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Definición Volver al comienzo
Es una irritación e hinchazón del tejido grueso en la planta o parte inferior del pie.
Causas Volver al comienzo
La fascia plantar es una banda muy gruesa de tejido que sostiene los huesos de la parte inferior del pie. Esta fascia puede inflamarse y causar dolor en algunas personas, dificultando el hecho de caminar.
Entre algunos factores de riesgo para el desarrollo de esta afección se pueden mencionar:
Un paciente típico es un hombre activo con una edad comprendida entre los 40 y 70 años.
Esta afección es una de las dolencias ortopédicas más comunes relacionadas con el pie.
Se piensa comúnmente que la fascitis plantar es causada por un espolón en el talón, pero las investigaciones han encontrado que esto no es así. En las radiografías, se observan espolones en el talón en personas con y sin fascitis plantar.
Síntomas Volver al comienzo
El síntoma más común es el dolor en la parte inferior del talón que generalmente es agudo en la mañana y puede mejorar a lo largo del día. Al finalizar el día, el dolor puede ser reemplazado por un dolor sordo que mejora con el descanso.
La mayoría de las personas se quejan de aumento de dolor en el talón después de caminar por un largo período de tiempo.
Pruebas y exámenes Volver al comienzo
Los hallazgos del examen típico abarcan:
Se pueden tomar radiografías para descartar otros problemas, pero tener un espolón en el talón no es revelador.
Tratamiento Volver al comienzo
El tratamiento médico casi siempre es efectivo si se da el tiempo suficiente y puede durar desde algunos meses hasta dos años antes de que los síntomas mejoren. La mayoría de los pacientes mejorará en nueve meses.
El tratamiento inicial consiste generalmente en:
Si estas medidas fallan, colocar el pie afectado en una férula de yeso corta para pierna (una férula de yeso que llegue hasta y la rodilla, pero no por encima de ella) por tres a seis semanas a menudo es muy efectivo para reducir el dolor y la inflamación. Otra alternativa sería usar una bota de yeso (que luce como una bota de esquí), la cual se usa todo el tiempo, pero que se puede quitar para tomar una ducha.
Algunos médicos recetan inyecciones de esteroides, las cuales pueden proporcionar un alivio duradero en muchas personas. No obstante, esta inyección es muy dolorosa y no es para todo mundo.
El tratamiento no quirúrgico no es efectivo en unos cuantos pacientes, para quienes se vuelve necesario realizar una cirugía con el fin de liberar la fascia tensa e inflamada.
Pronóstico Volver al comienzo
Casi todos los pacientes mejoran en cuestión de un año a partir de la iniciación de la terapia no quirúrgica, sin problemas a largo plazo. En los pocos pacientes que requieren cirugía, la mayoría siente alivio de su dolor en el talón.
Posibles complicaciones Volver al comienzo
Las complicaciones con la cirugía abarcan:
Con otros tratamientos, una complicación es el dolor continuo.
Cuándo contactar a un profesional médico Volver al comienzo
Consulte con el médico si tiene síntomas de fascitis plantar.
Prevención Volver al comienzo
Mantener una buena flexibilidad alrededor del tobillo, particularmente el tendón de Aquiles y los músculos de la pantorrilla, probablemente es la mejor forma de prevenir la fascitis plantar.
Referencias Volver al comienzo
Donley BG, Moore T, Sferra J, Gozdanovic J, Smith R. The efficacy of oral nonsteroidal anti-inflammatory medication (NSAID) in teh treatment of plantar fasciitis: a randomized, prospective, placebo-controlled study. Foot Ankle Int. 2007;28:20-23.
Pasquina PF, Foster LS. Plantar fascitis. In: Frontera WR, Silver JK, eds. Essentials of Physical Medicine and Rehabilitation. 2nd ed. Philadelphia, Pa: Saunders Elsevier;2008:chap 86.
Actualizado: 3/4/2009 Versión en inglés revisada por: Linda Vorvick, MD, Family Physician, Seattle Site Coordinator, Lecturer, Pathophysiology, MEDEX Northwest Division of Physician Assistant Studies, University of Washington School of Medicine; and C. Benjamin Ma, MD, Assistant Professor, Chief, Sports Medicine and Shoulder Service, UCSF Dept. of Orthopaedic Surgery. Also reviewed by David Zieve, MD, MHA, Medical Director, A.D.A.M., Inc.