En la mayoría de los casos, las pegatinas se elaboran con un material adhesivo que está diseñado para pegarse y despegarse. Pero en ocasiones despegarlas del vidrio es una pesadilla, y que dejan residuos antiestéticos, especialmente aquellas que están elaboradas para permanecer pegadas permanentemente. Con un poco de ayuda y mucho poder para restregar, podrás quitar las pegatinas de papel y de otros materiales, como así también todo el pegamento, de las superficies de vidrio.

Método 1
Método 1 de 6:
Usar agua caliente y jabón

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    Sumerge el objeto de vidrio y la pegatina en agua caliente jabonosa. Un buen remojo de entre 10 y 30 minutos ayudará a que resulte fácil retirarla con los dedos.
    • El agua y el jabón ayudan a disolver el pegamento y a romper su enlace con el vidrio.
    • Si no puedes remojar el objeto de vidrio en agua, empapa una toalla o esponja en agua caliente y moja toda el área de la pegatina.
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    Quita la pegatina. Usa los dedos para levantar cuidadosamente la pegatina o utiliza un cuchillo sin filo para rasparla y quitarla. Levanta suavemente una esquina de la misma y luego introduce el cuchillo entre la pegatina y el vidrio y haz una presión suave entre ambas superficies, hasta que hayas quitado la pegatina totalmente.
    • Asegúrate de escoger un cuchillo que no tenga filo al tacto. Este tipo de cuchillos han pasado por el uso y desgaste propios del tiempo, por lo que cuando los utilices sobre una superficie de vidrio no correrás el riesgo de rallar la superficie.
    • También puedes comprar un raspador que esté diseñado específicamente para quitar adhesivos de las superficies.

Método 2
Método 2 de 6:
Usar bicarbonato de sodio

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    Remoja el objeto de vidrio y la etiqueta en agua caliente jabonosa. Un remojo de entre 10 y 30 minutos seguramente ayudará a ablandar el papel o vinilo de la pegatina y hará que te resulte más fácil quitarla con los dedos.
    • El agua y el jabón ayudan a disolver el pegamento y a romper su enlace con el vidrio.
    • Si no puedes remojar el objeto de vidrio en agua, empapa una tela o esponja y moja el área de la pegatina.
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    Quita la pegatina. Usa los dedos para levantar cuidadosamente la pegatina o utiliza un cuchillo sin filo para rasparla y quitarla. Levanta suavemente una esquina de la misma y luego introduce el cuchillo entre la pegatina y el vidrio y haz una presión suave entre ambas superficies, hasta que hayas quitado la pegatina totalmente.
    • Asegúrate de escoger un cuchillo que no tenga filo al tacto. Este tipo de cuchillos han pasado por el uso y desgaste propios del tiempo, por lo que cuando los uses sobre una superficie de vidrio no correrás el riesgo de rallar la superficie.
    • También puedes comprar un raspador que esté diseñado específicamente para quitar adhesivos de las superficies.
    • En algunos casos, la pegatina podría despegarse sin problemas después de haber sido tratada con agua caliente jabonosa.
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    Mezcla cantidades iguales de bicarbonato de sodio y aceite de cocina.[1] El bicarbonato de sodio no es tóxico, es natural y seguro de utilizar cerca de las mascotas y los niños. Es un gran agente universal de limpieza que despega y disuelve el polvo y la grasa. Si le agregas aceite formarás una pasta que será fácil de aplicar sobre cualquier superficie.
    • Cualquier aceite de cocina funcionará. Puedes usar aceite de oliva, de canola o vegetal.
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    Protege las superficies cercanas que no quieras limpiar o que se puedan dañar. Cubre estas superficies con una tela o papel y fija la protección con cinta adhesiva, a fin de aislarlas de las filtraciones de pasta.
    • Las superficies que querrás proteger incluyen al plástico, a las pintadas, a la madera y a la tela.
    • El bicarbonato de sodio es relativamente seguro así que si accidentalmente se filtra la pasta sobre una superficie protegida o tu piel, seguramente el daño será mínimo o inexistente si lo limpias de inmediato.
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    Frota la pasta de bicarbonato de sodio y aceite sobre la superficie de vidrio. Déjala actuar por algunos minutos para que el bicarbonato haga su magia.
    • En el caso de las pegatinas muy duras, deja actuar la pasta toda la noche.
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    Retira la pasta. El pegamento residual y el papel seguramente se habrán ablandado lo suficiente como para retirarlos con un trapo o con una esponja.
    • Otra opción es usar una tela o esponja abrasiva como la lana de acero a fin de frotar con más fuerza. Sin embargo, ten cuidado de no rallar la superficie de vidrio.

Método 3
Método 3 de 6:
Usar soda de lavar

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    Llena una cubeta o el fregadero con agua caliente y soda de lavar (también conocida como sosa o carbonato sódico). Añade entre media y una taza de soda de lavar, dependiendo de cuánta agua vayas a usar.[2] La soda de lavar y el agua caliente actúan como agente disolvente, derritiendo el pegamento de la pegatina para romper su enlace con la superficie de vidrio.
    • Siempre usa guantes cuando trabajes con soda de lavar, ya que puede ser irritante para la piel. La soda de lavar se combina mejor con agua alcalina o con agua con muchos minerales disueltos en ella, a fin de crear una espuma más abrasiva que la del bicarbonato de sodio o el detergente común y limpia mejor las superficies y la ropa.[3]
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    Remoja el objeto por 30 minutos. Puedes remojarlo por más tiempo o, en el caso de pegatinas muy difíciles, toda la noche.
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    Saca el objeto del agua. Dado que la soda de lavar es un alcalino mucho más fuerte que el bicarbonato de sodio, la pegatina debería deslizarse fuera de la superficie del vidrio o ser mucho más sencilla de despegar.
    • Recuerda enjuagar muy bien el objeto después de haberlo remojado en soda de lavar, especialmente si es utilizado para consumir alimentos, por ejemplo una jarra o taza de vidrio.

Método 4
Método 4 de 6:
Usar calor

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    Calienta la superficie de vidrio. Utiliza una secadora de cabello a su máxima temperatura y seca la pegatina por entre 1 y 2 minutos. También puedes poner el objeto al sol por un par de horas. El calor derretirá el adhesivo, pero la pegatina debe quitarse rápidamente, antes de que el pegamento se enfríe y se vuelva a endurecer.
    • Si quieres quitar una pegatina de una ventana del coche, estaciónalo en un lugar muy soleado por 2 o 3 horas.
    • Calienta un artículo de vidrio o plástico con agua caliente. Espera alrededor de 15 segundos. Si la etiqueta está en una superficie plana (como una tapa), aplica el agua caliente en el lado opuesto de la etiqueta mientras la pelas.
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    Quita la pegatina. Usa los dedos para levantar cuidadosamente la pegatina. Ten cuidado, la superficie estará extremadamente caliente. También puedes usar un cuchillo sin filo para quitar la pegatina. Levanta suavemente una esquina de la misma y luego introduce el cuchillo entre la pegatina y el vidrio y haz una presión suave entre ambas superficies, hasta que hayas quitado la pegatina totalmente.
    • Asegúrate de escoger un cuchillo que no tenga filo al tacto. Este tipo de cuchillos han pasado por el uso y desgaste propios del tiempo, por lo que cuando los uses sobre una superficie de vidrio no correrás el riesgo de rallar la superficie.
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    Usa jabón, aceite o cualquier agente para remover el pegamento. En el caso de las pegatinas difíciles podrían quedar algunos residuos pegajosos y tal vez sean necesarios algunos pasos extras.

Método 5
Método 5 de 6:
Usar alcohol isopropílico

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    Pon un poco de alcohol isopropílico en una toalla o servilleta de papel, bola de algodón, hisopo o tela. Este método es especialmente útil si no puedes remojar el objeto de vidrio en una cubeta de agua. También es relativamente limpio.
    • Ten presente que el alcohol isopropílico es inflamable, así que utilízalo en un lugar seguro. No lo uses sobre una estufa o área caliente y asegúrate de que el lugar esté bien ventilado.[4]
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    Frota la pegatina con alcohol. La pegatina debería despegarse, pero es probable que tengas que repetir estos pasos hasta que logres quitarla totalmente.
    • El alcohol isopropílico es un solvente o agente de limpieza que disuelve otras sustancias tales como el pegamento de las pegatinas. Se seca casi de inmediato, así que se puede utilizar para limpiar objetos eléctricos sin el riesgo de dañarlos con agua.
    • Intenta sostener el trapo o toalla de papel mojado con alcohol sobre la superficie de vidrio a fin de mojar la pegatina.

Método 6
Método 6 de 6:
Usar WD-40

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    Protégete a ti mismo y a las superficies que podrían resultar dañadas. El WD-40 es un ablandador poderoso que disuelve los pegamentos, pero también es una solución química poderosa. Asegúrate de que no entre en contacto con tu piel, con telas o con la superficie del vidrio.
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    Rocía una capa pareja de WD-40 sobre la pegatina. A fin de evitar que tenga contacto con el vidrio, tal vez quieras rociar el producto sobre una tela limpia y frotarlo sobre la pegatina.
    • Asegúrate de proteger tus manos con guantes.
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    Frota y quita la pegatina con un trapo limpio. La pegatina o calcomanía debería despegarse frotando un poco. Si esta es particularmente difícil de despegar, tal vez tengas que usar un raspador de navaja o cuchillo sin filo para quitarla.

Consejos

  • Hay muchos productos en el mercado que se especializan en remover el pegamento de las pegatinas. Lee las etiquetas y las instrucciones cuidadosamente.
  • También puedes usar quitaesmalte con glicerina aplicado en un pedazo de algodón.

Advertencias

  • Ten cuidado con el solvente, porque a menudo desfigurará el plástico, la tela u otras superficies delicadas.
  • Si usas una secadora de pelo o pistola de calor, ten cuidado de no rajar el vidrio.
  • Lo mejor que puedes hacer es conseguir una cuchilla de acero inoxidable, ya que esta no rallará la superficie.
  • Ten cuidado de no rallar la superficie de vidrio. Aplica una presión leve cuando utilices raspadores, cuchillos y tarjetas de crédito.
  • Lávate bien las manos después de usar cualquier solvente.

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