4 partes:Eligiendo el momento oportuno de floración de las amaryllisSembrando los bulbos amaryllisCuidado de la amaryllisReutilizando los bulbos de amaryllis

La planta Amaryllis o Hippeastrum, es una flor tropical oriunda de Sudáfrica.[1] El bulbo de amaryllis es apreciado por los jardineros debido a que es fácil de plantar y replantar después de un corto periodo de latencia. Puede cuidar las amaryllis en huertas o en macetas domésticas, plantando en primavera u otoño.

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Parte 1 de 4: Eligiendo el momento oportuno de floración de las amaryllis

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    Compra los bulbos de amaryllis en el color de su elección. Los puedes hallar en tonos de color rojo, rosado o naranja, además en blanco. También pueden haber combinaciones de algunos colores.
    • Mientras más grande sea el bulbo, más flores tendrán las amaryllis.
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    Conserva los bulbos en un lugar fresco, seco y bien ventilado hasta que estén listos para plantarse. La temperatura ideal para su conservación está entre 4 y 10 grados centígrados (40 y 50 grados Fahrenheit).[2]
    • Usa el cajón para verduras de tu refrigerador para guardar los bulbos, como mínimo 6 semanas. Sin embargo, es mejor no guardar los bulbos junto a las fruta como las manzanas ya que se pueden volver estériles.
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    Elige si quieres que la amaryllis florezca en el invierno o en el verano. Esto dependerá principalmente del clima de tu área. Si hay temperaturas frías en el invierno, por debajo de los 10 grados centígrados (50 grados Fahrenheit), tendrás que plantar el bulbo en una maceta y mantenerla en interiores.

    • Por lo general, las floraciones de invierno son más grandes y duran más que las floraciones de verano.
    • Puedes plantarlas durante ambas estaciones, siempre que haya 6 semanas de conservación en frío entre la última flor en morir y la resiembra.[3]
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    Planta el bulbo en suelo fértil al aire libre o en tierra con composta fértil en interiores aproximadamente 8 semanas antes de la fecha en que desee que florezca.
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Parte 2 de 4: Sembrando los bulbos amaryllis

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    Elige un contenedor con buen drenaje. No uses macetas sin agujeros en la base. Los bulbos de amaryllis son muy sensibles al exceso de agua.
    • La Amaryllis prefiere estar limitada en una maceta, aunque puede sembrarse en algunas huertas más pequeñas.
    • Siembra en huerta cuando las temperaturas estén por encima de los 10 grados centigrados (50 grados Fahrenheit) y no haya riesgo de una fuerte helada. Usa las mismas instrucciones como lo haría para sembrar en una maceta.[4]
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    Elige un contenedor que tenga la mitad del ancho del bulbo en cada lado. Es mejor que hayan 2 pulgadas de tierra entre un lado del bulbo y la maceta. Las mayoría de bulbos de amaryllis prefieren una maceta robusta de 6 a 8 pulgadas.[5]
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    Remoja el bulbo de amaryllis en agua tibia por 2 horas antes de intentar sembrarlo.
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    Compra composta fértil para maceta en una tienda local de jardinería. Puedes comprar mezclas ya hechas que funcionarán bien para este tipo de flor. La tierra de jardín no servirá porque no drenará adecuadamente.

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    Coloca el bulbo de amaryllis en la maceta con las raíces abajo. Coloca tierra de maceta cuidadosamente alrededor del bulbo. Deja el tallo del bulbo, aproximadamente 1/3 de la planta, por encima de la tierra.

    • No presiones demasiado la tierra, ya que necesita que las raíces permanezcan intactas.
    • Si te preocupa que plantarlas con el tallo por encima de la tierra en un jardín pueda forzar que se caiga, coloca una estaca de plantación junto al bulbo para mantenerlo derecho.
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Parte 3 de 4: Cuidado de la amaryllis

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    Coloca la maceta en luz solar directa en las primeras semanas de cuidado. Crece mejor en un clima de 21 a 24 grados centígrados (70 a 75 grados fahrenheit).
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    Riega el bulbo con mucha moderación hasta que alcance 5 cm (2 pulgadas) de nuevo crecimiento.
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    Gira la base de la maceta todas las semanas para estimular el crecimiento recto del tallo.[6]
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    Mueve la maceta a luz solar indirecta cuando empiece a florecer. Debería florecer en alrededor de 2 semanas aproximadamente. Las flores durarán más en una temperatura de 18.3 grados centígrados (65 grados F) que en una más alta.
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    Riega la amaryllis regularmente, como lo harías con la mayoría de plantas de la casa. Añade fertilizante líquido para plantas de interiores a intervalos regulares.
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    Corta las flores a 1 pulgada (2.5 cm) del bulbo cuando empiecen a morir. Cuando el tallo de la flor se marchite, córtalo donde se une al bulbo. Puedes mantener la planta como una planta verde por varias semanas o meses.

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Parte 4 de 4: Reutilizando los bulbos de amaryllis

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    Empieza a regar menos la planta a medida que se acerca la hora de sacar el bulbo.
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    Asegúrate de sacar y guardar los bulbos antes de la primera helada y antes de que las temperaturas lleguen a 10 grados centígrados (50 grados fahrenheit).
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    Recorta las hojas a 5 cm (2 pulgadas) por encima del bulbo.[7] Cuando empiecen a amarillarse por efecto de temperaturas más frías y menos agua, estarán listas para cortarlas.[8]
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    Retira el bulbo y las raíces de la tierra. Ten cuidado para evitar dañar el bulbo.
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    Limpia el bulbo con agua. Sécalo y guárdalo en un lugar fresco y seco, tal como se hace antes de plantar el bulbo. Es mejor si se conserva en un lugar fresco y seco de 6 a 8 semanas antes de plantarlo nuevamente.

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Cosas que necesitarás

  • Maceta de 6 a 8 pulgadas
  • Tierra de maceta con composta
  • Agua
  • Bulbos de amaryllis
  • Fertilizante líquido para plantas de interiores
  • Tijeras de podar o tijeras

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