2 métodos:Freír el huevo perfectoServir huevos fritos

Voltear huevos fritos es uno de las cosas más intimidantes para cualquier chef principiante de desayunos. La meta de una clara ligeramente crocante y bien cocida no es difícil de alcanzar, pero solo se logra con un poco de práctica. No hay nada tan espléndido como un huevo perfectamente frito, que sabe bien casi con todos los platillos que puedas imaginar.

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Método 1 de 2: Freír el huevo perfecto

  1. Imagen titulada Fry an Egg Step 1
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    Pon una sartén en la cocina a fuego medio. Usa una sartén con el espacio suficiente para que se esparza la clara entre los huevos. Una sartén de 20 cm (8 pulgadas) es perfecta para un huevo, pero necesitarás una de 30 cm (12 pulgadas) para poner de 2 a 3 huevos a la vez.[1]
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  2. Imagen titulada Fry an Egg Step 2
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    Añade un poco de aceite o mantequilla a la sartén mientras se calienta. ½ cucharada aproximadamente suele ser suficiente por huevo. A medida que caliente, gírala para bañar todo el fondo de la sartén con el aceite. Controla la temperatura del quemador para evitar quemar el aceite o la mantequilla.
    • Usar una sartén demasiado grande puede hacer que los ingredientes se peguen, ya que la capa de aceite será demasiado fina para cocinar solo 1 huevo. Añade un poco más de aceite, si este es el caso.
    • Para unos huevos increíblemente ricos, echa un poco de grasa de tocino.
    • El aceite en espray es un ingrediente rápido y fácil para garantizar todo el recubrimiento de la sartén.[2]
  3. Imagen titulada Fry an Egg Step 3
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    Deja que la sartén se caliente hasta que la mantequilla o el aceite estén calientes, pero no quemados. Es mejor tener una temperatura menor, ya que una demasiado alta quemará el aceite y los huevos rápidamente. La idea es que el aceite solo empiece a relucir o que la mantequilla solo empiece a burbujear. Cuando eches el huevo, la clara debe chisporrotear solo un poco.
  4. Imagen titulada Fry an Egg Step 4
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    Casca el primer huevo en un plato o tazón pequeño y viértelo, o casca el huevo directamente en la sartén. Sé cuidadoso cuando lo casques para que no rompas la yema. Cascar el huevo en un tazón primero puede ayudarte a sacar cualquier cáscara que haya caído antes de cocinar. Cuando eches el huevo, oirás un chisporroteo leve, pero nada debe saltar violentamente.
  5. Imagen titulada Fry an Egg Step 5
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    Cocina los huevos, sin tocarlos, hasta que los bordes claros se vuelvan blanco. Cuando no puedas ver el fondo de la sartén, ya que las claras cerca a la superficie se habrán cocido, estarás listo para proseguir al próximo paso. No trates de mover los huevos en este paso, porque todavía estarán gelatinosos y es muy probable que vuelvan a su lugar.
    • Esto suele tomar de 1 a 3 minutos.[3]
  6. Imagen titulada Fry an Egg Step 6
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    Tapa la sartén y baja el fuego cuando los bordes se hayan blanqueado. Ponle tapa a la sartén. Esto atrapará parte del vapor en la sartén, que cocinará la parte superior de los huevos y ayudará a cuajar las claras. Este es el mejor método para que la yema siga líquida, porque un exceso de calor directo puede cocinar la yema debajo antes de que la clara se cocine totalmente.
  7. Imagen titulada Fry an Egg Step 7
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    Observa la dureza de la yema levantando la tapa de la sartén y tocándola suavemente con tu dedo. Cuando ya no haya partes claras ni gelatinosas en la clara, el huevo estará listo. Puedes seguir cocinándolo para tener un huevo más duro, o puedes voltear la sartén y servirlo de inmediato.
    • En promedio, hacer huevos con la yema líquida con este proceso toma unos 5 minutos desde que el huevo toca la sartén hasta que esté listo.[4]
  8. Imagen titulada Fry an Egg Step 8
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    Levanta el huevo de la sartén con un movimiento rápido y firme de espátula. Debes levantar y sacar el huevo rápidamente para no romperlo. Sírvelo y disfrútalo.
    • Salpimiéntalo al gusto mientras el huevo sigue caliente.[5]
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Método 2 de 2: Servir huevos fritos

  1. Imagen titulada Fry an Egg Step 9
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    Fríe el huevo en aceite caliente para que tengas un borde dorado y yema líquida. Para hacerlo, calienta 4 cucharadas (60 ml) de aceite de oliva en vez de 1 o ½. Cuando casques el huevo y lo eches, ladea la sartén para que el aceite caliente y el huevo se desplacen al borde de la sartén, que todavía debe estar sobre el calor. Mientras cocina, usa una cuchara para bañar la parte superior del huevo con aceite de oliva caliente. Cuando los bordes estén dorados y crocantes, saca el huevo, salpimiéntalo y sírvelo.
    • Ten cuidado: el aceite chisporrotea.
    • Esto puede cocinar un huevo en solo de 30 a 60 segundos.[6]
  2. Imagen titulada Fry an Egg Step 10
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    Voltea el huevo a la mitad de la cocción para quede con la yema blanda. En vez de tapar la sartén, solo voltea el huevo después de que la clara haya cuajado para cocinar la parte superior de la yema rápidamente y quede crocante. Asegúrate de usar mucho aceite y maneja la espátula con un movimiento uniforme y rápido para voltear el huevo sin romperlo.
  3. Imagen titulada Fry an Egg Step 11
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    Sirve el huevo con tostadas para tener un desayuno sencillo. El huevo frito con tostadas, acompañado con frutas o carne, es un desayuno clásico en todo el mundo. Si quieres un desayuno sencillo que te deje satisfecho, puedes agregarle:
    • Espinaca o rúcula
    • Tomates o aguacate
    • Tocino, salchicha o jamón
    • Queso
    • Arroz frito
  4. Imagen titulada Fry an Egg Step 12
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    Sirve un huevo frito sobre comida del día anterior para hacer un platillo completo. Unos vegetales, lentejas, arroz e incluso pasta salteados tendrán un mejor sabor con un huevo frito y un poco de yema líquida. Si necesitas mejorar el sabor de un platillo que haya sobrado, no busques más: el humilde huevo frito es la solución.
  5. Imagen titulada Fry an Egg Step 13
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    Pon un huevo frito sobre sándwiches o hamburguesas para que tengas una opción rica y llena de proteínas. También sabrán bien como sándwiches en baguettes o en bollos con un poco de aguacate, queso y tomate. Encima de la hamburguesa, un huevo con la yema líquida puede llevar el sabor de la carne a otra dimensión.[7]
  6. Imagen titulada Fry an Egg Step 14
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    Haz huevos rancheros. Este platillo fácil para el desayuno es un poco como un burrito abierto. Para hacerlo, echa frijoles negros, aguacate, tomate, queso, salsa y cualquier otro ingrediente de taco que te guste a 2 a 3 tortillas de maíz. Encima de cada creación de tortilla, pon un huevo frito y disfrútalo.
    • Los huevos fritos también van bien con guarniciones de papa o camote, así que prueba con papas como base en vez de tortillas.
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Consejos

  • Si cae parte de la cáscara al tazón, sácala con una cuchara.
  • Tantea la temperatura correcta del quemador para que el huevo te salga exactamente como te encanta. Y recuerda que usarás esa configuración del quemador para freír en el futuro.
  • No sazones los huevos fritos hasta que estén a punto de terminar su cocción.
  • Los huevos frescos son los mejores para hacer huevos fritos.
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Advertencias

  • Una sartén con una superficie no uniforme causará problemas. La sartén no estará recubierta uniformemente con aceite y los huevos se deslizarán al lado bajo.

Acerca del artículo

Categorías: Huevo