Las trampas pegajosas son un tipo de trampas para roedores que algunas personas usan para atrapar ratones, ratas y otros animales. La trampa es una lámina cubierta con un adhesivo muy pegajoso. Además, este tipo de trampa puede ser peligrosa para las mascotas, los niños, la fauna silvestre y todas las criaturas que se topen con ella. Si los animales atrapados en una trampa pegajosa no son rescatados, tendrán una muerte larga y dolorosa debido al cansancio, el hambre, la deshidratación, las heridas o la exposición.[1] Afortunadamente, si encuentras un ratón u otro animal capturado en una trampa pegajosa, podrás liberarlo fácilmente usando aceite vegetal para aflojar el pegamento.

Parte 1
Parte 1 de 3:
Sacar al ratón de la trampa sin hacerle daño

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    Protégete con guantes. Los roedores pueden portar enfermedades peligrosas y transmitirlas a los humanos. Por lo tanto, es importante que uses guantes gruesos para protegerte de las mordidas, los rasguños y la contaminación.[2]
    • Entre los guantes adecuados para este trabajo se encuentran los guantes de trabajo, los guantes de jardinería diseñados para las rosas o los guantes gruesos de cuero resistentes.
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    Coloca al ratón dentro de un recipiente. Recoge la trampa con el ratón dentro y trasládalo a un recipiente de plástico transparente o una caja. Las dimensiones de la superficie del recipiente deben ser un poco más grandes que la trampa pegajosa y debe tener al menos 10 cm (4 pulgadas) de profundidad.
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    Cubre el ratón con una toalla. Usa un trapo viejo o una toalla que no te importe desechar posteriormente. Extiende el paño cuidadosamente sobre la cabeza del ratón para mantenerlo calmado.[3] Luego, coloca una mano sobre él cerca de los hombros y sostenlo delicadamente en su lugar mientras trabajes.
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    Vierte aceite vegetal sobre la trampa. Concentra el aceite alrededor de la zona en la que el ratón esté pegado. Usa tan poco aceite como puedas y evita que caiga directamente sobre el ratón tanto como sea posible. Usa un hisopo de algodón o un paño para masajear el aceite dentro del pegamento.
    • Puedes usar aceite en aerosol o aceite para bebés como último recurso, aunque el aceite vegetal líquido es ideal para este trabajo.[4]
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    Libera al ratón. Continúa masajeando la zona alrededor del ratón durante unos cuantos minutos. Con el tiempo, el pegamento comenzará a aflojarse y el ratón podrá liberarse de la trampa por sí solo. Tan pronto como el ratón se libere, retira la trampa del recipiente.
    • Deshazte de la trampa en una bolsa de plástico y séllala antes de transferirla a un tacho de basura.
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    Limpia el exceso de aceite con un paño. Remoja un trapo viejo o una tela con agua tibia y exprime el exceso. Luego, usa el paño para quitar cualquier exceso de aceite que podría quedar en las patas, la cabeza o el cuerpo del ratón.
    • El aceite evitará que el ratón regule su temperatura corporal, así que es importante que quites tanto como sea posible.[5]
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    Dale al ratón tiempo para descansar. Coloca un tazón pequeño de agua fresca dentro del recipiente en el que se encuentre el ratón. Luego, pon una toalla grande sobre él para hacer que el interior de la caja sea oscuro, cálido y tranquilo. Deja que el ratón descanse y se relaje al menos durante una hora.[6]
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    Llama a un rehabilitador de vida silvestre o a un veterinario. Siempre que sea posible, debes llevar al ratón a un especialista para que lo cuide. Si no puedes llevarlo a un rehabilitador de vida silvestre o a un veterinario, pregúntale al especialista sobre lo que puedas hacer con respecto a:
    • darle tratamiento al ratón para quitarle el aceite;
    • cuidarlo;
    • devolverlo a la naturaleza.
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Parte 2
Parte 2 de 3:
Liberar el ratón en la naturaleza

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    Escoge un lugar cercano. Si no puedes llevar al ratón a un especialista en animales, puedes buscar un lugar en la naturaleza para liberarlo. Cada vez que atrapes un ratón salvaje cerca de tu casa, siempre debes liberarlo dentro de 90 metros (100 yardas) del lugar en el que lo encuentres.[7]
    • Si lo liberas cerca, te asegurarás de que esté en territorio familiar y pueda encontrar alimento, agua y refugio.
    • Los lugares adecuados para liberarlo son cerca de los parques, los bosques, los campos o los espacios verdes.
    • En invierno, considera dejar al ratón en tu cobertizo o cochera hasta que el clima sea más adecuado.
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    Lleva al ratón a un lugar que hayas escogido. Con la toalla cubriendo el recipiente, lleva al ratón hacia un lugar en el que hayas decidido liberarlo caminando o en auto. Evita empujar el recipiente tanto como puedas, ya que podrías ocasionarle estrés y pánico al ratón.
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    Libera al ratón. Coloca el recipiente sobre el suelo (cerca de algunos arbustos, troncos, césped espeso u otra cubierta) de manera que el ratón pueda encontrar un lugar seguro rápidamente. Retira la toalla, gira cuidadosamente la caja a un lado y da varios pasos hacia atrás. Cuando el ratón se sienta seguro, dejará el recipiente y buscará refugio.
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    Desinfecta las herramientas. Desecha las toallas y las prendas de vestir que hayas utilizado para tratar al ratón, o lávalas en una carga separada dentro de una lavadora con los guantes. Usa un ciclo de agua caliente y añade lejía para desinfectar todo. Utiliza un desinfectante en aerosol para limpiar el recipiente o arroja la caja a la basura.
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    Lávate las manos. Abre el grifo del fregadero y enjuágate las manos con el chorro de agua. Aplícate jabón y forma espuma con tus manos durante al menos 20 segundos. Asegúrate de limpiarte debajo de las uñas, la parte trasera de tus manos y entre tus dedos. Enjuágate las manos con agua. Luego, sécatelas con una toalla limpia.[8]
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Parte 3
Parte 3 de 3:
Mantener a los ratones fuera de tu casa

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    Sella los puntos de entrada a tu casa. Los ratones pueden escabullirse a través de aberturas tan pequeñas como una moneda de diez centavos. Camina alrededor de tu casa y presta atención a cualquier grieta, agujero, conducto de ventilación u otro punto de acceso que pudiera haber. Séllalos con metal o cemento para evitar que los ratones y otros roedores entren.[9]
    • Además, es recomendable que coloques mallas alrededor de las chimeneas, uses burletes impermeables sobre las puertas, y repares todos los agujeros de todas las mallas de las ventanas.
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    Elimina los refugios y los escondites. Los ratones y otros roedores con frecuencia se esconden o hacen sus casas en pilas de leña, arbustos y otros objetos almacenados cerca de la casa. Mantén los arbustos y el césped largo recortado, corta las ramas que sobresalgan por encima del techo y guarda la leña, las parrillas, los muebles de patio y otros artículos al menos a 6 metros (20 pies) fuera de la casa.[10]
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    Retira las fuentes de alimento y agua. Los ratones comen todo tipo de cosas, entre las que se incluyen las sobras, la basura, las migajas, el alimento para mascotas, las semillas, las frutas, etc. Para asegurarte de que los ratones no encuentren una fuente de comida dentro o alrededor de la casa, existen varios pasos que puedes seguir como los sigueintes:[11]
    • Guarda alimento en recipientes de vidrio herméticos.
    • Limpia los pisos, las encimeras y las despensas con frecuencia.
    • Guarda alimento para mascotas y basura en recipientes a prueba de roedores.
    • Limpia la comida derramada de los pájaros.
    • Recoge las frutas y los vegetales frescos inmediatamente.
    • Trata los problemas de goteras y humedad, y otras fuentes de agua fresca
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Advertencias

  • Nunca retires a un animal de una trampa pegajosa sin antes aflojar el pegamento de manera apropiada. El pegamento puede arrancar el pelo y la piel del animal y causarle una herida grave.
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Acerca de este wikiHow

Chris Parker
Coescrito por:
Fundador de Parker Eco Pest Control
Este artículo fue coescrito por Chris Parker. Chris Parker es el fundador de Parker Eco Pest Control, un servicio de control de plagas sostenible con sede en Seattle. Es un aplicador comercial de pesticidas certificado en el estado de Washington y recibió su licenciatura en la Universidad de Washington en 2012. Este artículo ha sido visto 75 744 veces.
Categorías: Control de roedores
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