Cómo crear una novela gráfica

Aprende un estilo de dibujo. El estilo Manga y el Cómic americano son populares, o puedes dibujar caricaturas humorísticas y darles un estilo peculiar. Hay muchos recursos disponibles para aprender a dibujar. Tu biblioteca lugar es un excelente lugar para encontrar libros que te enseñen a dibujar, pero lo único que realmente va a mejorar tus habilidades para dibujar es la práctica. Para acelerar el proceso, puedes pedirle a un artista talentoso, por ejemplo, un maestro o un amigo, que te de lecciones o que vea tu trabajo y te haga sugerencias. Usualmente, el sólo observar el trabajo de algún artista talentoso es suficiente para abrir tu mente a las técnicas y las posibilidades. Sobre todo, no tengas miedo de experimentar con tu estilo. Encontrar tu estilo único muchas veces es mucho más valioso que simplemente dibujar como alguna otra persona.

Crea un grupo de personajes. Cuando hagas esto, piensa tanto en su apariencia como en su personalidad y en la historia. Si tienes una trama en mente, eso puede guiar la creación de tus personajes. Desarrolla la apariencia de de tus personajes dibujándolos de varias maneras: eso te ayudará a mejorar tu habilidad para dibujar y tu entendimiento de los personajes. Usa la apariencia de los personajes para desarrollar su personalidad y usa su personalidad para desarrollar su apariencia.

Escribe tus ideas para la historia. Van a empezar como un borrador de tus ideas, pero más tarde vas a querer desarrollar una trama completa. Puedes desarrollar tu trama de diferentes maneras: puedes dibujar páginas como bosquejos, puedes escribir una narrativa, puedes escribir una página llena de ideas, una página llena de bosquejos o la puedes escribir como un guión. Ten en mente que las novelas gráficas ocupan más espacio que las novelas, así que su trama no debe ser tan larga. Usa los personajes y las situaciones generales para imaginarte la trama.

Haz un bosquejo ligero de tus ideas en papel para notas. La forma en que esto usualmente se hace es con imágenes en miniatura. Averigua el tamaño final de la página y dibuja pequeños recuadros en proporción con la página final. Ejemplo, si tu página terminada va a ser de 21.25 x 27.5 cms., entonces haz recuadros de 3.75 x 5 cms. Vas a usar estos recuadros para planear todo el libro, y mientras que muchos artistas sienten que pueden saltarse este paso, tu diseño será mejor si no te saltas la fase de las miniaturas. Las miniaturas también pueden ser una herramienta invaluable para organizar la producción del libro. Las miniaturas también pueden ser cambiadas mucho más fácilmente que las páginas terminadas. Considera a las miniaturas tu ‘mapa’ para llegar al producto terminado. Si hay otros artistas ayudándote o si tú mismo lo llevarás a imprenta, pasarles una fotocopia de tus miniaturas terminadas te asegurará que todos saben lo que esperas que sea el libro.

Crea las páginas finales, también conocido como el arte original. Hay muchos modos de trabajar, y dependerán de varios factores. Si lo vas a publicar tú solo, entonces debes de considerar cómo va a ser impreso, como va a ser cortado, como va a ser pegado, como será transportado, como será distribuido, por nombrar algunos. Si vas a trabajar con una editorial, ellos te dirán todas las especificaciones. Si estás creando un libro único, entonces tienes mucha más libertad y puedes incorporar cualquier medio que quieras. Las preguntas son: ¿Le pondrás color, o será blanco y negro? ¿Las orillas del libro serán recortadas (permitiendo la viñeta abierta) o no (sin viñeta abierta)? Viñeta abierta es cuando los contenidos de la página se extienden después de la orilla de la página y son recortados al tamaño final después del pegado. Permite una apariencia más profesional, pues las impresoras no siempre pueden imprimir hasta la orilla del papel. El pegado (como se mantienen juntas las páginas) también es una consideración importante, pues afectará que tan cerca del centro del libro pongas tu arte. Hay muchos tipos de pegado disponibles, todos con pros y contras. La regla general es que mantengas tu contenido importante a 1.25 centímetro de las orillas y el marco de la página. La mayoría de las novelas gráficas tienen tres o cuatro pasos por página: dibujo a lápiz, poner los textos, entintar y colorear.

Escoge tu papel. Si estás planeando pintar o borrar mucho, tal vez quieras considerar usar bristol o algún otro de grosor medio.

Comienza por dibujar a lápiz. Dibuja sin remarcar mucho y borra con un buen borrador. Haz tantos bosquejos y dibujos finales como tú quieras. También debes poner a lápiz el texto de cada recuadro.

Una vez que ya tengas a lápiz lo que buscas, empieza la fase del entintado. Usa una buena pluma negra o marcador. Hay diferentes puntas para diferentes grosores de línea. Un método alternativo es entintar con pincel, que es más complicado, pero permite un estilo distinto. Un buen uso del entintado puede hacer que tus dibujos se vean dimensionales y definidos.

Entinta los textos. Si no te sientes seguro entintando los textos por ti mismo, pídele a alguien que sí o considera usar una computadora para los textos.

Borra cualquier línea de lápiz que esté de más. El entintado puede ser retocado con pintura blanca (o incluso con corrector líquido, como liquid paper). Pero recuerda que si estás planeando colorear directamente el arte original, los retoques blancos pueden afectar el color desfavorablemente. Así que tal vez quieras colorear una fotocopia del arte original entintado. (Ve los consejos para saber más en cómo hacer una fotocopia)

Colorea tu trabajo. Cualquier medio puede ser utilizado para reproducir el color. Acuarelas, pintura de acrílico, marcadores para arte, lápices de colores, etc. Muchos artistas están empezando a voltear hacia las computadoras para colorear su trabajo. Consigue buenas referencias para la pintura, teoría del color y cualquier hardware/software que planees usar para colorear. ¡Y practica!