Cómo improvisar en el piano

Muchos de ustedes sentados en casa se estarán preguntando qué es la improvisación. La definición simplificada es actuar o tocar sin haberse preparado. Improvisar puede mejorar tus habilidades al tocar el piano.

Anuncio

Pasos

1
Ten conocimiento de una gran variedad de música, para no imitar ninguna canción.

Anuncio
2
Aprende las escalas. Aprende una que tenga muchas notas sostenidas y bemoles, como el Si Mayor. Practica la escala que te aprendas si quieres con la mano derecha primero. Puedes darte cuenta que estas escalas “difíciles” son en realidad más sencillas de tocar que Do Mayor, ya que puedes “ver” cómo está formada la escala.
3
Aprende los acordes. Se sugiere que te aprendas un acorde de tres antes de moverte a las cuatríadas, etc. Las tríadas consisten de tres notas (1-2-3) y entre dos notas y la tónica (1-2 ó 1-3) hay un intervalo diferente. Como ejemplo rápido, una tríada de Do Mayor consiste de Do-Mi-Sol. Entre Do-Mi hay una tercera mayor (M3), mientras que entre Do-Sol el intervalo es una quinta perfecta (P5).
4
Hay muchas formas de improvisar. Aquí te sugerimos algunas técnicas para que las intentes--- puede que encuentres que una te es más fácil que otras y va de acuerdo a tu forma de tocar, así que ¡prueba con todas primero!
- Método 1
  - Siéntate y toca notas sólo de la misma clave (Fa, Sol, Mim, La#, etc.)
  - Deja que tu mano izquierda toque los coros de fondo (acordes lentos o separados) en la misma clave).
  - Deja que tu mano derecha toque la melodía.
  - Cambia claves una vez que mejores para darle un sentido más amplio y complejo, y amplificar la belleza de la canción.
- Método 2
  - Toca una pieza lenta de 4/4 y en cada compás toca un acorde con la mano izquierda.
  - Con la derecha, improvisa una melodía dentro de ese acorde.
  - En el siguiente compás cambia a un acorde diferente y sigue agregando la melodía en ese acorde.
  - Sigue haciendo esto hasta que mejores (o te aburras).
- Método 3
  - Una vez que hayas aprendido a tocar algunas escalas con ambas manos, intenta improvisar con las dos al mismo tiempo. Consigue que tus dedos se muevan en la misma escala... sonará bien.
  - Intenta jugar una especie de juego de “llamada y respuesta” con tus manos. Toca una frase aleatoria con una mano e intenta repetirla con la otra mano. Empieza con movimientos sencillos. Eventualmente te darás cuenta de que tus manos pueden generar ideas melódicas simultáneamente y que quedan bien juntas.
- Método 4
  - En lugar de simplemente tocar acordes o arpegios con una mano, intenta hacer que la primer o última nota de ese acompañamiento forme su propia melodía. El dedo pequeño (conocido comúnmente como “meñique”) y el pulgar tienden a ser los más convenientes para tocar de esta forma.
  - Intenta tocar acompañamientos con tu mano derecha y los acordes o arpegios con tu mano izquierda.
Anuncio

Consejos

La improvisación no puede ser completamente espontánea... debe ser construida en un vocabulario de instrumentos musicales. Estos pueden incluir pequeñas frases de melodías, ritmos, acompañamientos, progresiones armónicas, etc. Entre más expandas tu vocabulario, más música podrás llamar “tuya”.
Como con todo lo que tiene que ver con música, la práctica es la clave.
Si te equivocas y accidentalmente tocas una nota que no entra en esa clave, pretende que fué a propósito y sigue en esa nueva clave, no te regreses. (EJEMPLO: Clave de Do → tocas Do...Mi...Sol...La...Fa#...Do...<-- ahora estás en la clave de Re)
Si te equivocas, finge que todo era parte de la canción y sigue tocando (ejemplo: estás tocando todo bien y de repente el meñique toca la nota incorrecta... empieza a tocar torpemente y rápido en esa nueva clave, y gradualmente regresa al tono correcto.
Varía el volumen, intensidad, velocidad y otras dinámicas para agregar emoción y belleza. Usa la improvisación para soltar tu enojo o calmar tus preocupaciones. Toca lo que tu corazón te dice que toques (trillado, pero cierto).
Recuerda, para hacer esto también debes escuchar a otros tocar diferentes piezas, y escucha a lo que otros improvisan también, para que tengas una idea de cómo se hace.
Encuentra un lugar tranquilo con una ventana. Esto te ayuda a ser tú mismo y dejar que las cosas que guardas dentro, salgan en cada tecla. La inspiración llega muchas veces cuando ves la belleza de la Tierra.
Experimenta tocando ritmos contados (4/4 etc) y un ritmo totalmente libre. Con el ritmo libre, no hay ninguna regla. Puede que ésto te ayude a obtener nuevas ideas de forma más sencilla que intentar meter toda la inspiración en un ritmo en particular.
Graba tus canciones a tiempo y seguido. Escucha tus grabaciones. Cuando estás empezando, puede ser difícil recordar cosas que has tocado. Si escuchas las grabaciones, puede que escuches algo bueno y que hayas olvidado. Luego puedes elegir esa idea y usarla de nuevo... por lo tanto ayudando a construir tu vocabulario musical.
Aprende los patrones de música. Un glissando duro y corto da la impresión de enojo y reproche. Los arpegios en el bajo tienden a dar ese sentimiento de movimiento. Observa los patrones en el habla y la música y usa esas observaciones a tu favor.
Relájate y suelta tus dedos

Anuncio

Advertencias

No sientas que debes aprender muchísima teoría musical “antes” de aprender a improvisar. Es suficiente el empezar aprendiendo tal vez una escala y un par de acordes dentro de ella... puedes aprender otros acordes/escalas/teoría con el paso del tiempo.
No tengas ninguna pieza o canción en mente mientras tocas; deja que salga de forma natural.
¡No tengas miedo de tocar las notas “incorrectas! No existen las notas incorrectas en la improvisación---¡todo es libre!