Retablo de las Candelas (Catedral de Orense)

Talla de Nuestra Señora de la Candelaria.

El retablo de las Candelas, obra del ensamblador Alonso de Freiría y cuyas trazas corresponden al platero Isidro de Montanos,[2] constituye el principal elemento ornamental de la capilla. La estructura se compone de un cuerpo con tres calles, banco y ático. El nicho central, de medio punto, está enmarcado por dos pares de columnas coronadas por capiteles corintios y decoradas con relieves en el tercio inferior, mostrando el resto fuste estriado en diagonal. Las hornacinas de las calles laterales, de forma rectangular, lucen sobre ellas frontones partidos clásicos rematados por un óvalo dorado en bajorrelieve, mientras que a un lado se halla un pilar idéntico a los que flanquean la hornacina central, coronada esta por un voluminoso frontón curvo. Este frontón se apoya en una prominente cornisa escalonada la cual descansa en la calle central sobre discretas ménsulas (de rocalla las de los extremos), apoyándose los tramos de las calles laterales en pequeñas peanas con forma de trapecio invertido.

El ático muestra un Calvario flanqueado por pilastras y columnillas, estas últimas similares a las presentes en el cuerpo del retablo, si bien el tercio superior posee fuste estriado en vertical. Rematado con una cornisa escalonada sobre la que se ubica un frontón partido curvo rematado por volutas en el interior, a ambos lados de la escena se disponen discretos aletones rematados también en los extremos por volutas.

El banco, decorado con vistosas ménsulas de rocalla y con el símbolo del avemaría en el centro, bajo la imagen titular, presenta una importante mutilación en el extremo derecho, probablemente efectuada con el fin de adaptar el retablo al espacio en el que se encuentra puesto que en la zona donde se halla la sección faltante se ubica una puerta. Bajo el retablo, sin formar parte del mismo, destaca un altar pétreo con superficie de madera decorado en los extremos del frontal con ménsulas.

La hornacina principal se encuentra presidida por una talla barroca del siglo xvii[2] realizada en madera policromada la cual representa a Nuestra Señora de la Candelaria.[4] Esta imagen, ataviada con una túnica roja y una capa azul (ambas con estampación dorada), luce corona, un cirio en la mano derecha y al Niño Jesús en la mano izquierda, apoyándose en una peana decorada con las cabezas de tres serafines. A ambos lados de la hornacina central se encuentran dos tallas anónimas fechadas en el primer cuarto del siglo xviii[2] realizadas también en madera policromada, representando la de la izquierda a San Ramón Nonato, caracterizado por portar una custodia y una palma circundada por tres coronas, y la de la derecha al Arcángel Rafael, la cual se apoya en un bastón de peregrino del que cuelga una diminuta cantimplora, si bien carece del pez que debería llevar en su mano izquierda.

En lo que respecta a los demás elementos de la capilla, de medio punto con bóveda de casetones policromados, en el muro izquierdo se halla un cuadro de la Divina Misericordia con el lema «JESUS, EN TI CONFIO», obra de Maricarmen Mouronte en 2006,[2] mientras que en el muro de la derecha se encuentra una tabla de madera del coro de la catedral con un bajorrelieve de San Pelayo representado como un hombre joven en vez de como un niño, como suele ser habitual. Por su parte, la reja que cierra el espacio fue elaborada por el herrero Gabriel Pérez y data de 1842.[2]

Esta capilla presenta la particularidad de poseer una puerta en la pared frontal, a la derecha del retablo, la cual conduce directamente a través de un pasadizo al trasaltar de la Capilla del Santo Cristo. Este pasadizo, restringido al público, es frecuentemente utilizado por el personal autorizado de la catedral, siendo este el motivo por el que la capilla se encuentra abierta y accesible a los visitantes.