Día de concientización sobre los TEAF, 2016

El consumo de alcohol durante el embarazo puede causar trastornos del espectro alcohólico fetal, que son discapacidades físicas, intelectuales y conductuales que duran toda la vida.

Con frecuencia, cuando una persona tiene un trastorno del espectro alcohólico fetal presenta varios de estos problemas a la vez. Se recomienda que las mujeres que están embarazadas o que podrían estar embarazadas no consuman alcohol. Los trastornos del espectro alcohólico fetal son completamente prevenibles si no se expone al bebé en gestación al alcohol antes del nacimiento.

Lo que sabemos

• Las mujeres que están embarazadas o que podrían estar embarazadas deben tener en cuenta que cualquier nivel de consumo de alcohol podría causarle daños al bebé.
• Todos los tipos de alcohol pueden ser dañinos, incluso todos los vinos y las cervezas.
• El cerebro, el cuerpo y los órganos del bebé se desarrollan durante todo el embarazo y pueden sufrir los efectos del alcohol en cualquier momento.
• El consumo de alcohol durante el embarazo también puede aumentar el riesgo de aborto espontáneo, muerte fetal, parto prematuro y síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL).

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Qué se puede hacer para prevenir los trastornos del espectro alcohólico fetal

Las mujeres pueden:

• Hablar con su proveedor de atención médica sobre sus planes de embarazo, su consumo de alcohol y las maneras de prevenir el embarazo si no lo están planeando.
• Dejar de consumir alcohol si están tratando de quedar embarazadas o podrían quedar embarazadas.
• Pedirles a sus parejas respectivas, familias y amigos que apoyen su decisión de no consumir alcohol durante el embarazo o mientras tratan de quedar embarazadas.
• Pedirles a su proveedor de atención médica u otras personas en las que confíen recursos que las ayuden si no pueden dejar de beber por sí solas.

Los proveedores de atención médica pueden:

• Evaluar a todos los pacientes adultos acerca de su consumo de alcohol, al menos anualmente.
• Recomendarles a las mujeres que no consuman nada de alcohol si hay alguna posibilidad de que estén embarazadas.
• Aconsejar, remitir y hacerles seguimiento a los pacientes que necesiten más ayuda.
• Usar los códigos de facturación correctos para que los costos de la evaluación del consumo de alcohol y la consejería se puedan reembolsar.

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