Gastronomía de Ágreda

La gastronomía agredeña está influenciada por la vida pastoril de sus gentes en generaciones pasadas, abundando los platos de productos no perecederos como el bacalao, el congrio seco y los escabechados de piezas de caza (perdiz, conejo o pollo de corral). No en vano, en Ágreda hay una importante fábrica de elaboración del bacalao, Bacalao Dimar.[1][2]

También los platos colectivos cuentan con popularidad, el asado (cordero o cerdo), las migas, la fritada, las sopas de ajo, la caldereta con cordero, conejo o costillas de cerdo, entre otros.[1][2]

El cardo de Ágreda, de color blanco y rosáceo, es el vegetal más autóctono de la villa y habitual en las mesas de Ágreda. Su carácter invernal lo ha convertido en un plato típico en las temporadas navideñas de la localidad.[1]

En Ágreda destacan las pastas, tales como: madalenas, mantecadas, sobadillos, hojaldres, españoletas, y las rosquillas huecas. Si bien, el «langarto», una masa de pan rellena de chorizo, atún o sardina, es el producto panadero más autóctono.[1]

Siguiendo la tradición, el 3 de febrero y de mayo de cada año, los panaderos elaboran una hogaza que se rellena de tortilla de patata, acompañado de torreznos y chorizo. También el 1 de noviembre se elabora otro plato tradicional, el rosco o rollo.[1] Las de tortas de chichorra también son habituales en las panaderías.[2]

La bebida que se elabora de forma más tradicional es el pacharán, de origen navarro y como postre el chordón, tanto los endrinos (para la elaboración del pacharán), como el chordón son abundantes en el Moncayo).[2]

• Gastronomía de Ágreda, página del ayuntamiento
• Ágreda promociona su cardo rojo, en el diario abc.es, 7 de diciembre de 2009