Cómo criar pitones bola

Asegúrate de que las pitones hayan alcanzado la etapa de madurez antes del proceso de reproducción. Es importante que los animales que intentas cruzar tengan la edad y el tamaño suficientes. Un pitón macho por lo general necesita pesar más de 700 gramos y tener por lo menos un año de edad. La madurez en las pitones se puede determinar a través del análisis de muestras de semen. Al aplicar una ligera presión sobre la cloaca (la cavidad que se encuentra al final de la serpiente) se producirá una pequeña materia blanca y viscosa que determinará que la pitón macho está lista. Mientras que pitones hembra han sido cruzadas de manera satisfactoria pesando solo 1200 gramos, la mayoría de los criadores recomiendan que estas deban tener al menos 3 años de edad y pesar 1700 gramos para poder cruzarse. Este proceso es muy demandante para animales más pequeños y representa un riesgo para su salud.

Determina el sexo. Lo mejor es estar seguro del sexo de los animales que intentas cruzar, esto puede determinarse por medio de pruebas. Se pueden encontrar videos tutoriales que muestran cómo realizarlas. Estas pueden ser peligrosas para el animal y no deben realizarse sin haber recibido la preparación adecuada o, de lo contrario, pide la ayuda de un experto. Al medir la profundidad de las pitones hembra esta es de solo 3 o 4 escamas, mientras que, la profundidad de las pitones macho, por lo general, es de 7 a 9 escamas. Es posible obtener un resultado positivo falso para hembras si la serpiente se contrae lo suficiente como para evitar la penetración completa durante la prueba.

Establece un periodo de aclimatación. Es necesario tener un periodo de aclimatación para que las pitones puedan volverse fértiles. Por las noches se requiere que la temperatura ambiental del aire sea de una temperatura media de 70 °F, lo que equivaldría a una temperatura baja de 20 °C, por un periodo de tres meses en promedio. POR LAS NOCHES, la temperatura del punto caliente de la jaula debe reducirse a una temperatura media de 80 °F, lo que equivaldría a una temperatura baja de 30 °C, y durante el día, las temperaturas deben regresar a la normalidad a una temperatura alta de 80 °F. La idea es recrear las condiciones climáticas del invierno en África Central. Este corto y refrescante momento les susurra palabras dulces en los oídos a estas hermosas criaturas avisándoles que se aproxima la primavera y que nuevas vidas deben ser creadas.

• Durante este periodo de aclimatación, haz que el macho y la hembra estén juntos de manera periódica. Deja que estén juntos por unos días y luego vuélvelos a separar. Ellos podrían intentar reproducirse en ese periodo de tiempo, pero no surgirá efecto, sin embargo, esto es una buena señal.

Haz que el ambiente vuelva a estar cálido. Luego de ese periodo refrescante, las temperaturas pueden regresar a la normalidad. Las temperaturas que son adecuadas para las pitones bola producen transpiración en la mayoría de los humanos.

Haz que el pitón macho se entusiasme. Muchos pitones bola macho necesitan, además, estímulos adicionales para hacerlos entrar en calor. La manera más simple de hacer esto es colocando un grupo de machos juntos. En este momento, ellos se irán dando cuenta de que están rodeados por otros machos y empezarán a levantarse hasta casi llegar a una posición vertical. Se pueden encontrar fotografías de seis u ocho pitones bola macho en donde parece que estuvieran bailando. Este proceso hace que se interesen mucho en interactuar con el sexo opuesto. Luego de diez a veinte minutos de realizar esta actividad se incrementa en gran medida el interés de los machos hacia las hembras.

Presenta la pitón hembra al macho. Luego de presentarlos, lo mejor que se puede hacer es dejarlos solos y permitir que la naturaleza siga su curso. Puede ser que por ratos ellos peleen un poco, sin embargo, es inusual que se provoquen heridas reales. Lo normal es que se calmen en unos minutos y finalmente puedan conectarse.

Déjalos solos. Los pitones bola pueden estar unidos hasta por dos días. Está bien que les des un vistazo, pero trata de no molestarlos, no tienen ningún apuro. Puede tomarles un largo tiempo completar este importante paso. Es probable que un acoplamiento menor a 3 o 4 horas sea ineficaz.

Espera. Un pitón bola macho necesita más o menos una semana para poder recuperar su potencia. Si tienes más de una hembra para cruzar con él, dale una semana en promedio para que pueda recuperarse.

Espera un poco más. El esperma que el macho deposita en la hembra puede permanecer útil hasta por 2 años.

Busca señales de que la hembra está embarazada, esto quiere decir que podrás ver el contorno de los huevos en su interior. Una vez que puedas verlos, no hay necesidad de que los sigas juntando.

Prepara la caja en donde pondrá los huevos. Consigue una caja en donde la hembra pueda poner los huevos, por ejemplo, una de plástico con musgo húmedo. Ella pondrá los huevos y se enrollará alrededor de ellos.

Retira los huevos. Mueve con cuidado a la hembra lejos de los huevos y ponlos en un sustrato de incubación dentro de un contenedor (una caja de plástico que tenga tapa).

Asegúrate de que la temperatura sea buena. Pon la incubadora a 90 °F, lo que equivaldría a 32 °C. Revisa los huevos una vez por semana para asegurarte de que estén bien. Cada vez que levantes la tapa para revisar los huevos le entrará aire, así que no necesitas hacerle agujeros para que entre aire a la incubadora.

Alimenta a la hembra. Si la hembra no come, intenta bañarla para quitarle el olor de los huevos. Es importante que ella empiece a comer otra vez ya que poner huevos es una tarea que requiere de mucho esfuerzo.

Los huevos deberán empezar a eclosionar luego de aproximadamente 55 días de haber sido puestos.

Pon a los bebés en su propia jaula. Luego de romper el cascarón, los bebés se deben colocar por separado en sus propias jaulas forradas con papel toalla húmedo hasta que muden de piel por primera vez. Luego, puedes utilizar papel periódico o cualquier otro sustrato.

Aliméntalos con ratones recién nacidos. Los bebés empiezan a comer ratones recién nacidos dentro de las primeras dos semanas y deberán alimentarse cada cinco a siete días.