuerpo y levantamiento a los rizos, ayudándolos a que sean ondas grandes y hermosas. Trabaja en secciones pequeñas, moviendo el cepillo de arriba hacia abajo y añadiendo un poco más de spray para el cabello cuando sea necesario.
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    Rocía tu cabello con laca para el cabello para que tus rizos se queden en su lugar, ¡y listo! Esto es todo lo que tienes que hacer. Continúa experimentando con tu rizador de pelo y tu cepillo para encontrar el look que más te guste.[1]

Método 2
Método 2 de 5:
Estrujarlo

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    Busca el accesorio de difusor para la punta del secador de pelo. La mayoría de los secadores de pelo incluyen un difusor que puedes poner en la punta del secador. El difusor dispersa el calor sobre un área más amplia del pelo, en lugar de dirigir el aire a una sola área. Esta herramienta te ayudará a ondular el pelo sin dejarlo esponjado.
    • Los mejores difusores son redondos y cóncavos en el medio y no son planos como pico de pato. Esta forma hará que las ondas se sequen de forma más natural porque podrán apoyarse en el interior del difusor redondo y secar los mechones naturales.[2]
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    Lávate el pelo antes de estrujarlo. Es necesario lavarte el pelo para este método porque es necesario que te seques el pelo mojado con un difusor para ondularlo. Por lo general, las personas con el pelo ondulado también tienen el pelo seco. Puedes comprar un champú hidratante y un acondicionador para lavarte el pelo o puedes usar cualquier champú que funcione mejor para tu tipo de pelo.[3]
    • Considera lavarte el pelo con un método sin champú, con poco champú o solo con acondicionador, en lugar de usar un champú.[4] Los métodos sin champú o con poco champú son champús alternativos sin detergentes. Debido a que los detergentes y los sulfatos que se encuentran en los champús normales pueden secar las cutículas y hacer que el pelo se esponje, muchas personas con ondas naturales han empezado a lavarse el pelo sin champú.
    • Si eliges usar un champú, compra uno que no contenga sulfato. Los sulfatos son agentes de limpieza que secan el pelo y causan estragos en el pelo ondulado.
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    Sécate el pelo con una toalla o al aire hasta que quede húmedo. El pelo debe estar húmedo antes de empezar. Si quieres evitar que se esponje, usa una toalla suave hecha de microfibra o una camiseta suave y quítate la humedad del pelo. [5]
    • Usa la toalla suave y seca las raíces del pelo primero.
    • Toma el pelo por secciones y sécalo con toquecitos entre los pliegues de la toalla.
    • Deja que el pelo se seque al aire durante media hora o más para que quede más húmedo que mojado cuando empieces a usar el secador. O puedes enrollarte una toalla suave en la cabeza durante 15 o 20 minutos para absorber la humedad del pelo.
    • No aprietes el pelo demasiado fuerte ni lo retuerzas con la toalla, porque puede dañarlo. El pelo mojado es más propenso a romperse, así que ten cuidado cuando esté mojado y no exprimas las ondas si no es necesario.[6]
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    Aplícate un producto en el pelo. Puedes aplicarte espuma, gel o una crema para peinar, según lo que prefieras. También puedes usar una crema o aerosol protector del calor para proteger el pelo del daño causado por el calor. Si tienes el pelo naturalmente ondulado, probablemente también estará seco y una crema para peinar espesa que lo hidrate funcionará bien.
    • Para aplicarte el producto, frota la crema o espuma en las palmas de las manos y en lugar de aplicarla desde la raíz hasta las puntas, estruja con suavidad el pelo en secciones de abajo hacia arriba con las manos para distribuir ligeramente la crema a las secciones naturales de tu pelo. Si tienes el pelo corto, haz lo mismo y cubre los grupos de ondas existentes o posibles, desde la parte superior, estrujando el pelo con el producto en las manos. Esta técnica te ayudará a que las ondas tengan movimiento y no queden pesadas.[7]
    • Si tienes el pelo naturalmente seco, evita los productos con alcohol porque lo resecan.[8]
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    Estruja el pelo en secciones. Lanza el pelo hacia abajo y usa el difusor para secar las ondas y las manos para definirlas. Apunta el secador desde la parte inferior, en lugar de secar de arriba hacia abajo. Toma una sección del pelo y colócala en la parte cóncava del difusor. El pelo debe empezar a formar ondas naturales con el calor del difusor. Luego deja caer el pelo del difusor y con la mano en forma de garra, toma la sección y estruja lentamente el pelo desde la parte inferior. Al estrujar el pelo con la mano, dirige el secador a los espacios que quedan entre los dedos.
    • Suelta el pelo cuando esté casi seco y repite el procedimiento con otra sección. Sigue secando sección por sección con el secador de manera uniforme hasta que el pelo esté seco aproximadamente un 90 %. Luego deja que el resto del pelo se seque al aire después de secar con aire frío las ondas con el secador.
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    Sécate las ondas con aire frío. Ajusta el secador a temperatura fría y sécate el pelo de 30 segundos a 1 minuto para ayudarte a fijar el estilo. La mayoría de los secadores tienen un ajuste frío o tienen un botón que puedes sostener y hará que el aire salga frío. El aire frío te ayudará a sellar la cutícula del pelo para que las ondas se mantengan en su lugar.[9]
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    Aplícate un aerosol ligero en el pelo ondulado. Voltea la cabeza hacia abajo y rocía todo el pelo con aerosol para mantener las ondas. Estruja el pelo en secciones con la mano en forma de garra para ayudar a sostener las ondas en el pelo. Debes usar un aerosol de fijación baja, flexible o media para evitar que el pelo quede crujiente o tieso. Lanza el pelo hacia atrás y arréglalo a tu gusto.
    • Mantén la botella de aerosol por lo menos a 15 cm (6 pulgadas) de distancia del pelo para no rociarlo muy cerca de la cabeza.
    • Existen aerosoles que le agregan fuerza y brillo al pelo sin agregarle peso. Dove y Garnier tienen aerosoles con una fijación ligera excelente, antihumedad, mejoran el brillo y mantienen las ondas en su lugar.

Método 3
Método 3 de 5:
Trenzarlo

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    Lava y acondiciona tu cabello antes de dormir. Querrás que tu cabello esté húmedo para este método debido a que dormirás con las trenzas de un día para otra para que tu cabello quede ondulado. Sigue con tu rutina normal de lavado de cabello para preparar tu cabello para el trenzado.
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    Deja que tu cabello seque hasta que esté húmedo. Querrás que tu cabello esté húmedo antes de trenzarlo para que seque de la noche a la mañana. Ten cuidado de no secar demasiado tu cabello o de lo contrario no creará tantas olas.[10]
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    Separa el pelo en secciones anchas de 5 a 7 cm (2 o 3 pulgadas) y sujeta el pelo con un broche. Empezando por el lado derecho o izquierdo de la cabeza, usar unos broches o cintas para dividir el pelo en secciones de 5 a 7 cm (2 o 3 pulgadas). Una vez que tengas una sección superior de esquina sujetada, pasa de forma metódica de un lado de la cabeza al otro hasta que las secciones queden sujetadas y luego empieza a crear una nueva fila debajo de la primera. Sigue hasta que la mitad de la cabeza esté separada en secciones.
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    Trenza cada sección del pelo. Para lograr un efecto más ondulado, hazte trenzas francesas. También puedes dormir con trenzas normales para que el pelo te quede ondulado. Empieza en la base de la cabeza y divide el mechón en tres secciones. Trenza el pelo hasta abajo. Si puedes, pídele a un amigo que te ayude para que puedas trenzar toda la cabeza. Trenza el pelo hasta el final y sujeta cada trenza con una banda elástica que no sea de hule, si tienes.
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    Duérmete con las trenzas. La mayoría de la gente necesita unas 6 horas para que las trenzas se sequen. Tómate el tiempo suficiente para dormir con las trenzas la noche anterior del día que quieres tener el pelo ondulado, sobre todo si tienes el pelo grueso. Si el pelo de las trenzas aún está húmedo en la mañana, puedes secar las trenzas con el secador. Ten cuidado al secarlas porque el pelo podría quedarte muy esponjado. Es mejor dejar que el pelo se seque naturalmente.
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    Quítate las trenzas en la mañana. Deshaz las trenzas una por una, empezando de un lado de la cabeza hacia el otro. Deja que el pelo se desenrolle suavemente cepillando ligeramente los mechones. Protege las ondas y no las separes fuertemente con los dedos.
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    Alborota y arréglate el pelo con los dedos. Aplana o esponja el pelo con los dedos según lo que quieras. Aplánalo en la raya y ondúlalo en las secciones intermedias y en las puntas. Quita suavemente cualquier enredo con los dedos. Pero no te cepilles el pelo. Si lo haces, el pelo puede perder las ondas y quedar muy esponjado.

Método 4
Método 4 de 5:
Moños pequeños

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    Lávate el pelo antes de acostarte. Debes tener el pelo húmedo para hacer este método porque dormirás con unos moños pequeños toda la noche para que el pelo te quede ondulado. También puedes usar una botella en spray y humedecer tu cabello en lugar de lavarlo.
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    Asegúrate de que tu cabello esté húmedo. Elimina el exceso de agua de tu cabello antes de hacerte los moños pequeños. Querrás que tu cabello esté húmedo antes de empezar. Si tu cabello está demasiado húmedo, no secará bien de la noche a la mañana.[11]
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    Separa el pelo en secciones de 7 a 10 cm (3 a 4 pulgadas) para hacer los moños. Las secciones más pequeñas crearán moños más pequeños y unas ondas más apretadas, mientras que las secciones más grandes crearán ondas más sueltas. Elige el estilo que prefieras o mézclalos y crea unas ondas pequeñas al frente y unas ondas más grandes atrás. Pasa metódicamente por el pelo y sujeta las secciones de 7 a 10 cm (3 a 4 pulgadas), creando filas de izquierda a derecha hasta llegar a la raya del pelo en la parte posterior. Luego haz otra fila debajo de la primera hasta llegar a la parte inferior de la cabeza y que el pelo tenga secciones regulares en un lado de la cabeza.
    • Después de que termines de hacer los moños en un lado, puedes pasar al otro lado de la cabeza y dividir el pelo en secciones de forma metódica de nuevo.[12]
    • Al separar el pelo de esta forma, las ondas quedarán más regulares. Si quieres lograr un estilo más despeinado, puedes crear moños al azar en toda la cabeza.
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    Gira cada sección de pelo en espiral y sujétalas acomodándolas en la parte superior de la cabeza. Tal como lo harías con un moño normal, gira la sección de pelo hasta llegar a las puntas. Una vez que el pelo esté girado, haz espirales pequeñas con el pelo sobre el cuero cabelludo, hasta que el pelo forme un pequeño moño. Asegúralo con un par de horquillas o bandas elásticas que no sean de hule a cada lado de la espiral, para que quede firme en su lugar.
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    Pasa por toda la cabeza repitiendo los pasos del 5 al 7 hasta que todo el pelo quede sujetado. Pídele a un amigo o familiar que te ayude a sujetar los moños en la parte posterior de la cabeza. Si no tienes quién te ayude, puedes separar el pelo desde la parte posterior de la raya y dividirlo hacia adelante sobre ambos lados para que los moños queden a los lados, en la parte posterior de la cabeza. Usa dos espejos para ayudarte a sujetar y colocar los moños cuando trabajes atrás de la cabeza.
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    Duérmete con los moños. La mayoría de la gente necesita unas 6 horas para que los moños se sequen. Tómate el tiempo suficiente para dormir con los moños la noche anterior del día que quieres tener el pelo ondulado, sobre todo si tienes el pelo grueso.
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    Quítate los moños en la mañana. Empieza con las secciones de atrás y quita con cuidado los broches de cada moño para que el pelo quede suelto. Continúa en toda la cabeza hasta que todo el pelo quede suelto. Deja que el pelo se desenrolle suavemente, sacudiendo la cabeza para aflojar el pelo o tocando ligeramente las ondas. Pero no pases demasiado los dedos por el pelo porque debes tratar de que las ondas permanezcan intactas el mayor tiempo posible.
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    Alborota y arréglate el pelo con los dedos. Afloja las ondas con los dedos y quita cualquier enredo. Ten cuidado de no cepillarte el pelo porque si lo haces, el pelo puede perder las ondas y quedará esponjado.
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    Aplícate un aerosol de fijación ligera en el pelo ondulado. Voltea la cabeza hacia abajo y rocía todo el pelo con aerosol. Después de regresar el pelo a su lugar, coloca la mano en forma de garra y estruja el pelo en secciones, para ayudarlo a sostener las ondas.

Método 5
Método 5 de 5:
Un moño

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    Lava tu cabello antes de hacerte el moño. Como alternativa, rocía la parte media y los extremos de tu cabello con una botella de spray para que esté húmedo. Querrás que tu cabello esté húmedo para este método porque necesitarás que seque con el moño para que se vea ondulado.
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    Sécate las raíces del pelo con el secador, pero deja las puntas y la sección intermedia húmedas. Apunta el secador hacia abajo desde la parte superior de la cabeza y seca las raíces en la raya del pelo. Luego, eleva el pelo en secciones y seca las raíces. Deja la sección intermedia y las puntas húmedas.
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    Separa el pelo por la parte posterior de la cabeza y gira las dos grandes secciones del pelo. No te preocupes por que la raya sea exacta, toma el pelo de modo que quede más o menos la mitad del mismo en cada mano. Gira cada lado del pelo en una dirección hasta que quede girado hasta la punta. Si quieres que las ondas queden hacia adentro, gira el lado derecho del pelo hacia la izquierda y el pelo que está en la mano izquierda, hacia la derecha. Si quieres que el pelo se enrolle hacia afuera, gira cada lado en la dirección opuesta.
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    Gira un mechón hasta llegar a la espalda. Cuando hayas girado ambos mechones hasta la parte inferior, gira los dos mechones juntos para que se entrelacen como una trenza. Sigue girándolos hasta la parte posterior del cuello, hasta que llegues al final del pelo. Debe quedar un mechón largo y entrelazado. Asegúrate de sujetarlo al final para que no se deshaga.
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    Enrolla ese mechón entrelazado, formando un moño de bailarina en la parte posterior de la cabeza. Enrolla el pelo entrelazado en círculo, en la parte posterior de la cabeza, hasta que se forme un moño apretado. El moño debe quedar bajo y colgando un poco por encima de la nuca. Asegura el moño en la parte posterior de la cabeza con un lazo o con un par de horquillas de garra para el pelo.
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    Déjate el moño hasta que el pelo esté seco. Dependiendo de qué tan grueso tengas el pelo, se llevará una cantidad diferente de tiempo para secarse. Las personas que tienen el pelo más corto o más delgado, es posible que solo tengan que esperar un par de horas para que el pelo se seque. Mientras que las personas con el pelo grueso, pueden tener que esperar todo el día.
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    Quítate el moño y arréglate el pelo. Afloja suavemente el moño desde la parte posterior de la cabeza, teniendo cuidado de no jalarlo demasiado fuerte. Alborota y arregla el pelo con los dedos. Afloja las ondas con los dedos y elimina cualquier enredo. No te cepilles el pelo ni le pases mucho los dedos. Las ondas deben mantenerse y al tocarlas, puedes hacer que pierdan su forma.

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Categorías: Cabello ondulado