Un gato salvaje es cualquier gato nacido en la naturaleza que no ha tenido contacto directo con los humanos. Los gatos que alguna vez tuvieron dueño y ahora viven por su cuenta se llaman “callejeros” y no se consideran salvajes. Los gatos salvajes se caracterizan por su comportamiento tímido: huyen cuando alguien se acerca y atacan cuando se siente atrapados. Con el tiempo, los gatos salvajes se pueden domesticar y mantener como mascotas, pero algunos continúan mostrando un comportamiento tímido durante el resto de su vida.

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Pasos

  1. Imagen titulada Tame a Feral Cat Step 1
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    Entiende la sicología de un gato tímido. Los gatos pueden mostrar una conducta tímida por varias razones, sean o no sean salvajes. Es imposible conocer la historia de un gato. Para acercarse a cualquier gato tímido se debe aplicar siempre el mismo método, pero se necesita tiempo y paciencia dependiendo de la experiencia y el temperamento del gato.
    • Los gatos domésticos que perdieron su hogar (es decir, los gatos callejeros) pueden retomar un comportamiento tímido. Estos generalmente pueden domesticarse más fácil y rápidamente que los gatos salvajes, pero la forma de acercarse debe ser la misma.
    • Un verdadero gato salvaje nunca ha tenido contacto directo con los humanos. Es importante no darles ninguna razón para que se sientan tímidos. Si desarrollan experiencias positivas contigo, se pueden domesticar completamente, pero si los asustas o intentas capturarlos, corres el riesgo de traumatizarlos.
    • Los gatos más difíciles son aquellos que han tenido experiencias negativas con los humanos, sean o no salvajes. Estas experiencias pueden ir desde el abuso hasta algo tan inocente como ser perseguido por los niños, dependiendo del nivel de socialización del gato. Estos pueden ser o no salvajes, pero se deben tratar de la misma forma. Si el gato se encuentra traumatizado, tal vez nunca permita que lo carguen o incluso que lo acaricien, pero todavía puedes tenerlo como mascota y su condición tal vez mejore con el paso de los años.
    • Los gatos recién nacidos y los jóvenes son mucho más fáciles de domesticar, independientemente de su experiencia previa con las personas. A menos que se presente una condición especial (como la pérdida de la madre), generalmente es mejor esperar hasta que tenga al menos 6 semanas de edad antes de intentar adoptarlo. Los gatos pequeños se deben alimentar con biberón y necesitan cuidados especiales, al igual que socialización extra.
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  2. Imagen titulada Tame a Feral Cat Step 2
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    La confianza es la clave para domesticar un gato tímido.
  3. Imagen titulada Tame a Feral Cat Step 3
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    No intentes perseguir, arrinconar o cargar un gato tímido. No solo provocarás que el gato te muerda o te arañe, sino que también disminuyes cualquier posibilidad de ganar su confianza.
    • Se necesita tiempo para domesticar un gato salvaje. Uno pequeño de tan solo 5 semanas de edad se puede domesticar en 2 días (aproximadamente), simplemente cuidándolo un par de horas en la mañana y en la tarde, pero para un gato con más de 1 año de edad se necesitan varias semanas para poder domesticarlo o incluso acariciarlo.
    • No te apresures. Si intentas acariciar o cargar al gato, después de algunas semanas tendrás que empezar de nuevo y sí, eso significa que las semanas que invertiste domesticando el gato habrán sido un desperdicio.
  4. Imagen titulada Tame a Feral Cat Step 4
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    Socializa un gato salvaje al aire libre.
    • Cuando veas el gato, maúllale. Puede parecer algo tonto, pero es un signo de no agresión. Sentarse es otra forma de mostrar que no representas ningún peligro.
    • No camines directamente hacia el gato. Acercarse al gato es un comportamiento que demuestra agresividad. Mantén la distancia y deja que el gato sea el que elija los límites. Con el tiempo se acercará.
    • Cuando el gato se acostumbre a verte como su fuente de alimento y lo veas regularmente, intenta alejarte y siéntate a una distancia segura de la comida. Si el gato confía en ti, podría comer en tu presencia.
    • Con el tiempo, se reducirá la distancia que el gato necesita para sentirse seguro. Siéntate más cerca de la comida gradualmente y deja que el gato venga hacia ti, pero no camines hacia él. Es importante dejar que el gato camine hacia ti, no lo contrario.
  5. Imagen titulada Tame a Feral Cat Step 5
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    Alimenta al gato en una caja, dejando la puerta abierta, para que no tenga miedo a la caja en sí. Con el tiempo, puede sentirse cómodo comiendo contigo justo al lado del tazón.
  6. Imagen titulada Tame a Feral Cat Step 6
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    Antes de intentar cualquier contacto físico con el gato, deja que te olfatee. Puedes extender tu mano hacia el gato y permitir que te olfatee o extenderle un sombrero, unos anteojos o cualquier otro objeto con tu aroma. Puedes utilizar un palo (que es lo que utilizan la mayoría de las personas) y frotarlo con tus manos para que atrape tu aroma. Después de hacerlo durante un par de días, intenta alimentar al gato y utiliza el palo al mismo tiempo para acariciar su cabeza. Puedes hacerlo, pero después de algunos días.
    • Podrás notar si se siente cómodo cuando lo acaricias por su lenguaje corporal. Si no retrocede, acarícialo. El momento ideal para hacerlo es cuando esté comiendo. Muévete lenta y gradualmente y si deja de comer o si retrocede, desiste e inténtalo otro día.
    • Cuando el gato se sienta cómodo cuando lo acaricies, estará listo para que lo lleves adentro. Tiéntalo con comida y deja que entre por sí solo.
    • Algunos gatos, especialmente aquellos que han sido traumados, podrían nunca progresar más allá de alguno de los pasos. Estos gatos tal vez nunca se puedan domesticar por completo, pero todavía puedes mantener una relación más distante con el animal. Si el gato entra a tu casa, dale mucho espacio. Con el tiempo pueden sentirse a gusto o también pueden encontrar lugares “seguros” en tu hogar donde les guste interactuar o tal vez nunca permitan el contacto físico.
  7. Imagen titulada Tame a Feral Cat Step 7
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    Captura el gato y domestícalo al interior de tu hogar (no recomendable).
    • Si te preocupa la seguridad del gato, puedes capturarlo y domesticarlo al interior de tu hogar. Es algo estresante y aterrador para el gato y los resultados podrían no ser tan buenos.
    • No intentes capturar un gato tímido persiguiéndolo, acorralándolo o cargándolo. Es peligroso y lo asustará. También es probable que te arañe o incluso te muerda, si lo cargas o lo arrinconas.
    • Utiliza una trampa que no le haga daño al gato. Se pueden comprar en línea y en ocasiones se pueden rentar en las instituciones dedicadas al rescate animal. Pon algún alimento con aroma fuerte dentro de la trampa. El gato entrará y quedará atrapado.
      • Podrías armar una caja con un cable, resorte o cualquier otro elemento elástico para cerrar automáticamente la puerta y mantenerla cerrada cuando hales un cordón para encerrarlo. No uses un cepo, red ni bolsa, sino ¡el animal quedará traumatizado!
    • Después de maullarle o hablarle al gato para llamar su atención, pon comida dentro de su trampa o caja improvisada y aléjate lentamente un par de metros. Asegúrate de estar sentado, porque si estás de pie o inclinado hacia él, lo tomará como una amenaza.
    • Pon una toalla, manta o lona sobre la trampa. Esto calmará al gato mientras lo transportas. Espera 10 o 15 minutos para que se calme.
  8. Imagen titulada Tame a Feral Cat Step 8
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    Crea un lugar seguro para el gato. Lo ideal es que este lugar sea lo suficientemente abierto para que el gato tenga espacio de huir de tu contacto, por lo que el baño generalmente no recomendable. El espacio debe ser relativamente tranquilo y se debe utilizar solo por la persona que intenta domesticar el gato.
    • Darle espacio al gato para que corra es mejor que darle lugares para que se esconda. Si el gato se esconde, es importante que nunca te le acerques mientras esté escondido. Cuando los gatos se esconden, se encuentran arrinconados y vulnerables y no quieren que los encuentren. Pretende que son invisibles cuando estén escondidos y deja que salgan cuando se sientan cómodos.
    • Para domesticar un gato al interior de tu hogar debes aplicar el mismo método que se utiliza para domesticar un gato al aire libre. Lleva comida siempre que vayas a interactuar con el gato y siéntate o acuéstate sobre el piso mientras come, hasta que se sienta lo suficientemente cómodo con tu presencia.
  9. Imagen titulada Tame a Feral Cat Step 9
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    Haz el gato parte de tu familia:
    • Llévalo a que lo castren o lo esterilicen y que lo vacunen cuanto antes. Si tienes otros gatos, debes hacerlo antes de llevar el nuevo gato a casa, también debes llevarlo a que le realicen las prueba para VLFe, VIF y parásitos.
    • Al principio tal vez el gato no utilice la caja de arena. Si hace sus necesidades en otro lugar, no te enojes, simplemente mueve la caja al lugar donde fue y si ves que se prepara para hacer sus necesidades, colócalo en la caja. A los gatos les gusta hacer sus necesidades en las esquinas y cerca de las puertas, por lo que esas son buenas opciones para ubicar la caja de arena. Si lo deseas, también puedes utilizar varias cajas de arena.
    • Si el gato se mantiene muy a la defensiva, tal vez debas darle algo de espacio para él solo, donde pueda ser él mismo la mayor parte del día. Ve y dale comida en un horario regular y pasa tiempo con él mientras come. Con el tiempo, siéntate más cerca del gato hasta que te permita acariciarlo.
    • A los gatos salvajes les gusta esconderse, pero eso generalmente los pone en una posición de estar arrinconados, lo que aumenta su conducta defensiva. Lo mejor al principio es no darle lugares para que se esconda. El espacio ideal para la domesticación debe ser abierto con mucho campo para que el gato huya, de forma que nunca se vea arrinconado y siempre tenga espacio para alejarse si se siente abrumado.
    • El juego es una parte muy importante en el proceso de socialización de los gatos. Los juguetes colgantes con forma de caña de pescar, los láseres y otros juguetes interactivos son los mejores y ayudan a forjar un lazo de amistad con el felino. Algunos gatos salvajes muestran ganas de jugar desde el principio, mientras que otros se toman su tiempo incluso cuando se sienten cómodos con las caricias.
    • Cuando sientas que el gato esté listo, intenta cargarlo. La forma correcta de cargar un gato es colocar una mano en su parte trasera, debajo de la cola y la otra en su parte inferior justo detrás de las patas delanteras y cargarlo hacia el pecho, como cuando se pone un bebé sobre el hombro para que eructe. Hazlo lentamente. Si el gato no está listo para cargarlo, simplemente se alejará antes de que puedas hacerlo. Muchos gatos salvajes nunca permiten que los carguen.
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Consejos

  • Para incentivar el gato para que se relaje, acuéstate en el piso. Te verás mucho menos amenazante.
  • No lo molestes. Dale atención pero no lo fastidies.
  • Hablar con una voz suave y relajante como lo harías con un bebé siempre es útil con cualquier animal, sea o no salvaje. Acelera el proceso de domesticación.
  • Los gatos muy tímidos por lo general solo se apegan a una o dos personas y siguen siendo tímidos frente a los demás, huyendo o escondiéndose.
  • Si te acercas lentamente, el gato casi siempre da una advertencia antes de golpear. Si extiendes tu mano para dejar que el gato te olfatee y gruñe, se aleja o pone su peso sobre una garra, retira la mano. El gato no está listo para que lo acaricies.
  • No intentes liberar un gato salvaje. Liberar un gato salvaje en otro lugar diferente a donde lo encontraste no es recomendable. Los otros gatos defenderán su territorio y arrinconarán al gato hasta un lugar en el que posiblemente pase hambre, además es ilegal.
  • Las garras de los gatos pueden ser muy peligrosas. Sé muy cuidadoso cuando manipules un gato salvaje. No intentes manipular un gato salvaje particularmente defensivo a menos que tengas entrenamiento o experiencia para manipular gatos.
  • Habla con calma y nunca intentes tocar al gato con tus dedos extendidos.
  • Los guantes pueden ayudarte a proteger tus manos, pero es malo utilizar guantes para manipular un gato que no quiere que lo toquen. Eso asusta al gato y ralentiza el proceso de domesticación.
  • Si vas a cargar un gato pero no estás seguro de cómo va a reaccionar, mantelo abajo y bien lejos de tu cara.
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Advertencias

  • Antes de permitir el contacto entre el nuevo gato y los gatos de tu familia, siempre haz que lo revisen para ver que no tenga enfermedades transmisibles como el virus de la leucemia felina (VLFe) o el virus de la inmunodeficiencia felina (VIF). Hasta la fecha no existe prueba para la rabia que no requiera del sacrificio del animal. Te lo reiteramos, intenta observar el animal en su hábitat natural.
  • Siempre actúa con seguridad y precaución. Los gatos salvajes atacan y huyen cuando se los manipula, así que debes socializar con ellos antes de intentar manipularlos o atraparlos de forma segura con una trampa que no les haga daño. Siempre ten cuidado con cualquier enfermedad potencial que pueda llevar cualquier animal salvaje y ten en cuenta que dichas enfermedades pueden ser transmitidas a tus mascotas.
  • No te le acerques a un gato rápidamente, sino podría saltarte encima.
  • Busca atención médica para cualquier mordedura y vigila de cerca los arañazos.
  • No toques ni cargues un gato salvaje o semisalvaje hasta que estés completamente seguro de que está listo. Incluso un gato muy joven puede hacerte daño.
  • Nunca le quites las garras a un gato que viva en la naturaleza. Los gatos necesitan sus garras para cazar y defenderse. Considera la opción de quitarle las garras al tuyo solo si permanece en casa en todo momento.
  • Algunos animales salvajes pueden tener enfermedades, garrapatas, pulgas, etc. Observa el animal en su hábitat natural durante algunos días para ver si tiene alguna enfermedad ¡antes de manipularlo!
  • No intentes tocar, domesticar, ser amistoso o acercarte a un animal salvaje adulto. Deja que los expertos lo hagan.

Acerca del artículo

Categorías: Adiestramiento de gatos