Las pistolas de calafateo se utilizan para rellenar las grietas pequeñas. Suelen usarse alrededor de las ventanas, las bañeras o las puertas. La pistola consta de dos partes: el armazón y el tubo de calafateo que se carga en el armazón. Una vez que sepas cómo cargar el tubo en el armazón, estarás listo para usar la pistola en un abrir y cerrar de ojos.

Parte 1
Parte 1 de 3:
Limpiar y enmascarar el área

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    Elimina toda la masilla vieja con una espátula. Antes de aplicarle masilla nueva a una grieta, deberás eliminar cualquier residuo de masilla que se haya aplicado antes. Al eliminar la masilla vieja, que puede estar agrietada, evitarás crear una nueva capa sobre una base debilitada. Además, de esta forma podrás determinar con más precisión cuánta masilla necesitas para calafatear.[1]
    • Coloca la punta afilada de la espátula en la base de la masilla vieja. Luego, empújala hacia adelante tomándola desde el mango. Continúa empujando hacia adelante hasta que saques toda la masilla.
    • Si no tienes una espátula, puedes usar en su lugar un cepillo de alambre. Cepilla con firmeza para que las cerdas de alambre abrasivas raspen y eliminen toda la masilla vieja. Hazlo con paciencia, frotando sobre la masilla durante varios minutos.
    • Si la masilla es de silicona, despega un borde y luego arranca la tira completa con unas pinzas de punta.
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    Lava el área de la grieta con alcohol, desinfectante y agua caliente. Llena un cubo con agua caliente. Usa un trapo para lavar la grieta con alcohol y desinfectante. Cualquier desinfectante doméstico funcionará bien. Luego, pasa otro trapo empapado en agua caliente sobre la grieta hasta que quede limpia. Después, sécala con un trapo.
    • La masilla sellará cualquier cosa en la grieta, así que debes asegurarte de eliminar todo el sucio.
    • Si queda algo de masilla vieja o restos de sucio, usa una espátula de plástico para sacarlo.
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    Usa cinta de pintor alrededor de la grieta para tener más precisión. Consigue un rollo de cinta de pintor y pega una tira larga por encima de la grieta y otra por debajo. Esta cinta protegerá cualquier cosa que no quieras que entre en contacto con la masilla de calafateo. También actuará como un seguro en caso de que cometas algún error durante la aplicación.[2]
    • Usar cinta de pintor hará que el proceso de calafateo sea más preciso. También significa que podrás lograr que el calafateo sea estéticamente agradable.
    • Deberás retirar rápidamente la cinta después de aplicar una masilla de silicona, ya que esta puede dejarla atrapada.

Parte 2
Parte 2 de 3:
Cargar la pistola de calafateo

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    Presiona la palanca de liberación en la parte posterior de la pistola de calafateo. Hay una palanca pequeña en la parte posterior de la pistola. Presiónala con el pulgar. Esto liberará la varilla larga de acero que recorre el armazón entero. Con la otra mano, jala esta varilla lo más atrás que puedas y sujétala.
    • Si es necesario, pídele a un amigo o a un familiar que te ayude a mantener la varilla en su sitio mientras trabajas en la inserción del tubo de calafateo.
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    Inserta el tubo de calafateo con la boquilla orientada hacia afuera. Mantén la varilla de acero hacia atrás y carga el tubo de calafateo en el armazón. Asegúrate de que el lado de la boquilla esté orientado en el sentido contrario al tuyo. Inserta primero el extremo plano del tubo en la parte posterior de la pistola. Cuando el extremo trasero se asiente en la parte trasera de la pistola, baja la punta delantera del tubo. Asegúrate de que el tubo quede bien ajustado y nivelado.
    • Algunas pistolas de calafateo tienen una varilla perforadora y un cortador de puntas en el armazón. Úsalos antes de insertar el tubo en la pistola.
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    Perfora el tubo con la varilla de metal. Una vez que el tubo de calafateo esté bien colocado dentro del armazón de la pistola, empuja la parte trasera de la varilla de metal dentro del tubo de calafateo. Asegúrate de que el gancho se hunda profundamente en la parte posterior. Este gancho mantendrá el tubo en su lugar. También ayudará a que el gatillo en la parte inferior de la pistola funcione.[3]
    • Si tienes dudas en algún momento del proceso, consulta las instrucciones que vienen con el tubo de calafateo. Las instrucciones te indicarán el método preciso necesario para ese tubo en particular.
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    Usa unas tijeras para cortar la punta de la boquilla en un ángulo de 45 grados para ajustar el grosor de la masilla. El tubo de calafateo vendrá con una boquilla larga sellada en la parte delantera. Corta esta boquilla en un punto que sea acorde al ancho que quieras que salga la masilla. Si la grieta es grande, considera cortar la boquilla cerca del tubo. Si la grieta es más pequeña, córtala cerca de la punta, para que tengas más precisión.[4]
    • Esta elección será permanente, así que piensa cuidadosamente en el grosor antes de hacer el corte. Sin embargo, es mejor cortar la boquilla cerca de la punta para que salga menos masilla. Siempre podrás cortarla de nuevo si la masilla es demasiado fina.

Parte 3
Parte 3 de 3:
Aplicar la masilla de calafateo

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    Aprieta el gatillo y pasa la pistola sobre un trozo de papel para practicar. Sostén la pistola en un ángulo de 45 grados con la boquilla hacia abajo. Luego, presiona el gatillo de la parte inferior mientras la mueves en una sola dirección. La masilla debe salir en un flujo constante.[5]
    • Si mueves la pistola demasiado rápido, la masilla quedará demasiado fina y desigual. Si la mueves muy lento, la masilla quedará muy grumosa e inmanejable. Encuentra un equilibrio entre los dos movimientos.
    • No te preocupes si presionas el gatillo y no sale la masilla. Deja de presionar el gatillo y empieza de nuevo.
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    Sostén la pistola de calafateo a 45 grados de la grieta. Sostén la pistola de calafateo con las dos manos. Coloca una mano junto al gatillo y usa la otra para sostener la punta del tubo de calafateo, para ayudarte a apuntar. Mantén la pistola inclinada a 45 grados. De esta forma, la masilla deberá empezar a fluir hacia la boquilla.[6]
    • Aunque el gatillo empujará parte de la masilla fuera del tubo, al sostener la pistola a 45 grados, estarás usando la gravedad para ayudar en el proceso.
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    Presiona el gatillo para empujar la masilla hacia la boquilla. Una vez que presiones el gatillo, la varilla de acero empujará la masilla hacia fuera de la boquilla. Presiona el gatillo con firmeza y de manera constante. La masilla deberá comenzar a salir del tubo lenta y controladamente.
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    Pasa la pistola de calafateo sobre toda la grieta. Cuando la masilla salga por la boquilla, pasa la pistola de calafateo por la grieta que quieres rellenar. La masilla saldrá de la pistola y entrará en la grieta donde se solidificará con rapidez. Trata de hacer un movimiento único y constante para que la masilla llene la grieta de manera uniforme.[7]
    • No hay problema si se te pasa algún lugar. Podrás rellenar los puntos faltantes con una segunda pasada. No hay obligación de rellenar la grieta en el primer intento.
    • Si usaste la cinta de pintor, no te preocupes si la masilla queda sobre esta. Podrás despegar la cinta cuando termines.[8] Si no usaste la cinta de pintor, usa una espátula y un cepillo de alambre para corregir cualquier error.
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    Alisa la masilla con una cuchara de metal calentada si quieres una línea más lisa. Calienta una cuchara metálica pequeña en agua caliente durante 30 segundos. Luego, desliza el borde curvo de la cuchara sobre la masilla para alisarla. Esto hará que la línea de masilla quede más estética. Usa la cuchara caliente para darle una forma más trabajada.[9]
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    Retira la cinta de pintor y deja que la masilla se seque. Retira toda la cinta de pintor y deja que la masilla se seque, sin tocarla. Cada tubo de calafateo indicará el tiempo preciso de espera para un secado completo. Generalmente, la masilla tardará al menos 24 horas en solidificarse del todo.[10]

Consejos

  • La velocidad del movimiento de la pistola al apretar el gatillo determinará la cantidad de masilla que se aplicará; cuanto más rápido aprietes el gatillo, mayor será la cantidad de masilla liberada.
  • Puedes esparcir la masilla con el dedo si aplicas demasiada en un mismo lugar.
  • Algunas masillas pueden ser más adecuadas que otras dependiendo del problema en específico. La masilla acrílica es una opción versátil y popular para el calafateo. Sin embargo, las masillas acrílicas baratas pueden encogerse al secarse. La masilla de silicona es muy buena para unir, pero puede ser costosa y es difícil de pintar sobre ella. La masilla de goma butílica es muy flexible, así que úsala alrededor de las bisagras o puertas en las que la masilla se moverá a menudo.[11]
  • Presiona la palanca de liberación después de aplicar la masilla para evitar derrames.
  • Utiliza un trapo húmedo para alisar cualquier línea de masilla y empujarla más adentro de las grietas.

Cosas que necesitarás

  • espátula
  • cinta de pintor
  • alcohol isopropílico
  • desinfectante
  • agua caliente
  • tubo de calafateo
  • pistola de calafateo
  • tijeras
  • pedazo de papel
  • cuchara metálica

Acerca de este wikiHow

Ryaan Tuttle
Coescrito por:
Especialista en mejoras para el hogar
Este artículo fue coescrito por Ryaan Tuttle. Ryaan Tuttle es especialista en mejoras para el hogar y presidente ejecutivo de Best Handyman Boston. Con más de 15 años de experiencia, Ryaan se especializa en mejoras para el hogar y mantenimiento de propiedades aprovechando la tecnología y la artesanía. Tiene licencias de supervisor de construcción y de contratista de mejoras para el hogar. A diferencia de la mayoría de los contratistas de mantenimiento, Best Handyman Boston tiene licencia y está asegurado. Boston Magazine y LocalBest.com lo nombraron como el Best Handyman de Boston. Este artículo ha sido visto 18 324 veces.