El tema del nudismo familiar puede ser difícil debido a los valores culturales. Sin embargo, es saludable que los integrantes de la familia puedan estar desnudos frente al resto de los miembros. De hecho, abordar la desnudez como algo natural y normal puede ayudar a los niños a desarrollar una imagen corporal saludable y citas más seguras a medida que crecen. De todas formas, es importante que el nudismo familiar se practique con seguridad. Para ello, enséñales a tus hijos acerca del nudismo, establece reglas y límites y aborda los posibles problemas.

Método 1
Método 1 de 3:
Enseñarles a los niños acerca del nudismo

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    Enséñales a tus hijos que el nudismo es algo natural y no sexual. Dependiendo de la cultura en la que hayas crecido, es posible que veas el nudismo como algo sexual. Sin embargo, también es el estado más natural de los seres humanos. Al estar desnudo cerca de los niños, actúa como si fuese algo normal y natural. Anímalos a aceptar el nudismo como una parte más del ser humano, en vez de ser algo exclusivo del acto sexual.[1]
    • La desnudez no debe despertar la atracción sexual. Procura separar el concepto de sexo y nudismo en tu familia para poder practicarlo de manera saludable.

    Advertencia: Lo ideal es presentar el nudismo en la familia cuando los niños son pequeños. Si tus hijos son más grandes, quizás sea mejor que lo practiques en su ausencia, a menos que se sientan cómodos con la idea de estar desnudos.

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    Practica el nudismo frente al sexo opuesto desde una edad temprana. Uno de los mayores desafíos con respecto al nudismo familiar es lidiar con la diferencia entre los sexos. Generalmente, los niños tienen muchas preguntas, y algunas personas podrían sentirse incómodas con tu decisión. Presenta el nudismo frente al sexo opuesto desde el nacimiento de tus hijos o tan pronto como sea posible y enséñales las diferencias entre los cuerpos, informándoles cuáles son los comportamientos seguros y apropiados.[2]
    • Responde sus preguntas acerca de las diferencias entre los cuerpos de los familiares, como los genitales y el vello corporal. Por ejemplo, puedes decirles: "Tengo más vello corporal que tú porque soy un adulto. Un día, tú también lo tendrás" o "Tú tienes pene y tu hermana tiene una vagina; esa es la diferencia que observas allí abajo".
    • Explícales qué está bien y qué no a la hora del contacto físico. Por ejemplo, puedes decir: "Nadie debe tocarte de forma tal que te genere incomodidad. Además, nadie debe tocarte ahí abajo".
    • No hay nada malo en que los niños vean a sus padres desnudos si no es de manera sexual y se sienten cómodos con la idea.
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    Promueve una imagen corporal saludable al estar desnudo. Uno de los mayores beneficios de practicar el nudismo familiar es que tus hijos puedan desarrollar una imagen saludable de sus cuerpos. Al estar desnudo frente a ellos, actúa con comodidad y orgullo por tu cuerpo. Además, evita hacer críticas de tu cuerpo cuando estén cerca.[3]
    • En vez de decir: “Desearía no tener grasa abdominal”, puedes decir: “Me alegra saber que mi cuerpo me ha permitido traerte al mundo”.
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    Evita expresar tu sexualidad en un entorno familiar. Si bien la sexualidad es normal y saludable, solo debes expresarla en privado. De lo contrario, tus hijos podrían confundirse con respecto a lo que está bien y está mal. Si te excitas, cúbrete o márchate a otra sala. De manera similar, no te toques de manera sexual con tu pareja cuando tus hijos estén cerca.[4]
    • Por ejemplo, no acaricies los pechos de tu pareja ni toques sus genitales cuando tus hijos estén mirando. De lo contrario, creerán que también deben hacerlo, dado que estarás moldeando sus comportamientos.
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    Explícales que existen distintas normas culturales con respecto al nudismo. Cada cultura tiene sus propios valores relacionados con el nudismo. Por ejemplo, las culturas europeas son más receptivas acerca del nudismo público y familiar, mientras que otras son más reservadas. No hay nada de malo en las diferencias entre los valores culturales o el cuestionamiento de los valores del lugar donde vives. Sin embargo, es importante que hables con tus hijos para que sepan que existe una diferencia entre cómo viven ellos y la forma de pensar de sus amigos.[5]
    • Por ejemplo, puedes decir: “En nuestra familia, nos gusta vivir de la forma más natural y celebrar nuestros cuerpos, por lo que nos sentimos cómodos al estar desnudos frente a nuestros familiares. Algunos de tus amigos podrían pensar que no está bien, porque tienen otros valores familiares”.

Método 2
Método 2 de 3:
Establecer límites y reglas

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    Cuida tu higiene al estar desnudo. Al practicar el nudismo, tendrás que prestarle más atención a la higiene de tu familia para evitar manchar los muebles o el piso con materia fecal y fluidos vaginales o menstruales. Asegúrate de que tu familia se bañe con frecuencia y que cada uno se limpie bien después de usar el baño. También es una buena idea sentarse sobre una toalla para no ensuciar los muebles.[6]
    • El uso de paños húmedos después de usar el baño permite mantener limpia la zona genital y anal.
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    Permite que cada miembro decida con qué se siente cómodo. Quizás quieras practicar el nudismo familiar por los beneficios que crees que aporta. Sin embargo, es posible que tus familiares no sientan lo mismo. Permite que tu pareja, hijos y otros integrantes de la unidad familiar decidan qué es lo que los hace sentir cómodos. Luego, trabajen juntos para respetar las necesidades de todos.[7]
    • Por ejemplo, quizás tu pareja se sienta cómoda al usar ropa interior, pero no quiera estar totalmente desnuda. De manera similar, tus hijos podrían decidir que prefieren estar desnudos únicamente con los familiares del mismo sexo.
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    Respeta los límites de cada miembro de la familia con respecto al nudismo. Después de establecer las preferencias de cada uno, aborden los límites como familia. Luego, revísalos a medida que tus hijos crezcan para asegurarte de que sigan alineados con sus necesidades y sentimientos.[8]
    • Por ejemplo, si tu hijo dice que no quiere estar desnudo frente a los demás, usa ropa cuando estés con él. De manera similar, es posible que tus hijos no quieran bañarse o tomar una ducha con otros familiares, ¡y eso está bien!
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    Establece reglas con respecto a los momentos en que está bien y es apropiado estar desnudos. Si bien no hay nada de malo con el nudismo, no es apropiado en todas las circunstancias. Los adultos generalmente identifican con facilidad las situaciones en que es preciso usar ropa, pero los niños podrían tener dificultades para discernirlo. Habla con ellos acerca de la importancia de estar vestidos en espacios públicos y ayúdalos a establecer reglas. Considera las siguientes ideas:[9]
    • Pueden estar desnudos en casa y en sitios apartados.
    • Deben usar ropa en presencia de los invitados.
    • Deben usar ropa en la escuela o el trabajo.
    • Deben usar ropa en espacios públicos.

Método 3
Método 3 de 3:
Abordar posibles problemas

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    Aborda las diferencias físicas de manera positiva y educativa. Tus hijos observarán las diferencias entre los cuerpos, como los órganos sexuales y la cantidad de vello y la grasa corporales. Responde las preguntas que tengan acerca de los cuerpos de cada familiar. Mantén una actitud positiva y ayúdalos a aprender más acerca del cuerpo humano.[10]
    • Por ejemplo, si tu hijo te pregunta: “¿Por qué no tienes pene?”, puedes responderle: “Algunas personas nacen con pene, y otras nacen con vagina”.
    • Es posible que te diga algo así como: “¿Por qué tu abdomen es flácido?”. En este caso, puedes responder: “Algunas personas tienen un abdomen flácido, mientras que otras tienen un abdomen más duro. Ambos son hermosos”.
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    Enséñales a responder preguntas acerca del nudismo. Mientras que puede ser un estilo de vida saludable para tu familia, algunas personas pueden sentir cierta confusión al respecto. Esto significa que tus hijos tendrán que responder muchas preguntas a medida que crezcan. Habla con ellos acerca de cómo pueden abordar la situación. De esta forma, podrán explicar los valores familiares para que los demás comprendan.[11]
    • Por ejemplo, un amigo podría preguntarle a tu hijo: “¿No está mal estar desnudo frente a tus padres?”. En este caso, tu hijo puede responder: “En nuestra familia, el nudismo es algo natural, por lo que no nos resulta raro. De hecho, ni siquiera notamos cuando estamos desnudos”.
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    Ten una conversación tranquila si tus hijos demuestran un comportamiento sexual. Es normal que los niños pequeños exploren sus cuerpos, por lo que no debes preocuparte si comienzan a tocarse. Sin embargo, es importante que les enseñes lo que está bien y lo que está mal. Dile con calma y respeto que no está bien tocarse de manera sexual frente a los demás y explícales que tampoco deben tocar a otras personas de esta forma.[12]
    • Por ejemplo, puedes decir: “He visto que te has tocado el pene hace un rato. Está bien que lo hagas, pero solo debes masturbarte a solas”.
    • No te molestes ni lo critiques. De lo contrario, pensará que la sexualidad es algo malo.

    Consejo: Si tu hijo demuestra comportamientos sexuales de manera constante, lo mejor es que lo lleves al médico. Si bien es normal que los niños exploren sus cuerpos, en ocasiones adoptan comportamientos sexuales por la exposición a situaciones sexuales inapropiadas.[13]

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    Enséñales acerca del contacto físico apropiado e inapropiado. El nudismo busca que los niños se sientan cómodos con sus cuerpos, ¡lo cual está muy bien! Sin embargo, también deben aprender que no está bien que otros adultos o niños toquen sus partes privadas. En primer lugar, enséñales a tus hijos los nombres de las partes de sus cuerpos y, luego, explícales que no está bien que las personas los toquen y que, en caso de suceder, deben contártelo de inmediato.[14]
    • Por ejemplo, puedes decirles: “Tu cuerpo solo es tuyo, por lo que las personas no deben tocarte ahí abajo. Si alguien alguna vez lo hace, habla conmigo cuanto antes para asegurarme de que estés a salvo”.

    Consejo: Puedes explicarles que, en ocasiones, tú o el médico pueden tocarlos en sus áreas privadas por motivos médicos. Sin embargo, asegúrate de que sepan que nunca se debe hacer en secreto. Por ejemplo, puedes decir: “En ocasiones, está bien que los padres o médicos te toquen ahí. Si esto sucede, no tengas miedo de contarme o hablar con un adulto de confianza acerca de lo sucedido. El contacto físico apropiado nunca debe ser un secreto”.

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    Jamás les muestres contenido pornográfico. Por más que esté bien practicar el nudismo familiar, esto no significa que tus hijos deban ver a otras personas desnudas. Bajo ninguna circunstancia les enseñes imágenes pornográficas, dado que esto podría confundirlos con respecto a lo que es natural o no, y hacer que exploren comportamientos sexuales inapropiados antes de estar listos. Si tienes fotos pornográficas, guárdalas en un lugar seguro y oculto.[15]
    • Por ejemplo, ver fotos pornográficas provocadoras puede hacer que tus hijos no puedan separar el nudismo familiar del nudismo sexual.

    En efecto, todo material que incluya nudismo, sea pornográfico o no, tiene como advertencia que no debe ser ofrecido a menores de 18 años de edad.

Consejos

  • El nudismo familiar no es perjudicial para los niños siempre que se respeten los límites de cada integrante. De hecho, puede ayudarlos a construir una imagen corporal positiva y tomar decisiones de citas saludables a medida que crecen.[16]
  • Es posible que tus hijos quieran ser más reservados al entrar en la pubertad. Durante esta etapa, quizás quieran cubrirse más. Recuerda respetar sus deseos y seguir su ejemplo.[17]

Advertencias

  • Ten cuidado al hablar acerca del nudismo familiar con otras personas, dado que quizás no comprendan tus valores. Es posible que malinterpreten el concepto de comodidad familiar con el nudismo con algo sexual.
  • Quizás sea difícil que tus hijos practiquen el nudismo familiar después de ir a la escuela, dado que no es un estilo de vida ampliamente aceptado. Habla con tus hijos y respeta sus preferencias.[18]
  • El nudismo no está bien visto en familias con valores religiosos muy arraigados, principalmente entre los Testigos de Jehová y las diversas ramas del cristianismo.

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Categorías: Vida familiar