Los nebulizadores o bombas para pulgas emiten un flujo continuo de pesticidas que están diseñados para tratar un área grande de una sola vez. Cuando se usa de manera adecuada, el nebulizador es un método efectivo de combatir una plaga de pulgas. Además de ser letales para estos insectos, los químicos que contiene este insecticida también pueden ser peligrosos para las mascotas y los humanos. Es importante fumigar toda tu casa y no solo una habitación pues las pulgas pueden ser muy invasivas. Asimismo, cuando se utiliza un nebulizador, se debe tratar a las mascotas por separado a fin de evitar que vuelva a aparecer una plaga. Debes tomar las precauciones necesarias para garantizar la seguridad de todos los miembros de tu hogar durante el proceso de fumigación.

Parte 1
Parte 1 de 3:
Prepara la casa

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    Calcula cuántos metros cuadrados tiene el área que vas a tratar. Los nebulizadores para pulgas vienen en diferentes tamaños de acuerdo a la marca y a los químicos que contienen. En general, necesitarás uno por cada habitación que vayas a fumigar. Sin embargo en algunos casos utilizar un nebulizador en un pasadizo al que dan las puertas de varias habitaciones podría tratarlas todas. Lee el envase con detenimiento para determinar el tamaño del área que puede fumigar el producto.[1]
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    Compra un nebulizador para pulgas de una buena marca. Pídele al veterinario que te recomiende algún producto. Verifica con las opiniones de tus amigos y familiares sobre la efectividad de algún nebulizador que hayan utilizado o busca evaluaciones o revisiones en Internet. Pídeles información a los vendedores de la tienda de mejoras para el hogar o la ferretería de tu área sobre los nebulizadores, pero siempre confronta lo que te digan con tu propia investigación.
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    Lee todas las instrucciones del empaque. La mayoría de los nebulizadores funcionan de manera similar. Asegúrate de leer todas las instrucciones con cuidado antes de activarlo en tu casa.
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    Planifica un momento en que ninguno de los miembros de tu hogar, “incluidas” tus mascotas, estén en casa por varias horas. Los químicos que contienen los nebulizadores son venenos que pueden provocar fácilmente enfermedades en las personas y mascotas. Lee el envase del nebulizador que tienes para estar seguro de que tu familia esté a salvo y se quede fuera de casa por el tiempo recomendado.
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    Abre puertas y cajones. Abre todas las puertas de las habitaciones infestadas para que los químicos del nebulizador puedan matar a las pulgas. Abre las puertas y los cajones de los gabinetes para eliminar las que estén adentro de los muebles.
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    Retira los utensilios para comer, los alimentos, los electrodomésticos pequeños y la vajilla. Sácalos de los gabinetes con puertas o cajones abiertos para que no les llegue el aerosol. Protegerlos de los químicos es mucho más fácil que limpiarlos una vez que el nebulizador se haya terminado.
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    Cubre las mesas, las encimeras, los muebles especiales y los aparatos electrónicos. Los químicos de los nebulizadores pueden manchar muebles, mesas y encimeras, o lastimar aparatos. Cúbrelos con sábanas o plástico para que no se lastimen.[2]
    • Podrás encontrar sábanas viejas en una tienda de segunda mano y el plástico en una ferretería o tienda de artículos para autos.
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    Cierra o mueve tu pecera. Los químicos que están presentes en los nebulizadores para pulgas son peligrosos para los peces. Si no puedes trasladar tu pecera a otro lugar, cúbrela y ciérrala bien con plástico.
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    Apaga las luces y otros aparatos eléctricos. Los químicos y propulsores de los nebulizadores pueden ser inflamables. Por lo tanto, apaga la calefacción o el aire acondicionado y la luz piloto. Corta la electricidad de todos los ventiladores.
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    Antes de iniciar la fumigación, cierra todas las ventanas. Para asegurarte de que los químicos del nebulizador no se filtren al exterior de la casa y, así, sean más efectivos, cierra todas las aberturas antes de iniciar el proceso.
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Parte 2
Parte 2 de 3:
Fumiga la casa

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    Aspira y limpia tu casa justo antes del proceso de fumigación. Las vibraciones de la aspiradora provocará que las larvas de las pulgas surjan, lo que hará que el nebulizador tenga el mejor efecto posible.[3]
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    Retira toda la ropa sucia de la casa. Los huevos y larvas de las pulgas podrían encontrar un refugio en la ropa sucia amontonada. Asegúrate de lavar toda tu ropa o guárdala en una bolsa y llévala a una lavandería mientras fumigas tu casa.[4]
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    Coloca todos los nebulizadores para pulgas sobre papel periódico o bolsas de plástico al centro de las habitaciones que vas a fumigar. Colocar una cubierta protectora debajo de los nebulizadores evitará que los residuos del producto manchen el piso que está a su alrededor.
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    Asegúrate de que todos los nebulizadores estén en su lugar antes de activar los nebulizadores. Una vez que estén activados, debes salir de la casa de inmediato para evitar enfermedades a causa de la exposición a los pesticidas.
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    Activa los nebulizadores para pulgas y sal de la casa. Sigue las direcciones del empaque para la activación. Si vas a iniciar varios, comienza con los que estén en las habitaciones más lejanas de la entrada y ve activándolos en dirección a la salida. Una vez que hayas activado un nebulizador, no vuelvas a ingresar en la habitación.
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    Quédate fuera de casa. Para evitar una exposición innecesaria a los químicos de los nebulizadores para pulgas, haz que todas las mascotas y personas estén fuera de casa entre 2 y 4 horas. Lee el envase con cuidado para saber el espacio de tiempo recomendado en el que deben permanecer fuera de casa.
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    Trata las pulgas de tus mascotas. Mientras estés fuera de tu casa, es importante quitarles las pulgas a tus mascotas para que no las traigan de vuelta apenas regresen.
    • Pregúntale al veterinario sobre las pastillas que contienen nitenpyram[5] para matar a las pulgas adultas que podría tener tu mascota.
    • Dale un baño con un champú antipulgas.
    • Lleva a tu mascota a un profesional de baño para que le haga un tratamiento o un baño antipulgas.
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Parte 3
Parte 3 de 3:
Mantén un hogar libre de pulgas

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    Limpia tu casa cuando regreses. Normalmente encontrarás pulgas muertas, residuos químicos y capas de polvo después de una fumigación con nebulizadores. Aspira y trapea bien los pisos, limpia las mesas y encimeras, lava las sábanas y la ropa, y enjuaga todas las superficies.
    • Se recomienda que utilices guantes al limpiar y que los deseches después para evitar que tu piel recoja los restos de los químicos.
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    Abre las ventanas para ventilar la casa y disminuir los olores. Es posible que el olor de los pesticidas permanezca por varias horas o días después de la fumigación. Abre las ventanas y enciende los ventiladores de techo o de pie que podrías tener para eliminar los olores de los nebulizadores de tu casa.[6]
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    Pasa la aspiradora todos los días por 10 a 14 días. Hacerlo a diario retirará cualquier pulga adulta que recién haya salido de su huevo y que podría haber sobrevivido a la fumigación.[7]
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    Debes estar preparado para realizar varios tratamientos. Algunos productos no son efectivos para matar los huevos de las pulgas. Los huevos y larvas podrían eclosionar o aparecer días o semanas después del primer tratamiento. Supervisa tu casa y tus mascotas por varias semanas después de la fumigación inicial para identificar señales de pulgas.[8]
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    Observa a tu mascota para ver si muestra señales de estar infectado otra vez. Las deposiciones de las pulgas se ven como unos puntos marrones rojizos en tu mascota. Si se está rascando, utiliza un peine antipulgas para revisar su pelaje y ver si hay señales de deposiciones o pulgas adultas.[9]
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Consejos

  • Pídele medicamentos antipulgas al veterinario, quien también podrá asesorarte con respecto a cualquier tema que te preocupe.
  • Asea a tus mascotas con regularidad (desecha su pelo en bolsas cerradas en el tacho de afuera para atrapar a las pulgas y a sus huevos). Es posible que el nebulizador de pulgas haya reducido el número de estos insectos en tu casa, pero tu mascota podría volver a infestarla si no recibe el tratamiento adecuado de manera continua y constante.
  • Los productos alimentarios como los enlatados o los recipientes de condimentos bien cerrados no tienen que desecharse después de la fumigación. No obstante, se recomienda lavar la parte exterior de los recipientes después de utilizar un nebulizador para pulgas en casa.
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Advertencias

  • Cualquier fruta o verdura expuesta a los pesticidas tendrá que desecharse y no se podrá consumir.
  • Los nebulizadores para pulgas contienen neurotoxinas. No se deben utilizar siempre ni deben tomarse a la ligera como una solución para una plaga de pulgas. Es mucho mejor tratar a tus mascotas con regularidad, aspirar con frecuencia y, en general, enfrentarlas en el momento en que tengas señales de que están presentes.
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Cosas que necesitarás

  • Un nebulizador o una bomba para pulgas
  • Sábanas o plástico
  • Una aspiradora
  • Un trapeador y un cubo
  • Jabón
  • Agua
  • Una lavadora y una secadora

Acerca de este wikiHow

Kevin Carrillo
Coescrito por:
Especialista en control de plagas
Este artículo fue coescrito por Kevin Carrillo. Kevin Carrillo es especialista en control de plagas y es el gerente de proyectos de MMPC, un servicio de control de plagas y una empresa comercial certificada propiedad de minorías (MBE, por sus siglas en inglés) con sede en el área de la ciudad de Nueva York. MMPC está certificado por los códigos y prácticas líderes de la industria, incluyendo la Asociación Nacional de Manejo de Plagas (NPMA, por sus siglas en inglés), QualityPro, GreenPro y la Asociación de Manejo de Plagas de Nueva York (NYPMA, por sus siglas en inglés). El trabajo de MMPC ha aparecido en CNN, NPR y ABC News. Este artículo ha sido visto 43 973 veces.
Categorías: Control de pulgas
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