Cómo hacer un chupetón

Entiende qué es un chupetón. Un chupetón, también conocido como “mordida de amor” o “marca de beso” es esencialmente un moretón causado por succionar o besar agresivamente la piel de otra persona. Al principio es de color rojo, debido a la rotura de los vasos sanguíneos debajo de la piel. Más adelante, se volverá de color morado o marrón oscuro a medida que sana.^[1]

Ten en cuenta por qué querrías hacerle un chupetón a alguien. Los chupetones son una marca de pasión. Por lo general, se hacen por arrebato y por el deseo hacia la otra persona. Hacerle un chupetón a alguien es como marcar tu territorio y mostrarle al mundo que esa persona te pertenece.

• Un chupetón lo puede hacer y recibir tanto un chico como una chica. ¡No tiene un género exclusivo!^[2]

Antes que nada, pide permiso. Un chupetón es una marca sexual, lo cual lo hace inapropiado para la escuela, el trabajo o los abuelos que te visiten. Es posible que algunas personas deseen evitar la vergüenza de ser descubiertas con un chupetón, así que nunca debes hacer uno sin consultar los sentimientos de tu pareja al respecto.

• Asimismo, recibir un chupetón puede ser algo doloroso, lo cual puede arruinar el momento para algunas personas. ¡Estás advertido!

Intensifica la tensión. Simplemente no vayas directamente al cuello de tu pareja y hagas el chupetón. Primero, pasa un rato besándola y dándole besos franceses. Luego, mueve tus labios hacia su cuello. Empieza con besos suaves, luego con besos más fuertes e insistentes alrededor de su cuello y clavícula. Si tu pareja parece disfrutarlos, es probable que tengas la aprobación de hacerle un chupetón.

• “Chupetón” no es la palabra más atractiva que puedas susurrar al oído de alguien, así que si has evitado pedir permiso hasta ahora, debes mencionarle a tu pareja que deseas dejarle una marca en su cuello y ver cómo responde.

Escoge tu ubicación. Los chupetones son más efectivos en la piel fina y delicada, por eso se suelen encontrar en el cuello. Sin embargo, la piel en la parte inferior del codo o en la parte interna del muslo también son lugares óptimos.

• Si sabes que tu pareja estaría muy avergonzada con el hecho de tener un chupetón visible, no se lo hagas en el medio de la garganta en donde cualquiera lo pueda ver.
• La parte posterior del cuello es una buena opción si tu pareja tiene el cabello largo. Como alternativa, puedes hacérselo en la clavícula o cerca del hombro para que la piel se pueda cubrir con una camiseta normal de cuello redondo.

Separa tus labios ligeramente y colócalos en su piel. Imagínate que haces la letra “O” con tus labios y luego presiónalos firmemente sobre la piel de tu pareja para que puedas hacer un buen sello (sin dejar ningún hueco para que el aire pueda salir). Trata de mantener tu boca suave y atractiva mientras lo haces, en lugar de hacer fruncir tus labios.

Succiona la piel. La clave es succionar lo suficientemente fuerte como para romper los vasos capilares debajo de la piel, pero no tan fuerte como para causarle mucho dolor a tu pareja. Necesitarás succionar durante 20 o 30 segundos para dejar una marca. Recuerda:

• Mantener tus dientes fuera del camino. No debes clavarlos de manera dolorosa en la piel de tu pareja.
• Romper la succión. Si 30 segundos de succión te parece demasiado extraño, trata de hacerlo durante 10 segundos, bésala, succiona otros 10 segundos en el mismo lugar y así sucesivamente.
• Controlar la cantidad de saliva en tu boca. No querrás dejar un chorro de baba en el cuello de tu pareja a medida que le haces el chupetón, así que trata de tragar cualquier exceso.

Termínalo con suavidad. Cuando termines de succionar, trata de besar suavemente el área (lo cual probablemente se sienta más sensible ahora). Reanuda con los besos apasionados como de costumbre.

Espera unos minutos para que el chupetón aparezca. Así como cuando te haces un moretón, no podrás ver el chupetón de inmediato. Por lo general, aparecerá después de 5 o 10 minutos y puede ser de un color rosado claro hasta un púrpura oscuro.

Hazlo más oscuro (opcional). Si quieres que el chupetón sea más grande u oscuro, regresa al mismo lugar y repite el proceso.

Detente si te lo pide. Tal vez tu pareja piensa que está bien tener un chupetón, pero odia la forma en que se siente mientras lo haces, o tal vez decide que no puede correr el riesgo de que sus padres o jefes vean la marca. Siempre respeta los deseos de tu pareja si te dice que no, incluso si ya empezaste el proceso. A veces, un chupetón se ve como una marca de confianza, pero abusar de ella no está bien.

Utiliza un corrector cosmético. Un poco de maquillaje o corrector puede ser muy efectivo para cubrir un chupetón, solo asegúrate de conseguir un color que coincida con tu tono de piel y aplícalo correctamente. De lo contrario, se verá demasiado obvio.^[3]

• El maquillaje teatral es extra grueso y pesado, así que es posible que puedas recurrir a él si tratas de ocultar un chupetón grande.

Usa una bufanda. La bufanda es tu mejor amiga cuando se trata de ocultar un chupetón en el cuello y además es un artículo de moda que nadie te podrá cuestionar si lo usas (a menos que la temperatura sea de 38 °C o 100 °F). Envuelve la bufanda estratégicamente alrededor de tu cuello y asegúrate de verte en un espejo de vez en cuando para comprobar que no se haya movido y que tu chupetón quede expuesto.

• Otras opciones para cubrir un chupetón en el cuello incluyen usar un suéter con cuello (te lo reiteramos, cuando las condiciones climáticas lo permitan) o soltar tu cabello, si es lo suficientemente largo.

Cúbrelo con una tirita. Una tirita cubrirá efectivamente el chupetón y le dará tiempo para sanar lejos de las miradas indiscretas de los demás. Sin embargo, tener una tirita en el cuello puede ser muy obvio, así que tendrás que inventar una excusa muy creíble para usarla, por ejemplo: “Me quemé con mi plancha” o “Me salió un grano”.

• Si recibiste el chupetón en la parte interna del codo, tienes suerte, ya que puedes decir que donaste sangre y por lo tanto, ¡actuar como un héroe!