Cómo dar forma a un pretzel

4 partes:El método formando una U El método del lazo El método del cruce Haz el pretzel suave perfecto

Los pretzels son un bocadillo delicioso que mucha gente ama, especialmente al sumergirlos en mostaza u otros condimentos. Algo que los diferencia de otros bocadillos es su forma cruzada distintiva. Darle esta forma distintiva a un pretzel es más fácil de lo que imaginas. Solo lee el paso 1 para comenzar.

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Parte 1 de 4: El método formando una U

1
Extiende la masa con la mano formando una tira larga y gruesa. Coloca la masa del pretzel en una superficie cubierta de harina y usa las palmas de las manos para amasarla de adelante hacia atrás en el mostrador. Ve extendiendo los extremos hacia afuera para alcanzar el largo deseado.
- La masa de los pretzel tiende a encogerse luego de amasarla por lo que una buena técnica es amasarla hasta la mitad y esperar a que repose por unos minutos antes de hacerlo otra vez.
- La longitud ideal es entre 45 cm (18 pulgadas) y 50 cm (20 pulgadas); así obtendrás pretzels buenos y grandes.
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2
Forma una U con la masa y cruza los extremos. Coloca toda la masa sobre el mostrador acomodándola en forma de la letra U.
- Una vez hecho eso, coge los dos extremos y crúzalos sobre sí mismos dos veces (tal como se muestra en la imagen).
3
Une la parte cruzada a la parte inferior de la U. Coge la parte cruzada del pretzel y dóblalo hacia adentro hasta que los extremos lleguen a la parte inferior de la U.
- Imagina que el pretzel es un reloj y acopla cada extremo con la masa en donde irían los números 5 y 7, presionando con firmeza.
- Si tienes problemas al momento de hacer que los extremos se unan a la masa, usa un poco de agua o leche para asegurarlos en su lugar. ¡Ahora tienes un pretzel simple y bien enrollado listo para hornear!^[1]
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Parte 2 de 4: El método del lazo

1
Extiende la masa. Usa la palma de tus manos para enrollar la masa y formar una tira larga y gruesa de aproximadamente 45 cm (18 pulgadas) de largo y que tenga el grosor de un cigarro.
2
Coge un extremo de la tira con cada mano. Levanta el pretzel y mantén cada extremo separado del otro por 30 cm (1 pie). Tu mano izquierda debe estar un poco más arriba que la derecha.
3
Cruza los extremos de la masa con un movimiento en forma de lazo. Haz que la masa se enrolle sobre sí misma con un movimiento en forma de lazo usando tu mano derecha.
- Solo deja que la masa gire dos veces; puedes detener las vueltas sentando la masa en el mostrador.
4
Presiona los extremos en la curva del pretzel. Todavía debes estar sosteniendo un extremo del pretzel en cada mano.
- Dobla la parte enrollada y une los extremos con la curva del pretzel en el lugar donde irían el 5 y el 7 en el reloj.^[2]
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Parte 3 de 4: El método del cruce

1
Enrolla la masa. Coge una porción de la masa del pretzel y usa la palma de las manos para amasarla. Haz una tira larga de aproximadamente 45 cm (18 pulgadas).
2
Dobla y cruza la masa. Dobla la masa por la mitad y luego cruza los dos extremos sobre sí mismos antes de presionar los extremos sueltos el uno con el otro.
3
Vuelve a doblar la masa por la mitad. Luego pasa los extremos que uniste por donde hiciste la curva de la parte superior. Presiona la masa para asegurar que el cruce no se deshaga.
4
Haz lo mismo con el resto de masa. Debes tener entre 8 y 12 pretzels una vez que termines. Con este método se obtiene pretzels más gruesos y pastosos que con la forma clásica de los pretzels.^[3]

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Parte 4 de 4: Haz el pretzel suave perfecto

1
Alista tus ingredientes. Para hacer los pretzels suaves perfectos, necesitarás los siguientes ingredientes:
- 1 1/2 taza de agua tibia
- 1 cucharadita de azúcar
- 2 cucharaditas de sal kosher
- 1 paquete de levadura seca activa
- 4 1/2 tasas (o 22 oz) de harina sin preparar
- 30 g (2 oz) de mantequilla sin sal y derretida
- 2/3 tazas de bicarbonato de sodio
- 1 yema grande de huevo
- Sal Kosher para espolvorear
2
Mezcla el agua, el azúcar, la sal kosher y la yema. En un tazón grande, mezcla el agua tibia, el azúcar y la sal kosher. Luego espolvorea por encima el paquete de levadura seca activa y deja que la mezcla repose entre 5 a 10 minutos hasta que se torne espumosa.
3
Agrega la harina y la mantequilla. Agrega a la mezcla de levadura la harina y la mantequilla derretida y mezcla hasta que se combinen. Sigue mezclando hasta que tome la consistencia de una masa suave a la cual se le peguen todos los restos del borde del tazón.
4
Deja que la masa suba. Retira la masa del tazón y engrasa el tazón con aceite vegetal. Regresa la masa al tazón y cúbrelo con una envoltura plástica. Deja reposar la masa en un ambiente tibio hasta que adquiera el doble del tamaño. Debe tomar entre 50 a 55 minutos.
5
Haz hervir el bicarbonato de sodio y el agua. Combina el bicarbonato de sodio con 10 tazas de agua en una olla y deja que hiervan. Durante el tiempo que hierve, prepara dos fuentes. Cúbrelas con papel pergamino y engrásalas un poco con aceite vegetal.
6
Cruza los pretzels. Divide la masa en 8 partes iguales y usa uno de los métodos descritos en las secciones anteriores para darle forma a los pretzels.
7
Sumerge los pretzels en el agua hirviendo. De uno en uno, sumerge los pretzels en el agua hirviendo por 30 segundos. Usa una cuchara o espátula ranurada para retirarlos del agua y colocarlos en las fuentes ya listas.
8
Con un pincel, unta los pretzels con la yema de huevo. Mezcla la yema de huevo con una cucharadita de agua y luego unta suavemente esta mezcla sobre la superficie de cada pretzel. De esta forma, tendrán un color marrón oscuro y parejo una vez que se horneen. Espolvorea un poco de sal kosher sobre cada pretzel.
9
Hornea los pretzels. Hornéalos en un horno precalentado a 450° entre 15 a 14 minutos hasta que adquieran un color marrón dorado oscuro. Colócalos en una rejilla para horno para que se enfríen un poco antes de comer.^[4]

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