Gobierno en la sombra
El gobierno en la sombra, también conocido como criptocracia, gobierno invisible o gobierno secreto (del inglés: shadow government, cryptocracy, secret government, invisible government) es una serie de teorías que apuntan a que el real y verdadero poder político no radica en los representantes políticos electos por la población, sino por personas con gran influencia y autoridad dentro de ciertos estamentos gubernamentales que ejercen poder entre bastidores, es decir, más allá del control de las instituciones democráticas. Según esta hipótesis, el funcionario gubernamental electo sería en realidad un subordinado del gobierno en la sombra, que son realmente el verdadero poder ejecutivo.
Algunos de los grupos propuestos por estas teorías y que constituirían el gobierno en la sombra serían los bancos centrales, francmasones, lobbies o grupos de presión, poderes fácticos, think tanks; así como sociedades secretas, intereses adinerados, élites globalistas y organizaciones supranacionales que pretenden manipular la política para su propio interés o para servir a una agenda más amplia que está oculta al público en general.
Hipótesis
Diversas teorías en el marco de la literatura de la teoría de la conspiración postulan la existencia de un supuesto gobierno en la sombra que sería el verdadero poder que mueve los hilos en el mundo tras el gobierno aparente. Este tipo de teorías han sido difundidas en diversos libros por escritores como Dan Smoot, William Guy Carr, Jim Marrs, Carroll Quigley, Gary Allen, Des Griffin, David Icke, Michael A. Hoffman II y John Coleman.
Algunos de estos escritores creen que los miembros del gobierno en la sombra podrían representar o formar parte de grupos como el Consejo de Relaciones Exteriores, la Comisión Trilateral, el Grupo Bilderberg, el Chatham House, el Foro Económico Mundial, el Marco Institucional de la Unión Europea, la ONU, la OTAN, la Organización Mundial de la Salud, en cooperación con los bancos internacionales y las instituciones financieras como el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional y el Banco de Pagos Internacionales, además de varias sociedades secretas como Skull and Bones y el Bohemian Club, entre otras más.[1][2][3]
Milton William Cooper aseguraba que el gobierno en la sombra coopera con ciertas razas extraterrestres. Su libro Behold A Pale Horse,[4][5] muy popular entre los "círculos de las milicias y los entusiastas del fenómeno Ovni",[6] habla de "las actividades del gobierno secreto mundial" y de "una diversidad de actividades encubiertas asociadas con una declaración de guerra impuesta por los Illuminati contra el pueblo de Estados Unidos ".[7] Cooper cree que los extraterrestres "manipulan y/o controlan a la raza humana a través de varias sociedades secretas, religiones, rituales de magia, brujería y ocultismo", y que, incluso sin saberlo, los Illuminati estaban siendo manipulados por ellos.[4]
Según William Cooper, los Illuminati no solamente inventaron hipotéticas amenazas extraterrestres para sacar de ello partido, como el proyecto Blue Beam, sino que conspiraron insidiosamente con ellos para dominar el mundo.
Grupos dentro del gobierno en la sombra
Hay diversas teorías que apuntan a que dentro del gobierno en la sombra existen una amplia diversidad de camarillas o grupos que están enfrentados entre sí y que cada uno de ellos vela por sus propios intereses. Aunque no siempre suele ser así, ya que si un grupo persigue un objetivo que es de interés común a otro grupo aunarán sus esfuerzos para conseguir el fin propuesto; pero en ciertas ocasiones también se ven implícitos conflictos de intereses entre ellos, dando lugar a situaciones engorrosas de deslealtad y traición.
COM-12 y Aquarius
En su libro, The Dulce Wars: Underground Alien Bases and the Battle for Planet Earth, el autor Branton dice que "una fuente de inteligencia afirma que la situación actual es el efecto visible de una guerra que está librándose en la comunidad de inteligencia de Estados Unidos entre un grupo centrado en la CIA llamado Aquarius, vinculado con una poderosa organización conocida como MJ-12, y otro grupo llamado COM-12, que opera dentro de la inteligencia naval. Se dice que COM-12 está tratando de sostener una acción de retaguardia con el fin de preservar el gobierno constitucional por medio de la cual están filtrando deliberadamente información que perjudica al grupo anterior".[8]
En los atentados del 11 de septiembre del 2001, lo que fue golpeado en el Pentágono fue la sede de la Inteligencia Naval[9] y la mayoría de las víctimas en el Pentágono correspondieron a ella.[9] Según una fuente del MI6, esto es parte de la guerra interna que está librándose entre Aquarius y COM-12 relacionada con la presencia extraterrestre en este planeta. Esta fuente dice que Aquarius está ocultando la verdad sobre la existencia de vida extraterrestre y está tratando de desacreditar el fenómeno OVNI a través de los medios de comunicación e industrias cinematográficas con el fin de confundir a la opinión pública. También hay un grupo positivo centrado en la inteligencia naval de Estados Unidos llamado COM-12, que está filtrando información fidedigna acerca de la existencia de vida extraterrestre en los medios, contrarrestando de ese modo la contrainteligencia de Aquarius.
La red capitalista y las compañías transnacionales que controlan la economía global
La idea de que un pequeño grupo de personas internacionales pero interconectadas puedan controlar el mundo de las finanzas y del comercio fue confirmado por un trío de teóricos de sistemas complejos del Instituto Federal Suizo de Tecnología en Zúrich.[10] Se efectuó un análisis de las relaciones existentes entre 43.000 corporaciones transnacionales e identificaron un grupo relativamente pequeño de empresas, principalmente bancos, con un poder desproporcionado sobre la economía global. Combinaron las matemáticas para elaborar modelos de sistemas naturales con datos corporativos integrales y así poder trazar una red de la propiedad entre las empresas transnacionales del mundo. En estudios anteriores determinaron que algunas empresas transnacionales poseen grandes cantidades de la economía global, pero incluyeron solo un número limitado de empresas y omitieron la propiedad indirecta, por lo que no pudieron decir cómo afecta esto a la economía mundial.[11]
Tomando como punto de referencia Orbis 2007[12], una base de datos que enumera las 37 millones de empresas e inversores de todo el mundo, extrajeron las 43.060 empresas transnacionales y las acciones que las vinculaban. A continuación construyeron un modelo de qué empresas controlaban a otras a través de redes de accionistas, junto con los ingresos operativos de cada empresa, para rastrear la estructura del poder económico. El estudio reveló un núcleo de 1.318 empresas con propiedades entrelazadas. Cada una de esas 1.318 tenía vínculos con dos o más empresas y, en promedio, estaban conectadas con 20. Además, aunque representaban el 20 % de los ingresos globales, las 1.318 empresas parecían poseer colectivamente a través de sus acciones la mayor parte de las empresas de fabricación más grandes y de mayor rendimiento financiero del mundo, la economía "real", que representan otro 60 % de los ingresos globales.
Cuando el equipo desenredó aún más la intrincada tela de propiedad, descubrieron que gran parte de ellas partían de una "superentidad" formada por 147 empresas aún más unidas. Toda su propiedad estaba en manos de otros miembros de la superentidad que controlaba el 40 % de la riqueza total de la red. Según uno de los autores del trabajo, James B. Glattfelder, menos del 1 % de las empresas pueden controlar el 40 % de toda la red. La mayoría de ellas son instituciones financieras y las 20 principales son Barclays Bank, JPMorgan Chase & Co y The Goldman Sachs Group.
John Driffill de la Universidad de Londres, experto en macroeconomía, dice que el valor del análisis no es solo ver si un pequeño número de personas controla la economía global, sino más bien los conocimientos que poseen sobre la estabilidad económica.
El equipo de Zúrich dice que la concentración de poder no es buena ni mala en sí misma, aunque las estrechas interconexiones del núcleo podrían serlo, y si una empresa sufre dificultades se propaga al resto de entidades.
Véase también
Referencias
- Chatham House (RIIA) and the CFR, its US sister organization, are the focus of Quigley's The Anglo-American Establishment.
- The CFR as a central institution of the secret government of the United States is the focus of James Perloff's book The Shadows of Power
- Jim Marrs cites all the institutions listed in this paragraph in his study Rule By Secrecy, published by Harper Collins.
- Michael Barkun (4 de mayo de 2006). A Culture of Conspiracy: Apocalyptic Visions in Contemporary America. University of California Press. pp. 60-. ISBN 978-0-520-24812-0. Consultado el 5 de enero de 2012.
- Carroll, Robert Todd (2003). «Illuminati». The Skeptic's Dictionary: A Collection of Strange Beliefs, Amusing Deceptions, and Dangerous Delusions. Hoboken, New Jersey: John Wiley & Sons, Inc. p. 175. ISBN 9781118045633. Consultado el 17 de enero de 2013.
- Nattrass, Nicoli (2012). The AIDS Conspiracy: Science Fights Back. New York: Columbia University Press. pp. 4, 23–27. ISBN 9780231149129. Consultado el 17 de enero de 2013. (requiere registro).
- Gilroy, Paul (2000). «Planetary Humanism». Against Race: Imagining Political Culture Beyond the Color Line. Cambridge, Massachusetts: Harvard University Press. pp. 352-353. ISBN 9780674000964. Consultado el 17 de enero de 2013.
- «The Dulce Book by Branton» (en inglés). Consultado el 20 de marzo de 2023.
- Pentagon Attack Maneuver Minimized Fatalities
- «The Illuminati: The Secret Society That Hijacked The World - Jim Marrs». The Illuminati: The Secret Society That Hijacked The World - Jim Marrs (en inglés). Consultado el 25 de marzo de 2023.
- «Revealed – the capitalist network that runs the world - By Debora Mackenzie and Andy Coghlan» (en inglés). Consultado el 25 de marzo de 2023.
- «Orbis is a growing database of companies and other entities» (en inglés). Consultado el 25 de marzo de 2023.