Cómo limpiar zapatos Sperry

5 métodos:Cepillado Agua y jabón Tercer método: Limpiar áreas específicas con quitaesmalte Quitamanchas de cuero Lavadora

Los zapatos Sperry deben limpiarse cuidadosamente para evitar dañar el cuero. El único método de limpieza adecuado para los zapatos Sperry de gamuza y de nobuck es el cepillado, utilizando un cepillo de cuero. El cuero granulado debe limpiarse con un detergente suave o un quitamanchas profesional de cuero. Aquí te explicamos los métodos más efectivos para limpiar tus zapatos Sperry

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Método 1 de 5: Cepillado

1
Cepilla los zapatos con un cepillo de cerdas suaves. ^[1] Utiliza un cepillo para cuero o un cepillo de dientes con cerdas suaves para cepillar eliminando cualquier suciedad, polvo o desechos de tus zapatos.
- Este método se utiliza principalmente en los Sperry de gamuza y nobuck. Estos tipos de cuero son más sensibles y menos resistentes a la humedad en comparación al cuero granulado. Es por este motivo, que la forma correcta en la que debes limpiarlos es simplemente realizar un cepillado en seco.
- Cepilla los zapatos realizando trazos pequeños hacia la misma dirección. Restregar el zapato con trazos hacia diferentes direcciones puede dejar marcas sobre el zapato.
- Cuando sea posible, usa un cepillo de cerdas de goma en lugar de uno con cerdas de nilón. El caucho deja menos marcas que el nilón.
- Enfócate en las áreas con mayor suciedad.
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2
Aplica vapor sobre los zapatos. Calienta el agua en una vaporizadora o caldera. Mantén el vapor aproximadamente a 12 pulgadas (30.5 cm) del zapato para aflojar un poco más la suciedad del zapato.
- Realiza este paso únicamente en los Sperrys de gamuza, no en los Sperry nobuck.
- No coloques el vapor a menos distancia de lo recomendado. La gamuza es muy sensible a la humedad y estar demasiado expuesta al vapor puede dañar al material rápidamente.
3
Frota los zapatos con una barra limpiadora para gamuza. Enfócate en eliminar las manchas y las marcas. Frota la barra limpiadora para gamuza sobre éstas áreas para limpiarlas.
- Si es necesario, puedes humedecer ligeramente la barra limpiadora para gamuza, esto te ayudará a eliminar las manchas más profundas. La barra limpiadora para gamuza no se humedece fácilmente, pero es recomendable que tengas cuidado cuando realices esto, para que ni la ni los zapatos se empapen de agua.
4
Vuelve a cepillar los zapatos. Utiliza el mismo cepillo de cerdas suaves para cepillar suavemente los zapatos.
- Al cepillar los zapatos en este punto, hará que las pequeñas partículas de suciedad que aún permanecían en el zapato se levanten, dándole a la gamuza y al nobuck esa textura que caracteriza a la marca. Estas piezas de fibra son conocidas como “nap”
- Si no cepillas tus zapatos después del paso previo hará que los zapatos se vean aplanados y que su textura cambie.
5
También puedes rociar a tus zapatos con un aerosol de protección. Sigue las instrucciones del producto de protección para aplicar una capa delgada y así sellar tus zapatos.
- Este paso es opcional, pero aumentará la duración de tus zapatos.
- Luego de aplicar el aerosol de protección, deja que los zapatos se sequen por 24 horas.
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Método 2 de 5: Agua y jabón

1
Retira la plantilla y los cordones. Las plantillas deben lavarse de forma separada, y los cordones pueden deshilacharse si se lavan.
- Si los cordones están muy sucios, tal vez lo más aconsejable es que los reemplaces.
- Las plantillas se quitan fácilmente. Toma la parte trasera de la plantilla, levántala y hazla hacia atrás para sacarla del zapato.
2
Remoja los zapatos. ^[2] Rápidamente remoja los zapatos en una cubeta de agua fría para que todo el zapato se moje.
- En lugar de remojar todo el zapato, podrías también remojar el exterior del zapato con agua fría utilizando una botella con atomizador o una taza de agua.
- No uses agua caliente, porque lo más probable es que el cuero se encoja.
3
Frota un poco de jabón de platos sobre los zapatos. Frota ligeramente 1 cucharadita (15 ml) de detergente suave para platos en la parte exterior del zapato. Utiliza un cepillo de dientes de cerdas suaves o un cepillo para cuero para poder esparcir el jabón sobre toda la parte exterior, restregando todo el zapato.
- Utiliza un detergente suave para platos sin colorantes ni perfume. Estos químicos pueden tener una reacción negativa al ponerse en contacto con el cuero. Un detergente suave funciona mejor y es menos probable que cause problemas.
4
Lava las plantillas. Sumerge el cepillo suave en una solución de agua y jabón de platos. Restriega las plantillas con este cepillo para limpiarlas, lava las plantillas de ambos lados.
- Para quitar olores muy profundos, puedes espolvorear con un cepillo de cerdas suaves bicarbonato de sosa o un talco para pies sobre las plantillas secas antes de restregarlas. No dejes que caiga bicarbonato de sosa o talco para pies en el cuero.
5
Seca los zapatos. Coloca los zapatos en una superficie plana, en un lugar dónde puedan recibir parcialmente el sol, y deja que se sequen al aire libre por 24 horas.
- Evita los lugares en dónde tengan contacto directo con el sol, ya que demasiado sol puede hacer que el cuero se quiebre mientras se seca.
- Las plantillas se deben secar de la misma manera.
6
Acondiciona el cuero. Sigue las instrucciones del recipiente del acondicionador de cuero, aplica el acondicionador en la parte externa del zapato usando un trapo suave.
- Utilizar un acondicionador de cuero es importante si lavas tus zapatos Sperry con detergente. El detergente tiende a secar en exceso el cuero, y el acondicionador ayudará al cuero a revitalizarse devolviéndole su hidratación.
7
Vuelve a armar el zapato cuando termines. Coloca en su lugar la plantilla y vuelve a acordonar el zapato.

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Método 3 de 5: Tercer método: Limpiar áreas específicas con quitaesmalte

1
Remoja el zapato. Rápidamente remoja el zapato en agua fría para humedecerlo.
- También puedes rociar o verter el agua sobre el zapato hasta que éste esté mojado. Si prefieres mojar el zapato rociándolo, lo más recomendable es que trates de mojar las áreas con marcas y manchas notables.
- La limpieza en áreas específicas se realiza en ciertas partes del zapato, principalmente aquellas que tienen manchas o marcas. No debes limpiar todo el zapato utilizando este método.
2
Moja una bola de algodón con quitaesmalte. Moja ligeramente el algodón en el quitaesmalte y apriétalo suavemente para quitar el exceso de líquido.
- Para obtener mejores resultados, usa un quitaesmalte a base de acetona.
3
Aplica el quitaesmalte en las manchas más notables. Quita las manchas más profundas usando el algodón con quitaesmalte. Continúa tocando ligeramente el algodón sobre la mancha hasta que ésta desaparezca del cuero.
- No debes estregar los zapatos, ya que esto puede dañar el cuero.
- El quitaesmalte es especialmente útil al quitar las manchas del cuero con colores claros.
- Seca los zapatos. Coloca los zapatos Sperry en un lugar donde puedan recibir parcialmente luz solar y deja que se sequen, por 24 horas.
- No coloques los zapatos en un lugar dónde reciban luz solar directamente, ya que esto puede dañar y secar el cuero rápidamente.
4
Acondiciona el cuero. Frota acondicionador de cuero en el exterior de los zapatos para hidratar el cuero luego de haberlo lavado.
- Sigue las instrucciones que contiene la etiqueta del acondicionador de cuero.
- El acondicionador de cuero reemplazará algo de la hidratación que perdió el cuero en el proceso de limpieza.
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Método 4 de 5: Quitamanchas de cuero

1
Retira las plantillas y los cordones. Coloca los cordones a un lado y prepárate para limpiar las plantillas de forma separada.
2
Limpia las plantillas con agua jabonosa. Moja un cepillo de dientes con cerdas suaves en agua tibia y detergente suave para platos. Frota las plantillas usando el cepillo de dientes, lava ambos lados de la plantilla.
- Para eliminar los olores fuertes, utiliza un cepillo de dientes para frotar las plantillas con bicarbonato de sosa o un talco para pies. No dejes que el bicarbonato de sosa o el talco para pies caigan sobre el cuero.
3
Aplica el quitamanchas de cuero en un trapo suave. Usa un quitamanchas de cuero profesional o un quitamanchas de cuero específicamente para los zapatos Sperry.
- Se recomienda usar un trapo de microfibra, pero cualquier trapo pude funcionar. Evita las telas duras y el papel.
4
Limpia los zapatos con el trapo. Suavemente frota la parte externa de tus zapatos Sperry con el trapo que contiene el quitamanchas.
- Aplica el quitamanchas de cuero en movimientos pequeños y circulares. Frota el quitamanchas sobre toda la superficie del cuero, enfocándote en las áreas más sucias pero asegúrate de cubrir toda la superficie.
5
Quita los deshechos con un cepillo de cerdas suaves. Debes fregar la suciedad y los deshechos de los zapatos usando un cepillo para cuero o un cepillo de dientes con cerdas suaves.
- Si no notas ningún deshecho en la superficie del zapato, no es necesario que realices este paso.
6
Acondiciona el cuero. Usa un trapo suave para frotar delicadamente el acondicionador de cuero sobre el cuero.
- Sigue las instrucciones del acondicionador para aplicarlo correctamente.
- Pule el zapato con el acondicionador sobre la superficie de cuero haciendo pequeños movimientos circulares. Aplícalo delicadamente pero haz presión.
7
Deja que el zapato se seque. Déjalo sobre una superficie plana por unas 24 horas. Coloca los zapatos en un lugar donde reciban luz solar de forma indirecta.
- No seques los zapatos en luz solar directa, ya que esto hará que el cuero se seque rápidamente.
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Método 5 de 5: Lavadora

1
Quita las plantillas y colócalas en una bolsa de lavandería. Haz un nudo en la abertura de la bolsa para evitar que las plantillas se salgan.
- Tanto los zapatos como las plantillas pueden lavarse en la lavadora, pero las plantillas deben lavarse dentro de la bolsa de lavandería para evitar que se pierdan o que se dañen dentro de la lavadora.
- Puedes usar una funda para almohada en lugar de una bolsa de lavandería.
- Además quita los cordones. Colócalos a un lado hasta que los zapatos hayan sido lavados.
2
Lava los zapatos y las plantillas en la lavadora. Coloca la bolsa de lavandería y los zapatos Sperry en la lavadora. Agrega una pequeña cantidad de detergente de ropa y programa la lavadora en el ciclo más largo con agua fría.
- No uses agua tibia o agua caliente. El cuero es más propenso a encogerse o quebrarse cuando se expone al agua caliente.
3
Deja que se seque en el sol. Coloca los zapatos en un lugar dónde reciban luz solar indirecta y deja que se sequen por 24 horas.
- No dejes que los zapatos reciban luz solar directa, ya que esto puede provocar que el cuero se encoja o se quiebre.
4
Cuida del cuero. Aplica una capa de acondicionador para cuero, o aceite de visón sobre la superficie para devolverle la hidratación al cuero.
- Sigue las instrucciones del acondicionador para aplicarlo correctamente.
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