Anexo:Edificios más altos del área metropolitana de Barcelona

Esta es una lista de los edificios más altos del área metropolitana de Barcelona. A fecha de 2022, el área metropolitana de Barcelona tiene dos edificios de más de 150 metros de altura, dieciséis de más de 100 metros y ochenta y tres de más de 70 metros. Los dos edificios más altos de Barcelona son el Hotel Arts y la Torre Mapfre, ambos con 154 metros de altura y completados en 1992. Barcelona es la ciudad con más rascacielos de Cataluña y la tercera ciudad con más edificios de más de 100 metros de España, por detrás de Benidorm y Madrid, que tienen veintiséis y diecisiete, respectivamente. Aunque se encuentran muy dispersos, hay algunas zonas con grandes concentraciones de edificios altos como Diagonal Mar, el Distrito 22@ o la plaza de Europa, esta última en el municipio de Hospitalet de Llobregat.[1][2]

El Hotel Arts y la Torre Mapfre, los dos edificios más altos de Barcelona.

Skyline de Barcelona desde la Sagrada Familia.

Las torres de la plaza de Europa de Hospitalet de Llobregat.

Los tres edificios más altos de Sabadell, en la avenida de Francesc Macià.

El primer rascacielos de Barcelona fue el Edificio Fàbregas, situado en uno de los vértices de la plaza de Urquinaona, con dieciocho plantas y unos 67 metros de altura.[3] Diseñado por Luis Gutiérrez Soto, su construcción se inició en 1936, pero el estallido de la guerra civil española paralizó las obras y estas no se concluyeron hasta 1944, convirtiéndose en un icono arquitectónico de la Barcelona de la posguerra. Su fachada, que se asemeja a un gran barco, sigue las formas más modernas de la Europa de aquella época, inspiradas en la estética maquinista y el art déco.[4][5]

Poco después se completó el Edificio Generali en el paseo de Gracia, destinado a ser la nueva sede del Banco Vitalicio. Aunque sus planos datan de 1935, de nuevo la guerra civil retrasó su construcción y finalmente fue erigido entre 1946 y 1949. Diseñado por Lluís Bonet i Garí, tiene diecisiete pisos y 75 metros de altura y su estilo está influenciado por la Escuela de Chicago.[6][7]

La época comprendida entre 1957 y 1973, durante el mandato como alcalde de José María de Porcioles, se caracterizó por un fuerte desarrollismo urbano y por la especulación inmobiliaria. Durante esos años, en los que la ciudad creció a un ritmo muy intenso, destacó la masiva construcción de bloques de pisos y las «remontas» en edificios históricos del Ensanche.[8][9] En 1970 se completó el primer edificio de más de 100 metros de la ciudad, el Edificio Colón.[10]

La primera oleada de construcción de rascacielos se produjo con motivo de los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992. En esta época se construyeron, entre otros, la Torre Mapfre y el Hotel Arts, en la Villa Olímpica, que con sus 154 metros siguen siendo los más altos de la ciudad y se han convertido en uno de los emblemas de la remodelación urbanística iniciada en la década de 1990. El conjunto formado por las dos torres se completa con una monumental escultura, el Peix d'or («Pez de oro»), obra de Frank Gehry.[1]

La segunda oleada de construcción de rascacielos tuvo lugar a principios del siglo xxi, impulsada por el Fórum Universal de las Culturas de 2004.[1][2] En ese mismo año se completó la Torre Agbar (actual Torre Glòries), diseñada por Jean Nouvel, que desde entonces se ha convertido en el «icono moderno» de la ciudad.[11] Los edificios construidos en esta época se concentran en la zona de Diagonal Mar y en el Distrito 22@. Allí, el Ayuntamiento de Joan Clos decidió abrir la veda para alzar edificios en altura tras el éxito de las dos torres de la Villa Olímpica. La lucha entre ciudades por retener grandes grupos empresariales fue uno de los motivos de la proliferación de estos rascacielos. Sin embargo, la crisis económica detuvo la tendencia y, pasada esta, el interés de la ciudad por los edificios en altura disminuyó.[2]

Hospitalet de Llobregat, el segundo municipio más poblado del área metropolitana y adyacente a Barcelona por el suroeste, es también el segundo municipio con más rascacielos, con siete edificios de más de 100 metros y dieciséis de más de 70 metros. El edificio más alto de la localidad es el Hotel Porta Fira de Toyo Ito, con 113 metros. Aunque la gran mayoría de estos edificios se concentran en la plaza de Europa y se construyeron en el siglo xxi, la historia de los rascacielos de Hospitalet se remonta a la década de 1930 y al llamado Rascacielos de Collblanc, situado en la carretera de Collblanc. Diseñado por Ramón Puig, este edificio funcional de estilo racionalista con algunos detalles art déco fue inaugurado en 1933, y con sus 44.5 metros de altura y doce pisos se convirtió en el edificio residencial más alto de España.[12]

Además de Barcelona y Hospitalet, los otros municipios del área metropolitana con edificios de más de 70 metros de altura son Sabadell, con tres, el más alto de los cuales alcanza los 90 metros; Santa Coloma de Gramanet y San Adrián de Besós, estos dos últimos con un edificio cada uno.