Cómo no ser descuidado

Aprende a darle importancia a lo que haces. Si eres un estudiante, haz un trabajo en la escuela del que puedas sentirte orgulloso. Si tienes un empleo da tu mejor esfuerzo cada día y estarás satisfecho con los resultados. Aun las personas más desidiosas disfrutan de la recompensa de un trabajo bien hecho. Si le das un valor a lo que haces con tu vida otras personas empezarán a dárselo también.

Date cuenta de que eres importante. Sí eres significativo, para varias personas que te quieren y te apoyarán en varios momentos de tu vida. Pero debes entender también que mucha gente no te apreciará ni serás importante para ella. Tienes que superar el rechazo o la indiferencia de individuos así, y empezar a pensar que cuentas tanto como cualquier persona. Eso mejorará tu confianza para encarar cada día.

Compra un nuevo guardarropa. A veces un cambio en tu apariencia externa pueda marcar la diferencia en todos los aspectos. Usa siempre prendas limpias y que se ajusten a tu cuerpo agradablemente (no entalladas ni tampoco muy grandes): intenta estar siempre arreglado y presentable. Esto no significa que debas ajustarte al estereotipo de un agente de ventas con vestimenta impecable, pero cambiar un poco tu apariencia para darte una imagen más “cuidada” puede ayudar a que la gente se sienta inclinada a acercarse hacia ti.

Consigue un buen corte de cabello. Si eres hombre, asegúrate de evitar los flecos y cualquier cosa que te tape los ojos; cepilla y mantén arreglado tu cabello. Pregunta a tu estilista por el corte que más te favorezca. Si eres una mujer, considera un simple toque degrafilado para darle una apariencia renovada a tu cabello. O si no tienes idea de que puede mejorar tu aspecto, también puedes preguntar a tu estilista. A veces sin cambiar el largo global de tu corte, acomodarlo en capas puede hacerlo ver muy atractivo. Asegúrate de que tu cabello esté limpio, y si lo necesitas para acomodarlo después del baño, usa secadora de pelo.

Si usas maquillaje, lo simple es preferible a lo abigarrado. No hay nada más atractivo que un perfil que luzca natural a plena luz del día. No sobrecargues tu rostro.