Cómo deshacerse del catarro

Inhala vapor. Este método ayudará a que el moco se desprenda y ablande. Puedes calentar agua en un tazón y respirar el vapor al mantener tu rostro sobre el agua y colocar una toalla sobre tu cabeza.

• Para mejorar la eficiencia de este tratamiento, también puedes agregar al agua una cucharadita de cristales de mentol o aceite de eucalipto.
• Utiliza este método dos veces al día, una en la mañana y otra en la noche, antes de acostarte.

Haz gárgaras con agua salada tibia. Haz gárgaras con agua salada tibia cuantas veces sea necesario. Para hacerlo, mezcla media cucharadita de sal en una taza de agua tibia.

• Toma un sorbo y haz gárgaras por 30 segundos, antes de escupirlo. No lo tragues.
• Este tratamiento es efectivo porque la sal posee propiedades antibacterianas y puede sanar la inflamación en tu garganta.

Toma descongestionantes. Los descongestionantes desinflamarán los tejidos y vasos sanguíneos al aliviar la congestión. Puedes comprar estos fármacos en cualquier farmacia sin ninguna receta. Los descongestionantes que se usan con mayor frecuencia contienen principios activos como los siguientes: oximetazolina, fenilefrina o seudoefedrina. La dosis varía según la sustancia:

• Oximetazolina. Para la solución de 0,025%, la dosis debe ser de cuatro a seis gotas en cada fosa nasal. Administra el fármaco dos veces al día. Para la solución de 0,05%, la dosis será de dos a tres gotas en cada fosa nasal y tienes que administrarla dos veces al día.
• Fenilefrina. Una dosis diaria de 10 mg de fenilefrina debe administrarse una vez cada 4 a 6 horas.
• Seudoefedrina. La dosis diaria máxima de seudoefedrina es de 240 mg. Para obtener un alivio inmediato, debes administrar de 30 a 60 mg cada 4 a 6 horas. Si quieres una liberación prolongada, administra el fármaco cada 12 horas al usar una dosis de 120 mg.

Usa un aerosol nasal descongestionante. Compra un aerosol nasal como Olynth de 0,05%, este aerosol contiene una sustancia llamada xilometazolina que contrae los vasos sanguíneos en el conducto nasal.

• Esto ayuda a desinflamar las membranas mucosas y facilita tu respiración.
• Puedes usar este aerosol al inhalar una dosis por cada fosa nasal hasta tres veces por día.

Come frutas y verduras ricas en vitamina A. Las frutas y verduras ricas en vitamina A pueden reconocerse por su color anaranjado (producido por el beta caroteno). Dentro de las frutas y verduras que pertenecen a este grupo se encuentran: zanahorias, naranjas, pimiento rojo, remolacha, bayas, etc.

Aumenta el consumo de vitamina C. Come frutas y verduras ricas en vitamina C y zinc. Puedes encontrar la vitamina C en casi todas las frutas y verduras, mientras que al zinc lo encuentras en germen de trigo, semillas de calabaza y mariscos.

Bebe té de gordolobo. El té de gordolobo disminuirá la congestión en el pecho y eliminará el moco adicional. Usa hojas secas de gordolobo para llenar un colador o filtro de té. Deja reposar las hojas en una taza de agua hervida por diez minutos. Usa miel para endulzar el té y bébelo cuantas veces quieras.

Bebe té de ajo. El ajo aumentará tu inmunidad y descongestionará tus vías respiratorias. Necesitarás de 2 a 3 dientes de ajo fresco, dos tazas de agua y la cantidad que desees de miel.

• Aplasta los dientes de ajo con un tenedor o con el filo del cuchillo. Agrega el ajo a las dos tazas de agua en una olla y caliéntalo.
• Hierve a fuego lento por 15 minutos y deja que el té se enfríe. Añade la miel y bebe lo necesario.
• También puedes comer el ajo crudo si no quieres beber el té de ajo.

Conoce lo que origina el catarro. Si tienes una acumulación excesiva de moco o flema en una cavidad del cuerpo o en las vías respiratorias, es posible que sufras de un catarro. Por lo general, esta enfermedad se produce en dos cavidades pequeñas ubicadas en cada lado de tu nariz, llamadas senos nasales. También se puede producir en el pecho, orejas o garganta. El catarro no es una enfermedad en sí misma, sino un síntoma de otra enfermedad subyacente como las siguientes:

• El resfriado común, u otra infección o la vía respiratoria
• Alergias. La rinitis alérgica o la alergia al polen es otra enfermedad por la que se puede producir el catarro. Una reacción alérgica genera inflamación nasal, lo que deriva en una acumulación excesiva de moco dentro de los senos nasales.
• Pólipos nasales. Estos son bultos carnosos benignos que crecen en el revestimiento de la nariz, lo que impide que el moco se drene de manera adecuada y se produzca el catarro.
• Rinitis no alérgica. Algunas personas son sensibles de forma anómala a los cambios ambientales como al aire contaminado, humo de cigarros, cambios en el clima o a las sustancias químicas irritantes. Todos estos producirán los mismos síntomas que las alergias.

Conoce cómo se desarrolla el catarro. El catarro se desarrolla cuando el sistema inmunológico reacciona ante una infección al enviar glóbulos blancos directamente a la fuente de la infección para combatirla.

• Las membranas mucosas que se encuentran en la zona afectada producirán moco por la acumulación de glóbulos blancos.
• También la zona se inflamará, lo que producirá una mayor congestión.

Ten en cuenta cómo se diagnostica el catarro. El catarro no necesita ningún tipo de diagnóstico o tratamiento si la infección que lo causa se cura por sí sola. Aunque en algunos casos, es posible que sufras de catarro crónico, cuando la enfermedad se prolonga por un periodo de tiempo mayor. En ese caso, se necesita una investigación más detallada para determinar su causa.

• Tu médico examinará tu nariz para ver si tienes pólipos nasales. Para ello, utilizará un espéculo nasal para tener otra vista de la cavidad nasal.
• Los pólipos aparecerán como bultos esponjosos con un color gris amarillento. También, el médico puede recomendar una tomografía computarizada para saber si hay pólipos que no se ven a simple vista.