Cómo iniciar tu propio vivero

Averigua cuáles son las autoridades legales en tu localidad. Hay varias agencias potenciales que pueden ejercer autoridad sobre tu nuevo negocio, y dado que varían de localidad en localidad, debes averiguar cuáles son en tu caso. Los siguientes son algunos puntos que debes considerar:

• Habilitación comercial: si tienes la intención de comenzar un negocio con un vivero de plantas, lo más probable es que necesites esta habilitación, que puede tener un alto costo.
  
• Clasificación de propiedad: en algunos países, las ordenanzas de zonificación dictan usos posibles para la tierra. Normalmente, un vivero sería considerado "uso para agricultura", pero en algunas interpretaciones puede ser "comercial", "agronegocio" o alguna otra clasificación.
  
• Averigua los requisitos para los permisos de construcción si estás en un área donde tienes que construir un invernadero o tienes intenciones de construir un edificio para almacenar materiales y equipo.
  
• Averigua qué seguros debes contratar para continuar con tu negocio. Esto puede incluir seguro por daños a la propiedad, seguro contra accidentes laborales (si tienes empleados asalariados) y seguro general de responsabilidad civil si esperas que visiten tu vivero.
  
• Infórmate sobre las leyes que rigen a los cultivadores en tu área. En algunas, debes cumplir con los requisitos de inspección agraria del gobierno.
  
• Considera la disponibilidad de agua para riego. Si quieres instalar pozos de irrigación o sacar agua de un arroyo o lago, es probable que tengas que solicitar permisos separados a las autoridades correspondientes de administración del agua.
  

Analiza tu mercado potencial. Tienes que estar en posibilidades de predecir la demanda de tus plantas a fin de poder planificar qué cultivarás. Los siguientes son algunos puntos que debes considerar:

• Las plantas a cultivar: los viveros producen plantas para los jardines de las casas, paisajismo, reforestación y demás usos. Debes decidir si vas a producir productos en recipientes, raíz desnuda o cepellón.
  
• Cantidades: este será un punto difícil. Si produces más plantas de las que puedes vender efectivamente, estarás atascado con el producto extra y tendrás que asumir el costo de tu inversión. No tener las existencias suficientes es un peso económico menor, pero poder satisfacer las necesidades de los clientes es esencial para mantener una buena relación con ellos.
  
• Publicidad: este es un costo que casi todos los negocios deben asumir a fin de asegurarse una porción en el mercado. Decide rápidamente cuál será tu base de publicidad y los fondos de presupuesto en tu plan para abrir un negocio.
  

Selecciona un lote para iniciar tu vivero. Si no eres propietario de un lote de tierra, tendrás que rentar o comprar uno para tu negocio. Asegúrate de que sea adecuado para tus propósitos, esté en la zona correcta y que permita el crecimiento a medida que prospere tu negocio. Además, asegúrate de que el lote tenga un buen acceso, particularmente si esperas que los clientes se acerquen personalmente para comprar tus productos.

Averigua los precios en diversos proveedores de materiales para mantener tus costos bajos. Debido a que estarás en las primeras etapas de tu negocio, deberás desarrollar una relación con los vendedores al por mayor de los artículos que necesitarás para establecerte. Nos referimos a artículos como los siguientes:

• Semillas o plántulas: si no tienes la intención de cosechar tus semillas y plántulas de un área silvestre, tendrás que comprárselas a un proveedor de viveros o a un proveedor de granjas y jardines. Tendrás que comprar todo de la más alta calidad que puedas, al precio más bajo que encuentres.
  
• Contenedores: estos pueden ser tazas de turba para vegetales de temporada o flores, o recipientes de plástico de 1, 3 y 15 galones para cultivar arbustos y árboles en maceta.
  
• Cubiertas para jardín, mantillo y acondicionadores de suelo: igualmente, estos estarán a la venta en las tiendas mayoristas de viveros si compras la cantidad suficiente, sino tendrás que iniciar tu negocio comprando todo al por menor en una tienda de artículos para jardín.
  
• Equipo: puede ser cualquier cosa, desde equipo de irrigación hasta un tractor con un camión de carga, dependiendo del tipo de plantas que cultives. Lo más probable es que necesites como mínimo una camioneta y un remolque para transportar plantas y materiales, y hacer las entregas a los clientes. Para poder desarrollar un plan de negocios preciso, deberás considerar todo lo que necesitas para comenzar: hasta palas, azadas y rastrillos.
  

Infórmate sobre las condiciones locales de cultivo y los problemas potenciales en tu área. Es probable que debas solicitar una licencia para aplicar químicos si tienes problemas con plagas, enfermedades o insectos en tu región.

Habla con los paisajistas locales para saber qué se vende en el mercado. En muchas áreas, hay productos básicos para plantas que se utilizan comúnmente, pero por eso mismo también estarán más disponibles. Pregúntales qué plantas inusuales les piden, y qué especies locales pueden cultivarse y plantarse para el mismo propósito con menos impacto ambiental.

Infórmate sobre la especie de planta que quieres cultivar para determinar un tiempo razonable entre el plantado inicial y el momento en el que la planta estará lista para el mercado. Las plantas ornamentales crecen bastante rápido en las condiciones apropiadas, pero aun así pueden necesitar 1 año o más para estar listas para el mercado. Si se los siembra como semillas, los árboles pueden necesitar entre 3 y 5 años, dependiendo del tamaño del mercado y de la especie.

Con la información brindada en los pasos previos inicia un plan de negocios. Deberás poder crear un gráfico del costo inicial con la inversión inicial y los costos operacionales para determinar cuánto dinero necesitarás para iniciar y mantener tu negocio funcionando hasta que comiences a vender plantas y a generar ingresos económicos.

Habla con prestamistas, agencias del gobierno de ayuda a las pequeñas empresas y a potenciales inversores para ver si puedes desarrollar una estructura de financiamiento que cubra tus costos iniciales.